Bl¨¢zquez se desmarca del boicoteo a Educaci¨®n para la Ciudadan¨ªa
El presidente de los obispos defiende a los colegios cat¨®licos contrarios a la objeci¨®n
La batalla contra la nueva asignatura de Educaci¨®n para la Ciudadan¨ªa empieza a provocar fracturas en el seno de la Conferencia Episcopal. Ayer, su presidente, el obispo de Bilbao Ricardo Bl¨¢zquez, sali¨® en defensa de la patronal de los colegios concertados cat¨®licos FERE, severamente reprendida durante los ¨²ltimos meses por algunos obispos por rechazar la objeci¨®n de conciencia en sus centros.
La FERE "siempre ha querido actuar en comuni¨®n eclesial" y con la responsabilidad que tiene, confiada por los padres, "y as¨ª vienen actuando", dijo Bl¨¢zquez. Y record¨® que la Iglesia no se ha decantado por ning¨²n mecanismo de reacci¨®n a la asignatura: "Eso lo tendr¨¢n que decidir los padres". "Despu¨¦s un obispo puede decir m¨¢s cosas, otro puede decir menos, esto, lo otro, bajo su espec¨ªfica responsabilidad", precis¨® Bl¨¢zquez.
Apenas una semana antes de que comience el curso, estas declaraciones contradicen el discurso que ha trascendido hasta ahora desde la jerarqu¨ªa cat¨®lica: "Colaborar con la implantaci¨®n de la nueva asignatura es colaborar con el mal", lleg¨® a decir Antonio Ca?izares, vicepresidente de la Conferencia Episcopal. Las palabras de Bl¨¢zquez ayer suponen un alejamiento de las posturas m¨¢s combativas contra la asignatura (de obispos, como Ca?izares o de la confederaci¨®n cat¨®lica de padres, cuyo presidente es nombrado por la Conferencia Episcopal). Desde hace meses desde estos ¨¢mbitos se incita a los padres para que impidan a los alumnos cursar esta asignatura obligatoria (objeci¨®n de conciencia o desobediencia civil, seg¨²n quien lo nombre), ya que la consideran una herramienta de "adoctrinamiento" pol¨ªtico. La materia se comenzar¨¢ a impartir la pr¨®xima semana en siete comunidades aut¨®nomas en 3? de la ESO. Y el pr¨®ximo curso, en el resto.
Una postura m¨¢s flexible
Aunque sigui¨® manteniendo su rechazo a la asignatura, el apoyo de Bl¨¢zquez a la FERE es un espaldarazo a la postura de quienes, frente al boicoteo, prefieren la implantaci¨®n de la nueva materia incluida en la ley, eso s¨ª, adaptada al ideario cat¨®lico. De esa manera, se formar¨¢n "buenos cristianos y buenos ciudadanos", ha dicho en alguna ocasi¨®n el secretario general de la patronal, Manuel de Castro.
El pasado mes de mayo, la patronal mand¨® a sus colegios una circular advirti¨¦ndoles del riesgo "real" de perder las subvenciones p¨²blicas si no se impart¨ªa la asignatura. La carta les cost¨® un buen rapapolvo. Los obispos les recriminaron entonces que no pod¨ªan "impedir o dificultar" a los padres tomar esa determinaci¨®n. Y tambi¨¦n se mostraron en contra de la adaptaci¨®n de la materia a los postulados de la Iglesia. "Si fuera posible adaptar sus contenidos a la doctrina cat¨®lica, esta ense?anza mantendr¨ªa igualmente su condici¨®n de formaci¨®n de la conciencia moral impuesta por el Estado a todos los padres, al margen de su elecci¨®n", sosten¨ªan los obispos.
Y ahora Bl¨¢zquez matiza: "Muchos interpretaron que esta decisi¨®n, cuyo objetivo es evitar la objeci¨®n de conciencia, privaba a los padres de un derecho", pero los colegios cat¨®licos "siempre han actuado en comuni¨®n eclesial" y la patronal "da un servicio impagable" a la sociedad, record¨® el presidente de la Conferencia Episcopal.
