Un amigo sincero y leal

Hemos perdido a un cantante extraordinario, uno de los tenores m¨¢s importantes de la historia de la ¨®pera, pero al conocer la triste noticia de su muerte no pienso en el colega, sino en el amigo. He perdido a un amigo sincero y leal que siempre fue afectuoso conmigo. Nunca olvidar¨¦ sus visitas al hospital, sus llamadas telef¨®nicas, cuando yo luchaba contra mi enfermedad y ¨¦l me animaba con su cari?o y optimismo. Me ha enriquecido como artista y persona.

Nunca te aburr¨ªas a su lado. Era extrovertido, ameno en la conversaci¨®n, divertido, fr¨ªvolo a veces, pero profundo en los temas serios. Me dio sabios consejos, sin caer en el paternalismo, y siempre hizo p¨²blica su admiraci¨®n por mi voz y forma de cantar. Lo vi por ¨²ltima vez hace unas semanas, en su casa de M¨®dena, y prepar¨® para cenar pan con tomate y jam¨®n porque sab¨ªa que me encanta. Compartimos tambi¨¦n pasi¨®n por el f¨²tbol: ¨¦l, por la Juve; yo, con el Bar?a.

Era extravertido, ameno en la conversaci¨®n, divertido, fr¨ªvolo a veces, pero profundo en los temas serios

Lo que m¨¢s me emociona en su canto es el impacto de su voz solar, inconfundible desde la primera nota, su t¨¦cnica fabulosa y su incre¨ªble comunicatividad, que le hac¨ªa llegar directamente al coraz¨®n del p¨²blico y emocionarlo con su canto. Rompi¨® moldes, como hicieron en su tiempo Enrico Caruso y Maria Callas, y alcanz¨® una popularidad extraordinaria, al nivel de una estrella del rock o del cine.

Siempre me ha emocionado, como espectador, porque he tenido el placer de verle cantando sus mejores papeles, y como colega, compartiendo escenario con ¨¦l y Pl¨¢cido Domingo en las giras que hemos realizado por todo el mundo como Los tres tenores, una relaci¨®n art¨ªstica que naci¨® en 1990 con el hist¨®rico concierto en las Termas de Caracalla y acaba hoy con la muerte de Luciano, un tenor ¨²nico, una persona inolvidable, un amigo irreemplazable.