Los ca?ones de nieve gastan en 4 meses la misma agua que 18.000 personas en 1 a?o

La sequ¨ªa es grave y apenas ha nevado, pero m¨¢s de 20.000 personas ya han esquiado en el Pirineo catal¨¢n este puente. Ello habr¨ªa sido imposible sin los 2.136 ca?ones de nieve artificial repartidos por las nueve estaciones de esqu¨ª alpino. Los ca?ones son la salvaci¨®n del sector tur¨ªstico de monta?a, pero a la vez la bestia negra de los ecologistas. Y es que las estaciones catalanas gastan en los cuatro meses de temporada tanta agua como una ciudad de 18.000 habitantes en todo un a?o. Tambi¨¦n consumen una ingente cantidad de energ¨ªa el¨¦ctrica, alrededor de 9.000 kilovatios, la misma energ¨ªa que una ciudad de 15.000 habitantes.

El volumen de agua que necesitan los centros para fabricar nieve es de 1,5 hect¨®metros c¨²bicos, seg¨²n datos del Departamento de Medio Ambiente. Esta cifra representa el 0,05% del total de agua que se consume en Catalu?a: 3.100 hect¨®metros c¨²bicos. La factura de la luz anual que se puede llegar a pagar por la fabricaci¨®n de nieve se acerca a los 300.000 euros.

La pasada temporada fue la peor del negocio de la nieve de las dos ¨²ltimas d¨¦cadas. Se dej¨® de ingresar el 40% de los abonos por la falta de nieve -Tavascan no abri¨® por no disponer de ca?ones- y un mill¨®n de esquiadores se quedaron en casa. Este a?o el sector, por el momento, sonr¨ªe. Conf¨ªa en recuperar las p¨¦rdidas.

Al contrario que hace un a?o, las pistas de esqu¨ª catalanas se han abierto, aunque de manera parcial. Los meteor¨®logos aseguran que nunca ha habido dos inviernos c¨¢lidos. Pese a los buenos augurios y a las mejores intenciones, a nadie se le escapa que la campa?a arranca un a?o m¨¢s bajo la amenaza de la sequ¨ªa, con los embalses del Pirineo al 40% de su capacidad.

El sector se defiende como puede de las cr¨ªticas de los ecologistas. El presidente de la Asociaci¨®n Catalana de Estaciones de Esqu¨ª, Jes¨²s Serra, asegura que el agua destinada a la industria del esqu¨ª crea m¨¢s empleo que la que se emplea en usos agr¨ªcolas. Un informe de la patronal certifica que un metro c¨²bico de agua convertida en nieve artificial crea "40 veces m¨¢s empleo" que un metro c¨²bico destinado al riego. "Adem¨¢s la nieve se funde y el agua vuelve al ecosistema", defiende Serra. S¨®lo se pierde el 20% del agua, que es la que se evapora.

Decididas a combatir la falta de precipitaciones, las estaciones catalanas se han gastado 6,9 millones de euros en la compra y renovaci¨®n de los sistemas de producci¨®n de nieve. La innivaci¨®n artificial es un invento que se estren¨® en La Molina en 1985. Desde entonces los ca?ones han evolucionado hasta reducir el coste energ¨¦tico entre "el 50% y el 60%", asegura Llu¨ªs Breifuss, jefe de explotaci¨®n de La Molina. La maquinaria que se ha duplicado en los ¨²ltimos 10 a?os hasta pasar de los 2.000 ca?ones. Ha sido una inversi¨®n millonaria en equipos.

Un ca?¨®n de alta presi¨®n, el tipo m¨¢s habitual, cuesta entre 9.000 y 12.000 euros, y un ca?¨®n de baja presi¨®n, entre 30.000 y 40.000 euros, seg¨²n la empresa York Neige, que distribuye el 80% de los ca?ones en los centros catalanes y andorranos.

La nieve se produce creando una corriente de aire a gran velocidad, la cual, unida a un caudal de agua que se lanza simult¨¢neamente, ocasiona la dispersi¨®n del agua en peque?as gotas. Al salir por el ca?¨®n, la temperatura debe ser inferior cero grados y la humedad, la adecuada (cuanto menos elevada, mejor), y as¨ª se consigue el mismo efecto que con la nieve natural.

Fabricar nieve artificial cuesta alrededor de 0,8 euros por metro c¨²bico, sumando el agua, la energ¨ªa, la instalaci¨®n y el personal especializado. Baqueira, con unos 540 ca?ones, puede llegar a producir en un invierno 900.000 metros c¨²bicos.

En a?os con tan poca nieve como los dos ¨²ltimos, los centros necesitar¨ªan mucha m¨¢s nieve artificial. Obtener un permiso para colocar un nuevo ca?¨®n no es f¨¢cil y la disponibilidad de agua limita mucho la producci¨®n. Si se gasta demasiado, se secan las balsas que se llenan durante la primavera y el verano. Estaciones como Baqueira Beret han afrontado procesos judiciales por sobreexplotaci¨®n de acu¨ªferos y de lagos de monta?a.