El responsable de la FERE, Manuel de Castro, estaba ayer contento por estas declaraciones de Bl¨¢zquez, que interpret¨® como una "reacci¨®n l¨®gica" a los ataques recibidos en los ¨²ltimos meses, "para poner las cosas en su sitio". De Castro insisti¨® en que todo este tiempo han recibido el apoyo del presidente de los obispos, pero agradece "que lo haga p¨²blico", a?adi¨®. Adem¨¢s, De Castro siempre ha dicho que toda la pol¨¦mica responde a la proximidad de las elecciones.
Desde la aprobaci¨®n de la nueva ley educativa en marzo de 2006, que contempla la introducci¨®n de esta asignatura como obligatoria en un curso de primaria y otro de secundaria, la confederaci¨®n de padres cat¨®licos han cargado con todas sus fuerzas contra la materia. Este agosto amenazaron con manifestarse en oto?o, una protesta para la que nunca han contado con el apoyo de los centros cat¨®licos, los que tienen la mayor capacidad de convocatoria, como han demostrado en otras ocasiones.
Recursos en tribunales
Tanto los padres cat¨®licos como los obispos creen que la asignatura es una intromisi¨®n del Gobierno en la educaci¨®n moral de los hijos, que toca aspectos que s¨®lo corresponden a las familias, como los nuevos modelos de convivencia o la educaci¨®n afectivosexual. Adem¨¢s de la campa?a animando a la objeci¨®n, han presentado recursos en los tribunales que a¨²n no tienen respuesta.
Bl¨¢zquez asegur¨® ayer que los padres tienen derecho a "reaccionar" por cauces "leg¨ªtimos y democr¨¢ticos", pero record¨® que la Conferencia Episcopal "no se ha decantado por ning¨²n mecanismo de reacci¨®n" concreto. Aunque ning¨²n documento oficial de la Conferencia ha defendido expl¨ªcitamente el boicoteo, desde los p¨²lpitos no han cejado en su campa?a contra la asignatura. Ca?izares lleg¨® a decir que los padres que objeten estar¨¢n trabajando por el "bien com¨²n". Pero el Ministerio de Educaci¨®n ya ha advertido de que esta materia, que se imparte en la mayor¨ªa de los pa¨ªses europeos, es obligatoria y no ir a clase impedir¨ªa la obtenci¨®n del t¨ªtulo.
La confederaci¨®n de padres cat¨®licos, Concapa, ha sido uno de los m¨¢s fervientes defensores del boicoteo. Ayer, Luis Carbonel, su presidente, insisti¨® en que "la objeci¨®n" es una de las "muchas opciones" que le est¨¢n dando a los padres y en que nunca han criticado a la FERE por su postura ante la asignatura: "Ellos creen que la objeci¨®n no debe plantearse en los centros y nosotros que s¨ª".
Para todos los gustos
Un vistazo a los libros de texto de Educaci¨®n para la Ciudadan¨ªa permite ver que dentro de los contenidos m¨ªnimos marcados por el Gobierno cabe un amplio abanico ideol¨®gico. Algunos manuales incluso recogen la visi¨®n m¨¢s tradicional de la Iglesia cat¨®lica sobre aspectos como la familia, el aborto o los matrimonios homosexuales, que rechazan por completo. Otros defienden una sexualidad libre, dan informaci¨®n exhaustiva de los m¨¦todos anticonceptivos y critican a la Iglesia por condenar las uniones gays.El Ministerio de Educaci¨®n acept¨® desde el principio la petici¨®n de los colegios cat¨®licos de adaptar los contenidos a su ideario, algo que, como se puede comprobar, tambi¨¦n han hecho las editoriales. Los manuales no son revisados a priori para ver si sus contenidos se adaptan a la ley. Una vez publicados, la Administraci¨®n, si encuentra algo que no se adapta a la norma, pide rectificaci¨®n o, directamente, la retirada. Pero no hay censura previa.
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