Asesinar no es ejecutar
Constituye una trampa del lenguaje y un caballo de Troya favorable a los intereses de los criminales etarras el que acaben imponi¨¦ndonos su dial¨¦ctica. Como sucede cuando denominamos "liberados" a los etarras a sueldo; "lucha armada", a sus acciones asesinas; "comandos", a sus cuadrillas de pistoleros, etc¨¦tera.
Un ejemplo muy reciente de estas coces ling¨¹¨ªsticas lo tenemos con las informaciones sobre el ¨²ltimo asesinato en Francia de los dos j¨®venes guardias civiles, cuya muerte de nuevo ha sido calificada por distintos medios de comunicaci¨®n como "ejecuciones", o que "los guardias civiles fueron ejecutados", e incluso "ajusticiados".
Pero "ejecutar" y "ajusticiar" significan dar muerte al reo, y "reo" es el culpado en un proceso judicial. Para entendernos: ejecutar y ajusticiar es justo lo que ya no se puede aplicar sobre los asesinos. En este caso, m¨¢s que ante una trampa del lenguaje, nos encontramos con una hiriente paradoja.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.