Eufemismos 'made in Espe'

"Si a la ministra no le gusta el nombre de radial 6 la llamaremos M-65, pero daremos una alternativa a los madrile?os". ?sta es la soluci¨®n que la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, se sac¨® ayer de la manga para zanjar un posible enfrentamiento con el Ministerio de Fomento por la nueva radial que anunci¨® el lunes que construir¨¢ para descongestionar la autov¨ªa A-6.

Una de las pegas de esta promesa es que una radial ser¨ªa competencia del ministerio y no del Gobierno regional. Pero al rebautizar la infraestructura con la nomenclatura de las carreteras de la regi¨®n, en teor¨ªa Aguirre se ahorra el conflicto, porque la disfraza de carretera bajo su competencia.

No es la primera vez que la presidenta acude a esta f¨®rmula. En su gesti¨®n es frecuente el uso de eufemismos para mejorar la imagen del Gobierno regional. ?stos son algunos ejemplos:

- La M-50 es ahora M-61. El cambio de nombre de una carretera ya lo ensay¨® Esperanza Aguirre con el proyecto de cierre de la cuarta v¨ªa de circunvalaci¨®n de Madrid, la M-50. Con esta infraestructura entr¨® de lleno en el enfrentamiento con Fomento, el ministerio que dirige Magdalena ?lvarez. Aguirre ha pretendido hacerse cargo de la obra, pero el Gobierno central tiene la competencia desde que el Ejecutivo anterior, el de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, declar¨® la carretera de inter¨¦s general. Cuando la presidenta insisti¨® en hacer un t¨²nel bajo el monte de El Pardo para cerrar la M-50, el Gobierno de Zapatero plante¨® un conflicto de competencias al Tribunal Constitucional, que a¨²n no se ha resuelto. Mientras, Aguirre sigue adelante con su proyecto, bajo el nombre de M-61.

- Tranv¨ªa, no; metro, s¨ª. A Esperanza Aguirre se le llena la boca cuando habla del metro y durante la pasada campa?a electoral no ces¨® de repetir que en su mandato se han construido 90 kil¨®metros nuevos de suburbano. Pero, como han podido comprobar los vecinos de los nuevos barrios de Sanchinarro y Las Tablas o los de los municipios de Boadilla y Pozuelo, al menos en un tercio de esos kil¨®metros (27,7), el metro de Aguirre no discurre bajo tierra sino que es un tranv¨ªa convencional. Por tanto, su construcci¨®n es bastante menos costosa y se hace en menos tiempo que el suburbano. Aunque, eso s¨ª, est¨¢ conectado al resto de la red.

- Un parque que es un campo de golf. Un campo de pr¨¢cticas de golf con 100 puestos de tiro, nueve hoyos y c¨¦sped artificial sobre m¨¢s de la mitad de los 12.000 metros cuadrados de instalaciones edificadas sobre el tercer dep¨®sito de agua del Canal de Isabel II, en la avenida de Islas Filipinas, es para Esperanza Aguirre "un parque". As¨ª lo denomin¨® en su inauguraci¨®n el pasado 29 de marzo, tras meses de protestas de los vecinos, que se hab¨ªan quedado sin el parque p¨²blico prometido por su antecesor, Alberto Ruiz-Gallard¨®n. El ahora alcalde trat¨® de parar las obras, porque el campo de golf no estaba en la solicitud de licencia de obras municipal, pero Aguirre evit¨® que lo hiciera con la argucia de declarar los trabajos "de inter¨¦s general". Ahora los vecinos pueden acceder libremente al lugar, pero para practicar deporte est¨¢n obligados a pagar por el uso de las pistas: una de p¨¢del cuesta 12 euros la hora.

- Presentaci¨®n de obra civil. Hasta que lleg¨® la campa?a electoral de mayo pasado, Aguirre convocaba a los medios de comunicaci¨®n a las "inauguraciones" de los nuevos hospitales construidos en la regi¨®n. En realidad, la presidenta visitaba edificios reci¨¦n terminados, sin ning¨²n uso, en lo que la terminolog¨ªa t¨¦cnica denomina "recepci¨®n de obras". Ya entrada en campa?a, y ante el riesgo de que la Junta Electoral Provincial impidiera celebrar actos de autobombo, las convocatorias del Gobierno regional hablaban de "presentaci¨®n de obra civil".

- Externalizar por privatizar. En los Presupuestos Generales de este a?o, se contempla el pago de m¨¢s de 770 millones de euros por servicios que antes eran p¨²blicos y que ahora est¨¢n en manos de empresas privadas. Esa cantidad es la que este a?o se pagar¨¢ en concepto de alquiler (o canon) de servicios como los nuevos hospitales, el metro o las carreteras. Se trata de una simple privatizaci¨®n, pero al Gobierno regional le gusta hablar de "externalizaci¨®n de servicios".