El v¨¦rtigo de la cima

Hay equipos a los que les entra el v¨¦rtigo cuando se ven delante de una situaci¨®n id¨ªlica, ante la posibilidad de dar un paso firme y responsable. El Villarreal, tal vez, padeci¨® el mal de altura y dej¨® escapar la oportunidad de ser l¨ªder de la Liga espa?ola tras sus 84 a?os de historia y en su novena temporada en Primera. Impensablemente, lo evit¨® el Almer¨ªa, que empat¨® un partido trabado y sac¨® a relucir la peor versi¨®n castellonense. El conjunto andaluz resquebraj¨® el juego de toque y asociaci¨®n del de Pellegrini, demasiado directo y vertical a la vez que insustancial. El arre¨®n final no fue suficiente como en ocasiones precedentes. Tres puntos y el prestigio estaban en juego. Una losa.

Los n¨²meros no reflejan siempre la realidad. Al Almer¨ªa le cuesta marcar goles. La deducci¨®n l¨®gica es que no se propone llegar al ¨¢rea contraria o, simplemente, le cuesta. No es as¨ª. Emery ha dotado de un aire fresco y alegre a un cuadro que se supone tiene que ser consciente de que tendr¨¢ que pelear mucho para continuar entre los elegidos. El conservadurismo no garantiza logros. El ser atrevido, tampoco, pero al menos resulta m¨¢s loable y rom¨¢ntico. El Almer¨ªa es valiente, pero est¨¢ re?ido con la efectividad. Su puesta en escena es plausible y sus formas destacables, aunque, eso s¨ª, algo marrulleras. La lecci¨®n la tiene bien aprendida. Cuando pierde el esf¨¦rico, intenta de todas formas que su rival no lo tenga tampoco aun con actos dudosamente reglamentarios.

El problema del Almer¨ªa es el de muchos: la calidad para ejecutar el ¨²ltimo pase, la tranquilidad para definir el instante decisivo. Todo lo contrario que el Villarreal, que se siente c¨®modo con el bal¨®n; en el que nadie tiembla con ¨¦l en los pies, que todos se ofrecen, que cualquiera asume responsabilidades aunque en ocasiones nada salga. Y que tiene pegada, lo que diferencia al vulgo de la nobleza.

Que el f¨²tbol es un estado de ¨¢nimo es algo plenamente sabido. Y el Villarreal posee en la actualidad jugadores tocados por la divinidad. Nihat es uno de ellos. Todo lo que toca ¨²ltimamente lo convierte en gol. En Turqu¨ªa le quieren canonizar. Dos goles en sendos partidos del ex de la Real Sociedad ante Noruega y Bosnia han dado la clasificaci¨®n a los otomanos para la Eurocopa de Suiza y Austria. Ayer, Nihat volvi¨® a mojar antes del primer cuarto de hora tras una magn¨ªfica jugada de Guille Franco otro de los jugadores que ha experimentado una metamorfosis positiva dif¨ªcil de explicar.

El gol no achant¨® al Almer¨ªa, que intensific¨® m¨¢s si cabe su presi¨®n, convencido de poder revertir la situaci¨®n. En actitud, el conjunto andaluz se gana el jornal. El encuentro deriv¨® entonces en un ejercicio ¨¢spero, lleno de fricciones, de pocas luces, feo de ver e incierto de pronosticar. Se acrecent¨® la sensaci¨®n tras iniciarse la segunda mitad, cuando Negredo, el delantero criado en la cantera del Madrid, establec¨ªa el empate en el marcador y dejaba atr¨¢s la sequ¨ªa del Almer¨ªa, que llevaba cuatro partidos sin marcar ning¨²n gol. Con la igualada, el conjunto andaluz sigui¨® atosigando al Villarreal. Pero Emery mand¨® un mensaje contradictorio a su equipo al retirar a Uche, un delantero, por Juanito, un centrocampista de contenci¨®n. El empate le val¨ªa al Almer¨ªa. Para el Villarreal, fue insuficiente.