Los guerreros chinos montan guardia en el Museo Brit¨¢nico
Soldados, acr¨®batas, aves, caballos y otras estatuas del mausoleo del primer emperador se re¨²nen en una gran exposici¨®n en Londres
Artefactos del excepcional mausoleo de Qin Shi Huangdi, primer emperador de China, ocupan, hasta el 13 de abril, una posici¨®n estelar bajo la c¨²pula de la antigua Biblioteca Brit¨¢nica, que domina el patio central del Museo Brit¨¢nico en Londres. Un grupo de soldados de terracota, de tama?o natural, monta guardia junto a sus respectivos caballos en un gran despliegue que tambi¨¦n re¨²ne figuras de acr¨®batas, hombres forzudos y funcionarios que entretendr¨ªan y cuidar¨ªan, en la ultratumba, el bienestar del mandatario que unific¨® los distintos reinos chinos hace 2.000 a?os.
El mausoleo del emperador Qin es el m¨¢s importante yacimiento arqueol¨®gico. Se descubri¨® fortuitamente, en 1974, cuando un granjero que cavaba un pozo a las afueras de Xian, en el oeste de la actual China, desenterr¨® una figura de terracota. Fue el principio de un extraordinario hallazgo: un ej¨¦rcito de 7.000 soldados de tama?o natural, alineados en trincheras en posici¨®n de alerta ante un eventual ataque. Cada figura preserva su distintiva fisonom¨ªa y viste el uniforme que corresponde a su determinada graduaci¨®n militar. Unos hacen guardia a pie; otros montan en anta?o carros de madera sujetando las riendas de los caballos. Son los hombres que deb¨ªan velar por la seguridad del primer emperador chino y que, en una peque?a representaci¨®n, vigilan amenazantes a los visitantes de la exposici¨®n del Museo Brit¨¢nico.
Las reliquias invaden la m¨ªtica Biblioteca Brit¨¢nica en la primera exposici¨®n montada bajo su c¨²pula
En las ¨²ltimas d¨¦cadas se han desenterrado figuras civiles y aves ex¨®ticas, algunas en bronce, en el vasto complejo de 56 kil¨®metros cuadrados de extensi¨®n. Dan fe de la obsesi¨®n del emperador por prolongar su vida en la ultratumba. Qin muri¨® en el a?o 210 antes de Cristo, sin terminar su complejo funerario que orden¨® construir 30 a?os antes y habiendo probado decenas de elixires para retrasar o evitar su ocaso. Viaj¨® al m¨¢s all¨¢ con funcionarios y escribas que velar¨ªan por el buen funcionamiento de su imperio. Tambi¨¦n con los acr¨®batas, saltimbanquis y forzudos que hab¨ªan entretenido a la corte. Las aves ex¨®ticas podr¨ªan ser ejemplos de su fauna privada.
El Brit¨¢nico ha acercado a Londres 120 objetos rescatados del mausoleo, incluidos una veintena de figuras de terracota. Es un pr¨¦stamo sin precedentes de las autoridades chinas y un importante avance en la creciente colaboraci¨®n cultural y econ¨®mica entre Reino Unido y China. Apuntala el esfuerzo del actual director, Neil MacGregor, por prestar a otros pa¨ªses las colecciones del British y acoger en su sede muestras art¨ªsticas menos conocidas por los brit¨¢nicos.
Las reliquias de terracota invaden la m¨ªtica Biblioteca Brit¨¢nica en la primera exposici¨®n montada bajo su c¨²pula. Ordenadas en un circuito en espiral, cuentan la historia de la creaci¨®n de la naci¨®n china por un tirano y gran estratega que venci¨® a sus rivales con armas, orden¨® construir la Gran Muralla y asegur¨® la unificaci¨®n del pa¨ªs imponiendo un ¨²nico c¨®digo legal, una caligraf¨ªa uniforme y una moneda com¨²n. "Cre¨® lo que hoy conocemos como China, la m¨¢s antigua entidad pol¨ªtica del mundo", asegura MacGregor.
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