Cineastas contra corriente

Cuando el guitarrista de origen gitano Jimmy Rosenberg ten¨ªa 12 a?os y apenas pod¨ªa alcanzar las cuerdas de su guitarra de jazz, muchos de los que le ve¨ªan tocar ten¨ªan la esperanza de que fuera capaz de recuperar el legado del gran Django Reinhardt. Sin embargo, las cosas se empezaron a torcer cuando firm¨® un contrato con Sony Classics en Nueva York. La historia del m¨²sico, que a sus 26 a?os todav¨ªa anda en la brecha, queda recogida en Jimmy Rosenberg, el padre, el hijo y el talento, uno de los documentales seleccionados en la secci¨®n oficial del festival Doc¨²polis, cuya s¨¦ptima edici¨®n acoge hasta ma?ana por la tarde el Centro de Cultura Contempor¨¢nea de Barcelona (CCCB).

La cinta es una muestra de c¨®mo el cine documental es un g¨¦nero cada vez m¨¢s en boga para retratar el mundo que nos rodea. Desde hace unos a?os ha conseguido hacerse un hueco en la gran pantalla de la mano de t¨ªtulos como En construcci¨®n, de Jos¨¦ Luis Guer¨ªn o de la pol¨¦mica cinta de Michael Moore, Bowling for Columbine. Incluso las cadenas de televisi¨®n van abriendo sus rejillas a estos trabajos, aunque lo hacen de una manera discreta y apuestan por un formato de documental muy cl¨¢sico, como se?alaba estos d¨ªas Hugo Salinas, director de Doc¨²polis.

El Festival Internacional de Cine Documental, en cambio, abre su programaci¨®n cada a?o a las propuestas m¨¢s dispares. Todas las pel¨ªculas, eso s¨ª, tienen como denominador com¨²n su capacidad de ir contra corriente frente al pensamiento ¨²nico, como subraya Salinas en la carta de presentaci¨®n de la exposici¨®n. Doc¨²polis ha participado del boom del g¨¦nero. Este a?o la cifra de trabajos recibidos ha sido abrumadora: 1.200 pel¨ªculas procecentes de 68 pa¨ªses. De entre todas ellas se han escogido finalmente una sesentena. Seis son estrenos mundiales y 11 no se hab¨ªan visto todav¨ªa en Espa?a. La entrada para ver las obras a concurso cuesta tres euros, mientras que las secciones paralelas son gratuitas.

Uno de los atractivos de este a?o es la presentaci¨®n de Eslovenia como pa¨ªs invitado. "Nos interesan las nuevas cinematograf¨ªas, sobre todo la de Eslovenia, ya que no sabemos apenas nada sobre su compromiso con la realidad que les ha tocado vivir", explica el director de Doc¨²polis.

Una apuesta segura para el espectador indeciso es la secci¨®n Delicatessen, en la que directores de otros festivales escogen documentales que consideran extraordinarios. Dentro de este apartado, figura, por ejemplo, Waiting for Europe, de Christine Reeh, sobre una joven b¨²lgara que viaja por Europa en busca de una vida mejor. Tambi¨¦n incluye DAF, del cineasta Bahman Ghobadi, que cuenta la historia de un iran¨ª que mantiene a su familia vendiendo unos instrumentos musicales que ¨¦l mismo fabrica. Doc¨²polis tambi¨¦n propone este a?o una selecci¨®n de filmes franceses dentro de Festival des Festival. Tratan temas diversos: desde el conflicto entre Israel y Palestina a la vejez. En la secci¨®n Rescat se muestran trabajos sobre la violaci¨®n de los derechos humanos.

Pero como apunta Salinas, el festival invita a "venir, investigar y descubrir. No hace falta conocer el programa". As¨ª pueden descubrirse ¨®peras primas como la de Adam Gutch, que narra en The ballad of Betty French la historia de una vieja ermita?a que vive preocupada s¨®lo de sus vacas.