El Bar?a pierde la alegr¨ªa
Los azulgrana, negados ante la meta rival, suman su segundo empate a cero en campo rival ante un Osasuna que defendi¨® bien
El Bar?a ha acumulado tantos ep¨ªtetos este a?o sobre su caudal ofensivo que la realidad resulta bastante m¨¢s cruel. No hay manera de que meta un gol, y dos de los tres que lleva en la Liga son de falta. Abanderado del juego de ataque y del f¨²tbol fant¨¢stico, el Bar?a fue una sombra de s¨ª mismo y volvi¨® a doblar la rodilla en el Reyno de Navarra, donde el a?o pasado tampoco fue capaz de marcar. Ni Henry, ni Giovani, que estrenaba titularidad, ni Ronaldinho vieron puerta, pero lo peor es que su bagaje ofensivo fue m¨ªsero y se vislumbra un futuro oscuro. Harto de tanta ineficacia, Rijkaard sent¨® en la ¨²ltima media hora al gaucho, toda una declaraci¨®n de intenciones porque el brasile?o ha tenido bastantes peores d¨ªas. La soluci¨®n de emergencia fue la entrada de Bojan en los ¨²ltimos 12 minutos, pero tampoco se le pueden pedir maravillas a un chico de apenas 17 a?os, por m¨¢s que su salida tuvo un aire fresco especialmente agradecido.
OSASUNA 0 - BARCELONA 0
Osasuna: Ricardo; Izquierdo, Miguel Fla?o, Josetxo, Corrales; Juanfran (Delporte, m. 80), Pu?al, Javi Garc¨ªa, H¨¦ctor Font; Pandiani (Kike Sola, m. 90) y Portillo (Plasil, m. 72). No utilizados: El¨ªa; Margairaz, Cruchaga y Azpilicueta.
Barcelona: Vald¨¦s; Zambrotta(Oleguer, m. 65), Thuram, Gaby Milito, Abidal; Iniesta, Tour¨¦, Deco; Giovani (Bojan, m. 78), Ronaldinho (Xavi, m. 65) y Henry. No utilizados: Jorquera, Gudjohnsen, Sylvinho y Ezquerro.
?rbitro: P¨¦rez Lasa. Mostr¨® la tarjeta amarilla a Josetxo, Deco, Iniesta, Izquierdo, Pu?al.
Unos 18.000 espectadores en el Reyno de Navarra.
El partido de Pamplona evoc¨® en muchos momentos al de Santander, donde el Bar?a debut¨® con suerte con un 0-0. No sufri¨® tanto esta vez para amarrar el punto, pero Osasuna resisti¨®, acab¨® el encuentro con la pelota y no desde?¨® el empate. Rijkaard no da con la clavija y la sensaci¨®n es que cualquier rival puede maniatar a su equipo. Fiel a su pol¨ªtica de remover el banquillo, dio la manija a Deco, pero esta vez prefiri¨® a Iniesta en lugar de Xavi. Y, delante y atr¨¢s, dos cambios: Milito y el ni?o Giovani, en lugar del lesionado Messi, se estrenaron como titulares. Pero todos esos retoques apenas tuvieron incidencia en el juego porque este Bar?a parece haber perdido la alegr¨ªa de su f¨²tbol que contagiaba Ronaldinho. No impone, de entrada, la jerarqu¨ªa que se le supone y los partidos se le convierten en citas que tienen mucho de tost¨®n. Osasuna se situ¨® atr¨¢s y cedi¨® la iniciativa a los azulgrana. Pero siempre es la misma historia porque el Bar?a suele hacer un juego plano, con poca profundidad, con lentitud. Queda poco rastro del pase al primer toque salvo en fogonazos puntuales. Escoltado por Henry y Giovani, Ronaldinho volvi¨® a jugar de falso delantero centro. Muy marcado, busc¨® el pase interior pero est¨¢ a a?os luz de la ¨¦poca en que contagiaba su f¨²tbol y su ritmo al resto de sus compa?eros.
Presionado por la victoria del Madrid, el Bar?a contuvo el arre¨®n inicial de Osasuna, que debutaba esta temporada en su cancha, y ten¨ªa ganas de mostrar su nuevo rostro, con Javi Garc¨ªa en el centro y Portillo y Pandiani, como puntas. Los rojillos quer¨ªan agradar a su afici¨®n. Y estuvieron en un tris de empezar a lo grande porque nada m¨¢s empezar Pu?al sac¨® una falta que Miguel Fla?o cabece¨® de forma impecable junto al palo. El Bar?a se dio por enterado y, con la pareja formada por Iniesta y Deco, control¨® la pelota, pero sin el menor rastro de generar ocasiones de gol. Osasuna, sin embargo, dio dos avisos de primera magnitud, especialmente por dos errores garrafales de Thuram. Debi¨® dar gracias el ¨¢rbitro al Bar?a porque Juanfran le rob¨® la cartera con una facilidad pasmosa al central franc¨¦s y el colegiado, ante la irritaci¨®n de la grada, se?al¨® falta del rojillo. Minutos despu¨¦s, Thuram hizo un regate delante del ¨¢rea, dio una vuelta sobre s¨ª mismo y perdi¨® el cuero. Portillo se fue solo hacia Vald¨¦s pero envi¨® fuera la pelota.
Y el Bar?a tard¨® una eternidad en crear peligro. Como en Santander, no se acerc¨® al ¨¢rea rival hasta la media hora. Giovani exhibi¨® el descaro de la pretemporada y no le import¨® colarse entre cuatro defensas para meter un chut que el portero despej¨® con los pies. Activo y l¨²cido, fue Iniesta quien habilit¨® a Deco con un pase interior pero Ricardo volvi¨® a desbaratar la ocasi¨®n. No cambi¨® mucho el panorama tras el descanso. Osasuna empez¨® a pagar el desgaste f¨ªsico, pero a¨²n as¨ª a punto estuvo Javi Garc¨ªa de marcar con un disparo lejano que se le escap¨® a Vald¨¦s. El Bar?a se estir¨® algo m¨¢s pero sin chispa. M¨¢s activo que otros d¨ªas, Ronaldinho procur¨® meter pases, que acabaron en las piernas de los zagueros rivales, mientras Henry se acercaba al marco en una doble ocasi¨®n con un remate que se le escap¨® por poco (el ¨¢rbitro vio c¨®rner) y un cabezazo salvado sobre la l¨ªnea de gol por Osasuna que el ¨¢rbitro no se sabe por qu¨¦ anul¨®.
Quedaba media hora por disputar y Rijkaard dio un golpe en el banquillo. Acusado en Santander de falta de valent¨ªa por no cambiar a ninguno de sus cracks, ayer dio un pase adelante y sent¨® al brasile?o por Xavi, como ya hizo ante el Athletic en el Camp Nou, pero entonces con el marcador a favor. La cara de Ronaldinho suele ser un libro abierto y fue un poema cuando vio su dorsal en la banda. Poco despu¨¦s, fue el momento de Bojan, que necesit¨® solo un minuto para meterse y revolverse en el ¨¢rea y para que Oleguer rematara fuera por poco.
Osasuna apret¨® al final, pero sin convicci¨®n, y el Bar?a, impotente, languideci¨® hasta que el partido acab¨®. Tiene raz¨®n el presidente azulgrana Laporta cuando dice que a este equipo a¨²n le falta mucho para decir que puede aspirar a algo.
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