Prevenir pandemias
La Organizaci¨®n Mundial de la Salud (OMS) ha tocado una campana de alerta con su ¨²ltimo informe. Aunque resulte, como lo han acogido las autoridades sanitarias espa?olas, algo alarmista, advierte de la necesidad de impulsar medidas nacionales y de cooperaci¨®n internacional para evitar nuevas pandemias de las que s¨®lo nos librar¨¢ una "solidaridad mundial", pues ning¨²n pa¨ªs se puede ya defender por s¨ª solo ante estas nuevas amenazas. En los ¨²ltimos 40 a?os se han identificado 39 nuevas enfermedades infecciosas, alimentarias o medioambientales, es decir, casi una al a?o, incluido el sida o el SRAS (S¨ªndrome Respiratorio Agudo Severo).
Entre 2003 y 2006, la OMS registr¨® y actu¨® en 685 brotes epid¨¦micos en el mundo.
El aumento de la poblaci¨®n y los crecientes y masivos desplazamientos de personas y bienes vienen a multiplicar estos peligros y hace que se puedan expandir a una velocidad y con un alcance mayores que nunca. El creciente uso de antibi¨®ticos por personas y animales menoscaba la resistencia a la propagaci¨®n de algunas de estas enfermedades. Si se suma, como hace la OMS, la agricultura intensiva, la creciente y ca¨®tica urbanizaci¨®n -en 2007, por primera vez m¨¢s personas viven en ciudades que en el campo- y el hecho de que 2.100 personas se desplazaron el a?o pasado en aviones, el aumento de la posibilidad de contagio es patente.
Quiz¨¢ la alerta de los ¨²ltimos a?os sobre la gripe aviar fuera exagerada, pero oblig¨® a que los Gobiernos tomar¨¢n cada uno, y conjuntamente, unas medidas de protecci¨®n que probablemente contribuyeron a mantener esta infecci¨®n a raya. Han resurgido pandemias que parec¨ªan olvidadas, como el c¨®lera o la fiebre amarilla, o aparecido otras nuevas. No se debe bajar la guardia, aunque los costes sean elevados. Un total de 29.000 millones de euros le supuso al Reino Unido entre 1990 y 1998 luchar contra la enfermedad de las vacas locas. Unos 50.000 millones de euros en gastos brutos y p¨¦rdidas empresariales significaron para las econom¨ªas asi¨¢ticas las repercusiones de los brotes observados en 2003 de SRAS. Los pa¨ªses pobres no disponen de ese dinero, por lo que es necesario reforzar la ayuda que se les suministra, aunque s¨®lo sea por ego¨ªsmo de protecci¨®n de los pa¨ªses m¨¢s ricos.
Alerta temprana, informaci¨®n r¨¢pida y compartida, y control de las fronteras, incluidos los aeropuertos, parecen elementos indispensables para esta lucha global, ya contemplados en el nuevo Reglamento Sanitario Internacional que entr¨® en vigor el pasado junio y que hay que aplicar en su integridad.
Las enfermedades no las crea (?a¨²n?) el hombre. Pero la manera como vive hoy el ser humano contribuye a que, como con el calentamiento global, se agraven y se conviertan en pandemias. Tiene raz¨®n la directora de la OMS, Margaret Chan, cuando se?ala que "la actual vulnerabilidad a estas amenazas exige solidaridad mundial para mejorar la seguridad". Sus nuevas consignas son: "Diplomacia, cooperaci¨®n, transparencia y preparaci¨®n". Esta lucha sanitaria debe formar parte de la pol¨ªtica de seguridad, nacional y global.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.