El Estado vasco emergente

En el Pa¨ªs Vasco, y en Espa?a, cada vez somos m¨¢s los que nos preguntamos si el persistente ruido pol¨ªtico independentista in crescendo tiene como ¨²nico objetivo la perpetuaci¨®n de un r¨¦gimen pol¨ªtico nacionalista que dura ya m¨¢s de 25 a?os o es verdaderamente posible el objetivo estrat¨¦gico de los nacionalistas: la secesi¨®n pol¨ªtica, creando un Estado vasco independiente, m¨¢s o menos asociado a Espa?a. Es f¨¢cil posicionarse ideol¨®gicamente o hacer demagogia al respecto, pero no es f¨¢cil ni simple una respuesta cient¨ªfica y rigurosa. Si tenemos en cuenta a los cuatro autores que son hoy d¨ªa referentes de una posible teor¨ªa evolutiva de la historia (J. R. y W. Mc Neill, D. Christian y J. Diamond), podemos considerar que la actividad comercial, la innovaci¨®n tecnol¨®gica y la capacidad de los Estados (institucionalizaci¨®n), son tres de los motores de la evoluci¨®n relativa de las diferentes sociedades, es decir, de su crecimiento o de su colapso. El desarrollo cultural (nivel relativo de conocimiento) y la capacidad militar ser¨ªan los dos pilares que completan los principales motores evolutivos de las sociedades humanas.

Yo no tendr¨ªa claro que el ¨®rdago del 'lehendakari' sea s¨®lo electoralista

A partir de la Revoluci¨®n Industrial, los tres primeros motores parecen haberse reforzado en relaci¨®n con los otros dos, aunque la interrelaci¨®n sist¨¦mica es obvia. En mi opini¨®n, el motor principal es el proceso evolutivo del Estado, que impulsa o detiene la innovaci¨®n econ¨®mica, tecnol¨®gica y social, gestiona la capacidad militar y promueve o bloquea el desarrollo cultural. Aunque hay procesos sociales no controlados y no controlables por el Estado, est¨¢ comprobado que la estructura institucional cada vez tiene m¨¢s capacidad para liderar y gestionar redes sociales, y, en consecuencia, el Estado cada vez tiene un mayor control de la sociedad.

Y ?qu¨¦ tiene que ver esto con la cuesti¨®n vasca? Pues muy sencillo. Mi primera hip¨®tesis es que la mayor modernidad y eficacia relativa del Estado vasco emergente, frente al Estado espa?ol, le puede dar la ventana de oportunidad hist¨®rica que posibilite una secesi¨®n pol¨ªtica. Mi primer corolario es que, en la actualidad, el Estado vasco ya es autosuficiente con respecto al Estado espa?ol salvo en capacidad militar. Mi segunda hip¨®tesis es que la estrategia de ciencia, tecnolog¨ªa e innovaci¨®n es la punta de lanza actual de la estrategia pol¨ªtica y la versi¨®n m¨¢s moderna, sofisticada y eficaz de desarrollo institucional y de control social. Y no es banal que esta estrategia se corresponda con uno de los motores principales de evoluci¨®n de sociedades y civilizaciones con el permiso del Estado.

Desde una perspectiva de desarrollo econ¨®mico, podr¨ªamos plantearnos elementos de mejora y matices al Plan Vasco de Ciencia y Tecnolog¨ªa, pero me interesa m¨¢s reflexionar sobre la estrategia pol¨ªtica que subyace a este Plan. El mensaje pol¨ªtico subyacente es, en mi opini¨®n, poderoso y seductor: "Lo de ser vasco o espa?ol (debate identitario) es como lo del sexo de los ¨¢ngeles... Lo importante es que en Euskadi se vive bien y, adem¨¢s, podemos ser una sociedad de ganadores; seremos referentes en ciencia y tecnolog¨ªa en Europa y en el mundo, unos peque?os colosos como los n¨®rdicos, los holandeses o los irlandeses, y en el pasado, las ciudades-estado: Venecia, G¨¦nova, etc.". Las personas y las sociedades somos f¨¢cilmente seducibles y manipulables por discursos ganadores, por las mil y una variantes de la leyenda del pueblo elegido, de la civilizaci¨®n milenarista. Es innegable que el discurso pol¨ªtico que sostiene el Gobierno vasco y su lehendakari puede ser disparatado o fuera de lugar para los pol¨ªticos convencionales, pero, en mi opini¨®n, es un discurso ambicioso, futurista a la vez que milenarista: es decir, es un discurso ganador y viable, al menos en teor¨ªa.

