"Vivo en constante contradicci¨®n"
Un ayudante sol¨ªcito le mueve la bolsita de t¨¦ en la taza. Mientras, en la habitaci¨®n contigua, ¨¦l se somete a la limpieza del maquillaje. En efecto, hab¨ªa pedido la infusi¨®n, pero Ang Lee no la tocar¨¢. Puede ser una de las muchas paradojas en las que se confiesa instalado este gran cineasta nacido en Taiwan y afincado en Hollywood. "Vivo en una constante contradicci¨®n. Soy una persona muy t¨ªmida y d¨®cil desde ni?o, pero por otra parte hago un esfuerzo enorme por hacer cosas nuevas y seguir adelante, lo que va contra mi car¨¢cter. Siento mucho la presi¨®n del p¨²blico, me limita y me da miedo siempre el pensar qu¨¦ voy a hacer con el siguiente proyecto. Me pregunto a veces: '?Tengo que sufrir tanto para hacer pel¨ªculas?".
"Me pregunto a veces: '?Tengo que sufrir tanto para hacer pel¨ªculas?'
"Soy una especie de orgullo nacional en China y eso me da mucho miedo"
"Algunas escenas de sexo y violencia son demasiado fuertes"
"Mi manera de acercarme al p¨²blico es a trav¨¦s de la sinceridad"
Tantas dudas parecen impropias de un cineasta ganador de dos oscars: al mejor director en 2006 por Brokeback mountain, y a la mejor pel¨ªcula en habla no inglesa en 2001 por Tigre y drag¨®n.
Podr¨ªa ser porque su ¨²ltimo filme, Deseo, peligro, que present¨® ayer en Madrid, lo ha colocado en el centro de la pol¨¦mica por sus escenas de sexo y violencia expl¨ªcitas. Galardonada con el Le¨®n de Oro en el Festival de Venecia, la cinta, que se estrena ma?ana, cuenta una sobrecogedora historia de espionaje en el Shanghai de principios de los a?os cuarenta. Protagonizado por el famoso actor chino Tony Leung y la debutante Tang Wei, Deseo, peligro est¨¢ basado en un relato de la autora Zhang Alling.
El filme lleva al espectador al Shanghai de 1942. La ciudad est¨¢ ocupada por los japoneses, que establecen un Gobierno t¨ªtere. Grupos nacionalistas y comunistas chinos hostigan a los responsables pol¨ªticos projaponeses. Una joven actriz, miembro de la resistencia, establece una relaci¨®n sexual con el jefe de la polic¨ªa pol¨ªtica de los ocupantes.
Lee viste en tonos neutros y habla despacio y algo bajo. Aunque reconoce que una de sus intenciones con la pel¨ªcula era la de mostrar a los j¨®venes de ahora la China de aquellos a?os tan controvertidos, dice que ¨¦sa no era ni mucho menos la m¨¢s importante. "Desde el ego¨ªsmo, lo que m¨¢s me interesaba era hacer la pel¨ªcula. Me encanta el material y la historia escrita por Eileen Chang. Ya soy una persona importante dentro de la industria de China y por eso tengo m¨¢s capacidad y facilidad para hacer una gran producci¨®n. Pero tambi¨¦n me resulta m¨¢s duro, porque la gente espera mucho m¨¢s de m¨ª. Han puesto muchas esperanzas. Soy una especie de orgullo nacional de China y por ello tengo mucho m¨¢s miedo a la hora de elegir el proyecto a realizar".
La pel¨ªcula, con sus secuencias de sexo y violencia expl¨ªcitas, ha pasado por la censura de China, pero tambi¨¦n de Estados Unidos, donde se estrena con una calificaci¨®n "imposible", en palabras de su realizador, -"matan la pel¨ªcula sin tocarla"-. De momento, solo en Europa se estrena el filme en su versi¨®n ¨ªntegra.
Ang Lee reconoce que ha sido ¨¦l mismo quien ha cogido la tijera para eliminar los momentos m¨¢s duros y as¨ª hacer posible su estreno en China, donde no existe la clasificaci¨®n de pel¨ªculas y todas est¨¢n dirigidas a todos los p¨²blicos. "Ya fue un milagro conseguir rodar la pel¨ªcula all¨ª. Una vez con el permiso, mi ¨²nica intenci¨®n fue la de hacerla lo mejor posible. Ya habr¨ªa tiempo de pensar m¨¢s tarde en la censura", asegura el realizador, convencido que m¨¢s tarde o m¨¢s temprano, gracias a las nuevas tecnolog¨ªas, en China se podr¨¢ ver la versi¨®n ¨ªntegra.
Sin embargo, Lee sostiene que casi todo el mundo en China est¨¢ convencido de que son ellos los que est¨¢n ante la ¨²ltima versi¨®n y que la que se ve en el extranjero es un montaje alargado del original. Lo que m¨¢s lamenta es el corte de una secuencia concreta de violencia porque, en su opini¨®n, puede cambiar el sentido de un aspecto importante de la pel¨ªcula. "Si no se ve la secuencia ¨ªntegra se puede pensar que uno est¨¢ ante un acto heroico, cuando lo que de verdad se refleja es la p¨¦rdida total de la inocencia de unos j¨®venes". Pero siguiendo con su esp¨ªritu contradictorio, Lee reconoce que la citada escena es "demasiado fuerte para que la vean los m¨¢s j¨®venes".
Lee escogi¨® para Deseo, peligro al actor quiz¨¢s m¨¢s deseado del continente asi¨¢tico, Tony Leung, que en este filme hace de chino mandar¨ªn. "Hac¨ªan falta esas escenas de sexo para romper el molde y dar a conocer algo nuevo de ¨¦l", dice sonriente. "Es un villano, un hombre antip¨¢tico, que se odia a s¨ª mismo, lo m¨¢s opuesto a lo que suele hacer Tony". Y a su lado, busc¨® a una debutante, Tang Wei, a la que machac¨® con ocho meses de ensayos. Cineasta que busca retar al p¨²blico mostr¨¢ndole en toda su crudeza pero tambi¨¦n su belleza el comportamiento humano, ha tocado todos los g¨¦neros, incluido el del Oeste. Se encuentra c¨®modo en cualquiera de ellos. "Lo importante es conseguir el equilibrio entre la historia que uno manipula como creador y la necesidad de ser honesta con esa misma historia". Honestidad, sinceridad, equilibrio, valor... son palabras que aparecen a menudo en su vocabulario. Debe de tener muchas obsesiones a la hora de hacer cine, pero hay una que prima sobre las dem¨¢s. "Mi manera de acercarme al p¨²blico es a trav¨¦s de la sinceridad. Solo de esta manera se consigue luego el aprecio del espectador".
Babelia
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