El empleo a tiempo parcial se duplica en los ¨²ltimos 10 a?os en Catalu?a

"Cobro 300 euros al mes. Es evidente que s¨®lo puedo ser un apoyo a la econom¨ªa familiar". Marina, cajera y dependienta de la cadena de droguer¨ªas Schlecker, trabaja a tiempo parcial. Es algo relativamente reciente. Cuando tuvo a su hija, busc¨® un empleo que le permitiera compartir tiempo con ella. "Quer¨ªa encontrar algo de 20 horas a la semana", explica.

El Gobierno catal¨¢n estudia lanzar una campa?a para promover la jornada a tiempo parcial "bien utilizada"

La temporalidad es mucho mayor en los contratos a tiempo parcial: el 40% frente al 21% en los contratos a tiempo completo

Ocho de cada diez trabajadores a tiempo parcial son mujeres. Y el 28% de ellas trabaja menos horas para "cuidar la casa"

A Marina le fastidia que, sobre todo en periodo de vacaciones, le doblen el horario. "Cuando trabajo el doble, claro que me lo pagan. Pero a m¨ª me disgusta. S¨®lo quiero 20 horas. Tengo que aceptarlo porque lo pone en el contrato", dice. Marina siempre hab¨ªa trabajado en la industria, pero s¨®lo pudo encontrar un empleo a tiempo parcial en una tienda y bajo sus condiciones, que a menudo incluyen cambios de horario que hacen que los sindicatos se echen las manos a la cabeza.

Un total de 213.290 personas se han incorporado al mercado de trabajo catal¨¢n en la ¨²ltima d¨¦cada con un trabajo a tiempo parcial. Suman ya un total de 379.000. La jornada a tiempo parcial, por debajo de la jornada legalmente establecida para un trabajo a tiempo completo, se puede computar por semanas, por meses o al a?o.

El crecimiento de este tipo de empleo ha quedado diluido por el espectacular incremento del empleo total que se ha producido en los ¨²ltimos 10 a?os. La poblaci¨®n asalariada en Catalu?a ha crecido en casi un mill¨®n de personas desde 1997, y se sit¨²a en 2,90 millones. De ella, el 13% trabajan con un contrato a tiempo parcial. En 1997, el porcentaje no pasaba del 8%. Es cierto que, en este periodo, los contratos a jornada completa se han disparado el 44%. Pero los contratos a jornada parcial han crecido mucho m¨¢s: el 128%. Se han duplicado de largo.

Nuevas formas de empresa

?Eso es bueno o es malo? En la Europa ampliada, el porcentaje de asalariados que tiene un contrato a tiempo parcial es muy superior al que se registra en Catalu?a y en Espa?a, ya que asciende al 19% de los trabajadores.

"Vamos hacia un tipo de empresa con nuevas formas de organizaci¨®n, m¨¢s flexibles. Las empresas tienen necesidades que s¨®lo se pueden cubrir con un contrato a tiempo parcial", se?ala Montserrat Segura, subdirectora de Relaciones Laborales de la Generalitat, que defiende la jornada a tiempo parcial "bien utilizada".

Hasta ahora, ni la Administraci¨®n ni, mucho menos, los sindicatos han promovido la jornada a tiempo parcial. Coinciden en se?alar que su implantaci¨®n s¨®lo es positiva en la medida en la que sea algo elegido por el trabajador. "Siempre que se crea empleo es bueno. Pero la clave es saber si trabajar media jornada es algo plenamente deseado. En ese caso, me parece bien. Pero cuando debe aceptarse porque no se encuentra otra cosa, estamos ante una forma de empleo precario. Y tememos que es eso lo que ocurre", subraya Mar¨ªa Mar¨ªn, responsable de Inspecci¨®n de Trabajo de CC OO de Catalu?a.

La Primera Encuesta de Condiciones de Trabajo en Catalu?a arroja resultados poco halag¨¹e?os al respecto. Cuando se pregunta a los trabajadores por qu¨¦ trabajan a tiempo parcial, el 43% confiesa que, o bien no encuentra trabajo a tiempo completo, o bien la empresa no le ofrece una alternativa. M¨¢s significativo es a¨²n el hecho de que el 28,3% de las mujeres encuestadas con este tipo de contratos digan que trabajan menos horas para poder "cuidar de la casa", cuando s¨®lo el 0,4% de los hombres ofrecen esta respuesta. Y 8 de cada 10 asalariados con este tipo de contratos son mujeres, subrayaba esta semana el sindicato UGT; o el 22,6% de todas las mujeres que tienen un empleo.

"El trabajo a tiempo parcial se ha convertido en un instrumento para la incorporaci¨®n de la mujer al mercado laboral, pero si tenemos en cuenta la cantidad de mujeres que trabajan menos para poder ocuparse de sus hijos o familiares mayores, podemos reafirmarnos en que la mujer acaba acopl¨¢ndose al mundo del hombre, que se est¨¢ malentendiendo el concepto de conciliaci¨®n", reflexiona Carme Simarro, responsable de Pol¨ªticas de Mujer e Igualdad de UGT de Catalu?a.

"Los sindicatos han sido siempre reticentes al contrato de tiempo parcial por el mal uso que se hace de ¨¦l, porque suele derivar en empleo precario", admite Segura, desde la Generalitat.

No hay m¨¢s que ver hasta qu¨¦ punto existe mayor temporalidad en los empleos a tiempo parcial. Los datos recopilados por CC OO sobre la base de la Encuesta de Poblaci¨®n Activa (EPA) arrojan que, pese a haber disminuido en la ¨²ltima d¨¦cada, la temporalidad afecta al 40% de los empleos a tiempo parcial en Catalu?a, cuando en el caso de los de tiempo completo se ha reducido al 21%.

Servicio dom¨¦stico

"No es f¨¢cil encontrar trabajos a tiempo parcial y, adem¨¢s, es dif¨ªcil que con estos contratos pueda despegar la carrera profesional del trabajador", a?ade Mar¨ªa Mar¨ªn. La mayor¨ªa de empleos a tiempo parcial en Catalu?a son de baja cualificaci¨®n en el comercio al detalle, la hosteler¨ªa, la educaci¨®n, la sanidad y, sobre todo, en el servicio dom¨¦stico. "El perfil que se deriva de ello es el de una mujer joven con un nivel formativo bajo o medio que trabaja en un empleo poco cualificado", subraya CC OO.

"Debemos devolver la buena imagen a este tipo de contrato", subraya la subdirectora de Relaciones Laborales. La Generalitat est¨¢ estudiando lanzar una campa?a para promover el trabajo a tiempo parcial "bien utilizado".