Ibarretxe ha puesto en marcha una estrategia de desarrollo institucional, tecnol¨®gico, econ¨®mico y cultural que sit¨²a al Estado vasco emergente diez a?os por delante, como m¨ªnimo, del Estado espa?ol. Su decisi¨®n de liderar en persona la estrategia de C+T+i, haci¨¦ndose cargo incluso de un presupuesto ad hoc, es relevante. La decisi¨®n de crear dos poderosas herramientas de gesti¨®n: Innobask e Ikerbasque, poniendo al frente a dos de sus principales cerebros estrat¨¦gicos y colaboradores, Pedro Luis Uriarte y M? Carmen Gallastegui, es brillante. La creaci¨®n de un complejo y poderoso entramado, el Sistema Vasco de Innovaci¨®n, que dispone de recursos notables, como las redes de centros tecnol¨®gicos y de parques tecnol¨®gicos, es muy pragm¨¢tica y eficaz. A ello hay que a?adir los centros de investigaci¨®n cooperativa (CIC) y otras estructuras cient¨ªficas que agrupan a 1.100 investigadores.

Este entramado es una enorme red social, cient¨ªfica, tecnol¨®gica y empresarial muy participativa, a la vez que f¨¦rrea y eficazmente controlada y gestionada. Por ejemplo, se crea la Agencia Vasca de Evaluaci¨®n, que es la que recomienda la contrataci¨®n de investigadores y eval¨²a la calidad de los programas, y que depende, en ¨²ltima instancia, del comit¨¦ de C+T, es decir, del Gobierno vasco y del lehendakari. Dicho de otro modo, en Euskadi no se podr¨¢ investigar nada relevante que no haya aprobado el lehendakari y su n¨²cleo duro de gobierno, con la asesor¨ªa o a propuesta de sus asesores cient¨ªficos estrat¨¦gicos.

Pero el entramado institucional no se queda s¨®lo en ciencia y tecnolog¨ªa, cada departamento utiliza una tupida red de sociedades p¨²blicas, fundaciones, consejos, observatorios, etc., para gestionar su pol¨ªtica y su presupuesto. Y para metabolizar personas, grupos sociales, empresas -en suma, voluntades- para las cada vez m¨¢s amplias y complejas redes sociales controladas y gestionadas por el Estado vasco.

El IVAP, HABE, Eustat, Emakunde, Osalan, EVE, SPRI, Etxebide, Egailan, IVAC, Teknika, Hobetuz, Euskalit, IVEI, EITB, etc. Son una parte de los organismos, sociedades, consejos, que forman la estructura institucional que gestiona recursos, redes sociales, influencia. Pero no crean ustedes que esto significa que tenemos una administraci¨®n ineficiente o despilfarradora. Al contrario, los indicadores econ¨®mico-financieros de la administraci¨®n vasca son los m¨¢s saneados de Espa?a. Es decir, el Estado vasco est¨¢ perfectamente dimensionado y adem¨¢s es eficaz y eficiente.

Un ejemplo de actualidad: la pol¨ªtica exterior vasca. En teor¨ªa, el servicio vasco de Exterior tiene cinco delegaciones oficiales, pero la SPRI cuenta con oficinas en treinta pa¨ªses y, mediante acuerdos con el CDE, puede llegar a otros 41 pa¨ªses (ACP). Pero adem¨¢s, existen 172 centros vascos por el mundo y no es una casualidad de que, aparte de las famosas comunidades vascas en Argentina, Uruguay y Venezuela, en EE UU cuenten con una red de 36 centros y en Australia con tres.

Esta red exterior no se parece en nada a los tradicionales servicios estatales de Exterior, con una carrera diplom¨¢tica burocratizada. La red vasca a¨²na funcionarios con profesionales especialistas, consultores, empresas y gabinetes contratados en los pa¨ªses de destino. La red tiene a la vez una clara vocaci¨®n pol¨ªtica y una orientaci¨®n al servicio. No tenemos mucha informaci¨®n sobre su funcionamiento pero entendemos que un empresario vasco, en especial con carnet del PNV, tiene a su disposici¨®n un servicio variado, eficaz e influyente. Yo no estar¨ªa tan seguro de que la diplomacia vasca no consiguiera su lugar en el mundo en un plazo no muy amplio.

Resumiendo, la estrategia del nacionalismo independentista democr¨¢tico vasco es, en mi opini¨®n, construir un Estado m¨¢s moderno y eficaz que el espa?ol, para que, en el caso de que surja o se construya una ventana de oportunidad pol¨ªtica para la secesi¨®n, la mayor¨ªa silenciosa de ciudadanos vote ¨²til, pragm¨¢tico, ganador, por encima de cuestiones pol¨ªticas o identitarias. Cada vez son m¨¢s los que opinan que en Euskadi se vive mejor en caso de no oponerte ni hacer militancia activa contra el nacionalismo.

En el corto plazo, este poderoso Estado vasco emergente explica y justifica el silencio y la inactividad pol¨ªtica de amplios sectores sociales como los empresarios, profesionales, universitarios, etc., que pueden perder rentables oportunidades si son cr¨ªticos. Sin olvidar que la presi¨®n del nacionalismo radical antisistema golpea o intimida a los m¨¢s osados opositores al r¨¦gimen nacionalista. Yo no tendr¨ªa claro que el ¨®rdago del lehendakari sea electoralista. En mi opini¨®n, busca incansablemente su ventana de oportunidad.

Jos¨¦ Manuel Farto es economista.