La avalancha de ropa asi¨¢tica no abarata los precios en las tiendas
Los espa?oles apenas se benefician de la ca¨ªda del 30% del coste de producci¨®n
El matrimonio Xianghong Xu y Qiulei Yin tiene un establecimiento mayorista de ropa fabricada en China, donde la familia de Qiulei tiene una f¨¢brica con 2.000 obreros, en la calle de Trafalgar de Barcelona, conocida como el Chinatown del Eixample por el auge de comercios regentados por esta comunidad.
"Por este biquini pago 3,5 euros, tasas y transporte incluido, y lo vendo a 4,5. Pero en algunas tiendas llega a los 30 euros. Es una cuesti¨®n de m¨¢rgenes", ilustra Qiulei.
Los consumidores espa?oles apenas se han beneficiado de la inundaci¨®n de prendas asi¨¢ticas m¨¢s baratas. En Espa?a, contrariamente a lo que ha sucedido en el Reino Unido e Irlanda, los precios al consumidor de la ropa no han sufrido cambios significativos como consecuencia de la liberalizaci¨®n mundial del sector, iniciada en 1995 y culminada en 2005. En Italia ha pasado tres cuartos de lo mismo, y en Grecia, los precios incluso han aumentado en la ¨²ltima d¨¦cada. Y eso, pese a que la eliminaci¨®n de las cuotas a la importaci¨®n ha colmado Europa de prendas asi¨¢ticas, b¨¢sicamente procedente de China, mucho m¨¢s baratas, lo que ha obligado a los productores europeos a reducir un 30% los precios para no quedarse descolgados.
?sta es la conclusi¨®n de un reciente estudio del Instituto Kiel, de Alemania, encargado por la Comisi¨®n Europea. Euratex, la patronal textil europea, acaba de remitir una carta al responsable de la direcci¨®n general de Comercio de la Comisi¨®n, Pierre Amihlat, para que Bruselas lleve a cabo una valoraci¨®n m¨¢s detallada y tome cartas en el asunto. "Esto no es normal, aqu¨ª pasa algo", advierte el presidente del Consejo Intertextil Espa?ol (CIE), Josep Casas.
El traslado de los precios de importaci¨®n al consumidor era uno de los principales argumentos que los comisarios de Comercio Pascal Lamy y Peter Mandelson esgrimieron ante la industria europea cuando ¨¦sta les suplic¨® que Bruselas batallara m¨¢s para amortiguar el impacto de las exportaciones chinas.
Pero la pr¨¢ctica ha desmentido a la teor¨ªa. El estudio del Instituto Kiel constata que el acuerdo para liberalizar el textil y la ropa (ATC, seg¨²n sus siglas en ingl¨¦s) ha provocado una ca¨ªda de precios de los productores del 30,6% en la Europa de los Quince, y que esta rebaja ha sido muy similar en todos los Estados. Los pa¨ªses con una industria dom¨¦stica m¨¢s potente, como Espa?a, Italia, Grecia y Portugal, es donde han ca¨ªdo m¨¢s.
Sin embargo, esta ca¨ªda no ha llegado a las tiendas con tanta intensidad. Durante la d¨¦cada de 1995-2005, los precios al consumidor s¨®lo han bajado un 16% de media con respecto al nivel general de precios, pero de forma "muy dispar" entre los distintos pa¨ªses. En Irlanda y el Reino Unido han ca¨ªdo un 50%; en Espa?a se han mantenido pr¨¢cticamente inalterados. "Es asombroso que en el Reino Unido, donde el impacto de las importaciones sobre los precios de producci¨®n ha sido menor, los consumidores son los que m¨¢s se han beneficiado", subraya el estudio.
"Est¨¢ claro que los que se est¨¢n aprovechando de la liberalizaci¨®n son los grandes distribuidores, H&M, Gap, Zara, Mango... Son los ¨²nicos que ganan dinero a mansalva; s¨®lo hay que ver sus cotizaciones. Mientras tanto, la industria y las tiendas multimarca van desapareciendo", se?ala el presidente de la Agrupaci¨®n Espa?ola de G¨¦nero de Punto, Joan Canals. En los ¨²ltimos cuatro a?os, en Espa?a han desaparecido 1.100 empresas y m¨¢s de 50.000 empleos, seg¨²n el Centro de Informaci¨®n Textil y de la Confecci¨®n (Cityc).
La patronal de la gran distribuci¨®n, Anged, que agrupa a firmas como El Corte Ingl¨¦s, Carrefour, Cortefiel o C&A, entre otras, se defiende: "En lo que llevamos de a?o, el grupo vestido y calzado ha bajado un 9,2% en el IPC". En 2005 y 2006 subi¨® un 1,1% cada a?o, seg¨²n el INE.
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