M¨¢s de 4.000 militares aliados muertos

Un helic¨®ptero estadounidense de transporte tipo Blackhawk UH-60A se estrell¨® ayer en el norte de Irak causando la muerte de sus 14 ocupantes, seg¨²n informaron fuentes militares. Las primeras indagaciones apuntan a que el aparato cay¨® debido a un fallo mec¨¢nico. No hay signos aparentes de que fuera derribado, pero se ha abierto una investigaci¨®n oficial para determinar la causa exacta. Se trata del incidente m¨¢s grave de un helic¨®ptero de EE UU desde enero de 2005, cuando un Super Stallion CH-53E se estrell¨® en medio de una tormenta de arena cerca de la frontera jordana, causando la muerte de sus 31 ocupantes. Con ellos, la cifra de soldados aliados muertos en Irak desde el inicio de la invasi¨®n en 2003 alcanza los 4.011; de ellos, 11 espa?oles.

La cifra final de fallecidos del atentado contra la secta yazid¨ª supera los 500

Los 14 soldados muertos ayer (cuatro tripulantes y 10 pasajeros) pertenecen a la divisi¨®n del Ej¨¦rcito de EE UU que se encarga del norte de Irak, incluidas las ciudades de Balad, Kirkuk, Tikrit, Mosul y Samarra, donde la insurgencia es muy activa. En el momento de estrellarse, el aparato iba acompa?ado de un segundo Blackhawk, que dio la alarma. Se trataba de un vuelo nocturno y rutinario.

Estas muertes se producen un d¨ªa despu¨¦s de que el Pent¨¢gono situara en 3.700 la cifra oficial de soldados de EE UU muertos en Irak desde el inicio de la invasi¨®n en 2003. No se contabilizan los de las fuerzas especiales y que operan en misiones secretas. Tampoco se mencionan los m¨¢s de 27.000 militares estadounidenses heridos. En el mismo periodo han fallecido 168 brit¨¢nicos, cuya fuerza opera en el sur, y 129 de diferentes nacionalidades, incluidos 11 espa?oles. En total, con los 14 muertos ayer, superan los 4.000. Las v¨ªctimas civiles iraqu¨ªes pueden superar el medio mill¨®n, seg¨²n diversas ONG.

Los helic¨®pteros de transporte se han convertido en una herramienta esencial para el Ej¨¦rcito estadounidense, pues las carreteras de Irak resultan sumamente peligrosas. La principal arma de la insurgencia contra las tropas extranjeras son las bombas colocadas en los caminos. Algunas son de fabricaci¨®n casera; otras, proyectiles modificados que formaron parte del arsenal del Ej¨¦rcito de Sadam Husein. Estados Unidos habla de unas terceras, muy sofisticadas y mort¨ªferas, que, seg¨²n ellos, han sido suministradas por Ir¨¢n.

El problema de los helic¨®pteros es su lentitud (unos 350 kil¨®metros por hora de velocidad punta) y la altura en la que se mueven, que les hacen vulnerables a los misiles. El hecho de que la insurgencia haya mejorado su capacidad para derribarlos (este mes cay¨® cerca de Faluya un Chinook causando la muerte de sus cinco ocupantes) demuestra que han mejorado su arsenal. Washington sostiene que esta mejor¨ªa tambi¨¦n tiene que ver con los suministros del r¨¦gimen de Teher¨¢n.

Estas muertes se producen en un momento pol¨ªtico muy delicado, cuando la Casa Blanca necesita demostrar que la situaci¨®n en Irak ha mejorado o que se necesita m¨¢s tiempo para lograrlo tras haber reforzado la fuerza en febrero con 30.000 soldados. El 11 de septiembre deber¨¢ presentar un informe ante un Congreso dominado por los dem¨®cratas desde las elecciones de 2006, y lograr una pr¨®rroga.

El helic¨®ptero no fue el ¨²nico incidente del d¨ªa. Un cami¨®n bomba conducido por un suicida se estrell¨® contra un edificio de la polic¨ªa en Baiji, ciudad en la que est¨¢n situadas importantes refiner¨ªas. Al menos 27 personas perdieron la vida y otras 65 resultaron heridas. Seg¨²n fuentes hospitalarias, la mayor¨ªa son civiles. El portavoz del Ej¨¦rcito estadounidense en Irak, general Kevin Bergner, dijo que el atentado de Baiji tiene la huella de la Organizaci¨®n de Al Qaeda en Irak, a la que EE UU adjudica la mayor¨ªa de los atentados. Por otra parte, el director de la Media Luna iraqu¨ª, Said Hakki, revel¨® que la cifra final de muertos en el atentado de la semana pasada contra la aldea de Qahtaniya, cerca de la frontera siria y habitada por seguidores de la secta yazid¨ª, supera los 500 muertos y 1.500 heridos. "Hemos declarado esas aldeas zona de desastre", dijo.