S¨®lo el 53% del dinero prometido por el Gobierno a Catalu?a tiene destino

Catalu?a ha vivido a?os de sequ¨ªa inversora. Pero ahora que el dinero necesario para desatascar el cuello de botella de las infraestructuras parece garantizado a ra¨ªz de la aplicaci¨®n del Estatuto catal¨¢n, toca plantearse la segunda parte del problema: decidir deprisa a qu¨¦ proyectos concretos deben destinarse los recursos, ponerlos en marcha sin falta y acelerar los ya iniciados. S¨®lo la mitad (52,7%) del dinero ya comprometido por la Administraci¨®n para los pr¨®ximos a?os tiene consignado su uso. Esta estimaci¨®n fue difundida ayer, en forma de advertencia, por los empresarios catalanes; esta vez, todos a una.

De acuerdo con la documentaci¨®n presentada por el llamado GTI-4 -grupo de presi¨®n por las infraestructuras que re¨²ne a la C¨¢mara de Comercio, Fomento del Trabajo, el RACC y el C¨ªrculo de Econom¨ªa-, la inversi¨®n real en Catalu?a entre 2009 y 2011 es de 7.738,1 millones de euros.

Se trata de "una cifra muy alejada de la que resultar¨ªa de la aplicaci¨®n de la disposici¨®n adicional tercera vigente del Estatuto", la que obliga al Estado a destinar el 18,8% del dinero total para infraestructuras a Catalu?a porque ¨¦ste es su peso en el producto interior bruto (PIB) espa?ol. Econom¨ªa ha calculado que la aplicaci¨®n de dicha disposici¨®n en ese periodo se traducir¨ªa en 14.675 millones de euros.

"Debemos definir una cartera de proyectos", subray¨® el presidente de la C¨¢mara, Miquel Valls, acompa?ado en la presentaci¨®n del informe sobre el estado de las infraestructuras por Juan Rosell, presidente de Fomento; Jos¨¦ Manuel Lara, presidente del C¨ªrculo, y Sebasti¨¤ Salvad¨®, presidente del RACC.

Los retrasos en la l¨ªnea ferroviaria de alta velocidad Madrid-Barcelona-frontera francesa, en la nueva terminal de pasajeros del aeropuerto de El Prat, en los accesos viarios y por tren a dicha terminal, en la ampliaci¨®n de los puertos de Tarragona y Barcelona, en la pol¨¦mica autov¨ªa orbital B-40, en el desdoblamiento de la Nacional II en Girona y de la N-340 (autov¨ªa del Mediterr¨¢neo), o el trabajo pendiente en los carriles adicionales de la autopista AP-7, son algunos proyectos que los empresarios apremiaron a impulsar. Entre los recursos por asignar figuran los 817 millones de euros que el Estado debe devolver a Catalu?a por la incorrecta aplicaci¨®n del Estatuto en 2007 y los 722,8 millones con que se complement¨® en 2008 la inversi¨®n real destinada a Catalu?a por el Gobierno.A Cercan¨ªas deber¨ªa destinarse parte de este dinero, sugiri¨® Valls. "Una vez las grandes infraestructuras est¨¦n desencalladas, se habr¨¢ dado ya un paso importante", dijo en tono optimista Rosell, pero "hace falta que en los pr¨®ximos a?os tengamos proyectos concretos y definidos". Por su parte, Lara reclam¨® la puesta en marcha de "un sistema r¨¢pido" para solucionar las reivindicaciones ecologistas, de modo que no empeoren los retrasos de las obras.

La demanda de una mejor coordinaci¨®n entre las distintas administraciones y entre la disponibilidad de recursos y la licitaci¨®n de nuevos proyectos fue apuntada por Salvador. Los empresarios se pusieron del lado de la Generalitat y pidieron que en obras como las de la llegada del AVE a Barcelona exista una "gesti¨®n conjunta".

El GTI-4 exigi¨® adem¨¢s al Gobierno central y a los distintos partidos pol¨ªticos que antes de las pr¨®ximas elecciones generales de marzo definan su modelo de gesti¨®n para El Prat. El colectivo hizo una propuesta que combinaba descentralizaci¨®n con gesti¨®n profesionalizada que en sectores pol¨ªticos se interpret¨® err¨®neamente como una pura privatizaci¨®n. ?sta ha sido prometida por el PP.

Los retrasos en materia de infraestructuras (desde la d¨¦cada de 1960 a 2000, la dotaci¨®n catalana de infraestructuras creci¨® 11 puntos por debajo de la media espa?ola) "han condicionado el desarrollo econ¨®mico catal¨¢n con relaci¨®n al conjunto del Estado", concluye el libro Econom¨ªa catalana: retos de futuro, editado conjuntamente por el BBVA y el Departamento de Econom¨ªa y presentado ayer por el presidente de la entidad, Francisco Gonz¨¢lez; el presidente de la Generalitat, Jos¨¦ Montilla, y el consejero de Econom¨ªa, Antoni Castells.