Un campe¨®n ambicioso

Casey Stoner no afloja. El australiano se proclam¨® campe¨®n del mundo de MotoGP hace quince d¨ªas, pero ni por ¨¦sas descuida la guardia, y menos ante su hinchada. En otro de sus paseos militares, se apunt¨® su novena victoria del a?o, de manera que no se duerme en los laureles. En la historia de los Mundiales de la m¨¢xima categor¨ªa s¨®lo tres pilotos han ganado m¨¢s de nueve carreras en una temporada. Giacomo Agostini y Mick Doohan ya est¨¢n retirados mientras que el otro es Valentino Rossi, que consigui¨® once en 2001, 2002 y 2005. Corr¨ªan otros tiempos. Era cuando Il Dottore dominaba el cotarro. Con la irrupci¨®n de Stoner, el statu quo de la MotoGP ha dado un vuelco para suerte de Ducati, que ha sacudido a Honda y Yamaha de forma bochornosa y ayer lo celebr¨® adjudic¨¢ndose el primer t¨ªtulo de constructores de su historia.

Antes de fichar por la marca italiana, Stoner era un piloto competitivo, r¨¢pido, con talento, pero irregular. Pero la herramienta que la f¨¢brica de Borgo Panigale le ha ofrecido ha permitido a este sonriente rubiales que ma?ana cumple 22 a?os demostrar que puede convertirse en la pr¨®xima referencia mundial. Ser¨ªa injusto dejar fuera de la ecuaci¨®n a Bridgestone, la marca japonesa que suministra los neum¨¢ticos a su equipo y que, por primera vez desde 1992, ha dejado sin t¨ªtulo a Michelin. Ayer, el fabricante franc¨¦s volvi¨® a esconder la cabeza bajo el ala. Nada nuevo si no fuera porque en Phillip Island nunca hab¨ªa ganado una moto equipada con unos neum¨¢ticos que no fueran los del mu?eco Bibendum. Ni Rossi ni Dani Pedrosa, primeros espadas de la f¨¢brica de compuestos francesa, pudieron disputar la carrera a Stoner.

Mientras el italiano ha perdido el aura que le hac¨ªa levitar, el espa?ol est¨¢, pero no est¨¢, y no encuentra la f¨®rmula para engancharse a Stoner. La victoria que consigui¨® ayer es un calco de las anteriores: una salida portentosa, dos primeras vueltas de v¨¦rtigo y un ritmo endiablado hasta media carrera. Con lo primero, Stoner se libra de los ciscos que se montan en las primeras curvas mientras que nadie adivina c¨®mo logra lo segundo. Sus rivales deben esperar a que los neum¨¢ticos adquieran la temperatura ¨®ptima, pero ¨¦l arranca como alma que lleva el diablo sin que nadie pueda echarle el guante. Ayer lo intent¨® el campe¨®n, Nicky Hayden, hasta que se vino abajo poco despu¨¦s y fue engullido por Rossi (d¨¦cima vuelta). Hayden ya rodaba entonces a dos segundos de Stoner, demasiado tiempo incluso para el mejor piloto de todos los tiempos, que suple con sus manos la falta de chicha de su moto.

Rossi pudo con Pedrosa cuando el espa?ol le ech¨® encima su Honda (17? vuelta), pero no con Capirossi (19?). A sus 34 a?os, Capirex tiene cuerda para rato y ayer mostr¨® su agradecimiento a Ducati por los servicios prestados -el a?o que viene correr¨¢ con Suzuki- sirviendo a la f¨¢brica bolo?esa su primer doblete de la historia.