Los anillos de Harry

Es el efecto domin¨®. El precio a pagar por el ¨¦xito de las sagas de El Se?or de los anillos y Harry Potter. La car¨ªsima La br¨²jula dorada, basada en la primera novela de la serie de Philip Pullman La materia oscura, es la ¨²ltima, tras las recientes Eragon y Los seis signos de la luz, y viene adem¨¢s con la carga de la pol¨¦mica bajo el brazo.

Diversas instituciones religiosas ultraconservadoras, caso de la Liga Cat¨®lica Norteamericana, han pedido su boicoteo porque los libros de Pullman "est¨¢n deliberadamente escritos para denigrar al cristianismo y promover el ate¨ªsmo entre los ni?os". Algo as¨ª como la simbolog¨ªa cat¨®lica contenida en Las cr¨®nicas de Narnia, pero al rev¨¦s. De modo que uno se pone firme ante La br¨²jula dorada, esperando un revolucionario rosario de iniquidades para ni?os. Sin embargo, m¨¢s all¨¢ de un mundo en el que el cuerpo y el alma de sus habitantes est¨¢n separados, y la segunda adquiere la forma de un animal que siempre acompa?a a su ser f¨ªsico, el supuesto ate¨ªsmo es tan ilusorio como la historia en s¨ª.

Por lo dem¨¢s, salvo una espectacular lucha entre dos enormes osos, la visualizaci¨®n del m¨¢gico universo del relato suena a ya visto, pero peor. Eso s¨ª, de lo que se han preocupado bien es de cerrar la pel¨ªcula con uno de esos finales anticl¨ªmax a los que nos estamos malacostumbrando, tan abiertos que s¨®lo parecen pendientes de la consolidaci¨®n de la saga.