Movilizaci¨®n en Medicina para conservar sus referentes hist¨®ricos

La Facultad de Medicina de la Universitat de Valencia empez¨® a construirse a en 1908, a la vez que el actual edificio del rectorado, y fue terminada 40 a?os despu¨¦s. Ambos edificios significaron la contribuci¨®n de la universidad al crecimiento de la ciudad, atestada por entonces en la orilla sur del Turia, hacia el este. La antigua facultad de Ciencias (el Rectorado) pas¨® por varias manos. El dise?o neobarroco del arquitecto Jos¨¦ Luis Oriol fue reemplazado en los a?os treinta por un expresionismo pre-racionalista de la mano de su colega Mariano Peset Aleixandre. Acabada la Guerra Civil, las autoridades intentaron disimular la impronta republicana redise?ando el interior.

La Facultad de Medicina tambi¨¦n tuvo varios autores, pero mantuvo el planteamiento inspirado en los palacios barrocos de Jos¨¦ Luis Oriol. De eso habla la Gu¨ªa de Arquitectura de Valencia publicada hace unos d¨ªas por el Colegio Territorial de Arquitectos. De lo que no habla es de la pol¨¦mica generada por la reforma iniciada en 2005, que prev¨¦ eliminar las dos grandes escaleras de caracol que flanquean el cuerpo del edificio. Un nutrido grupo de profesores se opone y prepara movilizaciones para defenderlas por su valor est¨¦tico y representativo.

Aurelio Beltr¨¢n, vicerrector de Infraestructuras, asegura que tanto ¨¦l como el arquitecto Alfonso Casares tambi¨¦n preferir¨ªan mantenerlas. Pero ve "muy complicado" hallar una soluci¨®n alternativa. Su configuraci¨®n, se?ala, no cumple las normas de seguridad exigibles una vez comenzada la remodelaci¨®n; no resulta funcional, al estar dise?ada para el n¨²mero original de pisos que ten¨ªa el edificio, lo que dejar¨ªa sin acceso a las entreplantas, y la ¨²nica salida ser¨ªa mantenerlas como elementos ornamentales, lo que resultar¨ªa caro adem¨¢s de poco pr¨¢ctico. Ni la comisi¨®n municipal de Patrimonio ni la de la Generalitat pusieron objeciones a su demolici¨®n, destaca el vicerrector.

"Aparte de que se consideren bonitas o no, que para m¨ª lo son", contesta Rafael Fern¨¢ndez-Delgado, uno de los profesores que las defienden, "la idea es que suponen uno de los referentes de lo que ha sido la Facultad de Medicina para las generaciones de m¨¦dicos que han estudiado en ella. Hab¨ªa cuatro lugares representativos: el hall, el aula Cajal (que ya han eliminado) y las escaleras: unos espacios abiertos, con luz natural, donde ver y ser vistos. Lo que podr¨ªa llamarse una escalera social".