Julio de Espa?a triplic¨® en su mandato los gastos de protocolo de las Cortes

Los gastos de publicidad, propaganda y relaciones p¨²blicas de las Cortes Valencianas se triplicaron durante los a?os de la presidencia de Julio de Espa?a, seg¨²n se desprende de la cuenta general del a?o 2006, que la actual presidenta, Milagrosa Mart¨ªnez, tiene intenci¨®n de enviar a la Sindicatura de Comptes. Las Cortes gastaron algo menos de 800.000 euros en el a?o 2002, el ¨²ltimo completo de la quinta legislatura. En 2006 esa partida sum¨® 2,1 millones de euros. Adem¨¢s, el a?o pasado, la C¨¢mara registr¨®, por primera vez, un d¨¦ficit presupuestario, de 3,5 millones.

El jefe del servicio econ¨®mico pide un ¨®rgano interno que fiscalice el gasto

De los 800.000 euros gastados en 2002 en protocolo se pas¨® a 2,1 millones en 2006

Julio de Espa?a lleg¨® a la presidencia de las Cortes Valencianas, tras las elecciones auton¨®micas de 2003, rodeado de un nutrido grupo de asesores de protocolo, prensa y comunicaciones. El nuevo presidente prescindi¨® desde el primer momento de los funcionarios de la casa que durante las legislaturas precedentes, tanto con presidentes del PSPV, de UV o del PP, se hab¨ªan ocupado de las labores de protocolo y relaciones p¨²blicas. De Espa?a tra¨ªa su propio equipo y sus propias ideas acerca del funcionamiento, la organizaci¨®n y las funciones de un ¨¢rea que, en una instituci¨®n como las Cortes, requiere de buenas dosis de profesionalidad, capacidad organizativa y discreci¨®n. Tres cualidades por las que no ha destacado precisamente la gesti¨®n del ahora senador territorial.

La llegada de De Espa?a se tradujo de inmediato en un incremento de personal del ¨¢rea de Presidencia, en un aumento de los actos protocolarios y de propaganda y publicidad, de las recepciones y de los dispendios y regalos. Y eso se ha traducido en un aumento del gasto. En el a?o 2006 De Espa?a gast¨® para estas cuestiones un total de 2,1 millones de euros. En el ¨²ltimo ejercicio completo -el de 2002- de su predecesora, Marcela Mir¨®, las Cortes gastaron por estos conceptos menos de 800.000 euros.

El grueso del gasto de las partidas de atenciones protocolarias y representativas, publicidad y propaganda, reuniones y conferencias, y actividades culturales y l¨²dicas corresponde al ¨¢rea de Presidencia de las Cortes. Llama la atenci¨®n el hecho de que la partida de protocolo es objeto cada a?o de modificaciones presupuestarias. As¨ª, en el ejercicio de 2005 el cr¨¦dito inicial de 150.000 euros fue incrementado hasta 551.000 euros. Lo curioso es que al a?o siguiente las Cortes vuelven a hacer una previsi¨®n de 153.000 euros para este concepto que, de nuevo, tiene que ser modificado al alza, puesto que al final se gastaron m¨¢s de 500.000. Y este a?o, la nueva presidenta ha tenido que volver a ampliar la partida, porque De Espa?a la hab¨ªa consumido en los ¨²ltimos cinco meses de su presidencia.

Por otra parte, la cuenta general de 2006 arroja, por primera vez, un d¨¦ficit presupuestario, cifrado en 3,5 millones de euros. La C¨¢mara, que siempre ha gastado menos de lo previsto, atesoraba tradicionalmente unos ahorros, de forma que siempre ha tenido un importante colch¨®n financiero que ha permitido hacer frente a proyectos como la compra de inmuebles para ampliar el complejo parlamentario. En 2006 esos ahorros se quedaron en poco m¨¢s de 19 millones de euros, frente a los 23,5 que sumaban al final de 2005.

En la memoria econ¨®mica que acompa?a la cuenta general de 2006, el jefe del servicio econ¨®mico de las Cortes reitera una serie de consideraciones que ya hizo en 2004 para mejorar la gesti¨®n y el control. As¨ª, propone la creaci¨®n de un ¨®rgano funcionalmente independiente que permitiera una fiscalizaci¨®n interna adecuada del gasto y precisa: "No se puede obviar la importancia de este tipo de ¨®rganos encargados de velar por la legalidad en la gesti¨®n del gasto, sin perjuicio de que junto a la creaci¨®n de dicho ¨®rgano se aprobara una normativa que permitiera introducir criterios de fiscalizaci¨®n que fueran en su mayor¨ªa consuntivos".

Tambi¨¦n propone la introducci¨®n de criterios de contabilidad patrimonial que permitieran ajustar a la realidad el valor contable que se le atribuyen a las inversiones que la C¨¢mara realiza. Igualmente, recomienda el establecimiento de criterios de desconcentraci¨®n de la actividad contable. Finalmente, el jefe del servicio econ¨®mico reclama la adecuaci¨®n de la estructura organizativa del ¨¢rea econ¨®mica a las actuales necesidades y recuerda al respecto que dicha estructura apenas ha sufrido cambios desde sus or¨ªgenes.