"La danza hace que todo sea sue?o"

Antes de ser Amargo, era simplemente Rafael Garc¨ªa. Pero un d¨ªa, tendr¨ªa unos 15 a?os o poco menos, el poeta Curro Albaic¨ªn se le qued¨® mirando y le dijo de golpe que ¨¦l era el Amargo, el gitano al que Federico Garc¨ªa Lorca le escribi¨® un romance. Fue una revelaci¨®n. Rafael se sinti¨® halagado. Tanto, que se cambi¨® el apellido. Pens¨® en las largas tardes de tertulia que su abuelo comparti¨® con el poeta.Eran amigos ¨ªntimos y algo le dec¨ªa a Rafael que Lorca estar¨ªa encantado de que el nieto de su amigo fuera ahora uno de sus personajes.

Se siente cerca del gran escritor y no s¨®lo porque su Garc¨ªa tiene alg¨²n lazo con el Garc¨ªa del poeta, sino tambi¨¦n porque Lorca le acompa?¨® en uno de sus mayores ¨¦xitos: Un poeta en Nueva York, una pieza basada en la obra del escritor granadino, que le vali¨® reconocimiento en todas partes.

Rafael descubri¨® que quer¨ªa ser artista una tarde de cine, cuando con su padre fue a ver Carmen, de Carlos Saura. No pod¨ªa quitar la vista de Antonio Gades, sorprendido con los movimientos del actor. Fue entonces cuando le dijo a su padre, aunque en el fondo se lo estaba diciendo a s¨ª mismo: "Yo quiero ser como ese hombre".

Lleva casi dos d¨¦cadas bailando y ahora tiene en escena Tiempo muerto, que se prorroga hasta el 1 de septiembre en el teatro Alcal¨¢, en Madrid. Saliendo de all¨ª se va a Los ?ngeles y despu¨¦s a Londres, donde va a montar El Zorro. Adem¨¢s del flamenco, ha explorado otros campos de la danza, como bailar¨ªn y como core¨®grafo. Hay quienes le han llamado un artista ecl¨¦ctico.

Pregunta. ?Bailar¨ªn o bailaor?

Respuesta. Yo soy m¨¢s bailaor. He trabajado y estudiado otro tipo de disciplinas, pero me siento m¨¢s bailaor. Como core¨®grafo me gusta m¨¢s trabajar con bailarines cl¨¢sicos. Sin embargo, como int¨¦rprete, me considero m¨¢s bailaor.

P. ?De d¨®nde naci¨® su gusto por bailar?

R. Empec¨¦ a los nueve a?os. En mi casa siempre se escuch¨® buen cante y buenas guitarras. A los 13 ya hab¨ªa firmado mi primer contrato profesional. Despu¨¦s me vine a Madrid, a trabajar con Lola Flores y desde entonces no he parado.

P. Sus montajes m¨¢s recordados se han basado en obras literarias, ?c¨®mo se lleva la gran literatura a la danza?

R. Con el m¨¦todo y con la intuici¨®n vamos creando un personaje en danza que ya existe en literatura. Pero de cada autor, de cada texto, me interesa un sentido concreto. De Lorca, por ejemplo, me interesa el dramatismo, todo lo austero y todo lo raro que llevaba dentro. De Cervantes me quedo con la aventura, todo lo barroco, todo lo enrevesado. El aporte en la danza es que cuando t¨² lees algo lo lees como es, pero con el cuerpo no hay nada literal. T¨² escribes un movimiento que a unos les parecer¨¢ decadente y a otros elegante, es algo mucho m¨¢s metaf¨®rico y es lo que hace que todo sea sue?o.

P. Prorroga un espect¨¢culo que est¨¢ en cartelera desde junio. Le ha ido muy bien.

R. Siempre me cuesta hacer una pr¨®rroga, pero en este caso estoy encantado de seguir. Es un espect¨¢culo que es como un zapato hecho a mi horma.

No tiene argumento, es un recorrido a trav¨¦s de todos los palos del flamenco. Un viaje crom¨¢tico que va del rojo al blanco, al negro y al dorado. Es donde m¨¢s a gusto me siento.