Campeonato de anorexia en la red

Sexo, drogas y violencia, pero tambi¨¦n defensa de la anorexia, la bulimia o el suicidio est¨¢n al alcance de los ni?os en un solo click. La red no tiene fronteras de edad y por ella navega a diario el 75% de los ni?os espa?oles de entre 10 y 15 a?os, seg¨²n el INE. Internet puede ser una gran herramienta para su desarrollo pero cuando fracasan los filtros infantiles, y fracasan, puede convertirse en un riesgo. Un 30% de los ni?os que habitualmente usa la Red ha dado ya su n¨²mero de tel¨¦fono a un desconocido alguna vez, seg¨²n una encuesta de la asociaci¨®n Prot¨¦geles. Y un 17% ha visitado p¨¢ginas proanorexia o probulimia.

Casi un tercio de los ni?os admite haber dado su tel¨¦fono en la red

"Las p¨¢ginas proanorexia pueden ser m¨¢s nocivas que la pornograf¨ªa"

Numerosos filtros fracasan. S¨®lo algunos de pago son efectivos

La Guardia Civil ha creado una brigada que controlar¨¢ los contenidos nocivos

P¨¢ginas que explican t¨¦cnicas para suicidarse, que hacen apolog¨ªa del racismo y la xenofobia, web en las que se pueden ver v¨ªdeos de peleas o incluso de autopsias. Son algunos de los ejemplos que se encuentran en Internet. Los padres, muchas veces menos habilidosos que sus propios hijos en el uso de la Red, se encuentran en ocasiones ajenos al uso que ¨¦stos hacen de Internet. Otros se han decidido a instalar filtros para evitar que sus hijos accedan a contenidos que, como estos, pueden llegar a convertirse en un peligro para los menores.

"Si tienes hambre cuenta hasta mil, antes de terminar te dar¨¢s cuenta de que no vale la pena seguir metiendo grasa en el cuerpo. Toma un sorbo de agua por cada mordisco de comida, as¨ª te llenar¨¢s antes. Prueba la comida y esc¨²pela, rep¨ªtelo cuantas veces necesites para calmar la ansiedad". Trucos (o tips) como estos se ofrecen en una p¨¢gina web proana, es decir, proanorexia, por si surge el hambre. Es el blog de Ana Bel¨¦n, una joven que cuenta sus experiencias y habla de ana, de la anorexia, como si fuera una amiga de la que no puede librarse.

No es la ¨²nica. P¨¢ginas como la de Ana Bel¨¦n inundan la Red y reciben millones de visitas cada d¨ªa. En ellas se pueden encontrar desde consejos para no comer y enga?ar a la familia, hasta foros en los que se dan ¨¢nimos para seguir adelante, o las llamadas carreras de kilos. En las que las chicas -el 90% de las enfermas de anorexia son mujeres- compiten para ver quien pierde m¨¢s peso. "Hoy estoy 65 kilos y mido 1,70, me propongo bajar en una semana hasta los 60. ?Alguien se apunta conmigo?", dice una de las participantes en una carrera.

El 17% de los menores que utiliza habitualmente Internet visita p¨¢ginas proanorexia o probulimia. Un 17,5% de ellos (26,2% de chicas y el 15% de chicos) acceden a ellas para perder peso, seg¨²n datos de una encuesta a menores de entre ocho y 17 a?os de Prot¨¦geles, una asociaci¨®n trabaja para que haya m¨¢s seguridad para los menores en el mundo de las nuevas tecnolog¨ªas, que aparecer¨¢ pr¨®ximamente. Estas p¨¢ginas se est¨¢n convirtiendo, seg¨²n las conclusiones de esta asociaci¨®n, en los contenidos nocivos m¨¢s visitados por las ni?as. Las autoridades cierran diariamente muchas. Sin embargo, los expertos aseguran que por una que desaparece se crean otras cinco.

"Es un proceso que no tiene fin. Internet va m¨¢s r¨¢pido que la sociedad", asegura Mar¨ªa del Carmen Gonz¨¢lez, coordinadora de Adaner, la Asociaci¨®n en Defensa de la Atenci¨®n a la Anorexia Nerviosa y Bulimia. "Pero no es preocupante s¨®lo la existencia de estas p¨¢ginas. Basta con buscar en Internet las palabras anorexia o bulimia y aparecen miles de enlaces a p¨¢ginas para adelgazar. Esto, de cara a los menores nos preocupa much¨ªsimo", contin¨²a Gonz¨¢lez. Prot¨¦geles, que lucha desde hace a?os contra estas p¨¢ginas ha creado ahora una web para ayudar a j¨®venes que sufren de estas enfermedades. En stop-obsesion.com han abierto una l¨ªnea de ayuda online para atenderlos.

"?Cu¨¢ntas horas llevan sin comer? ??Bravo!!". Las p¨¢ginas proana y prom¨ªa presentan la enfermedad como una filosof¨ªa de vida. Aseguran que s¨®lo buscan la perfecci¨®n y forman en la Red una comunidad en la que los enfermos se sienten arropados. "En un problema grav¨ªsimo. En la asociaci¨®n nos hemos encontrado con muchas personas que han confesado que usaban estas web", asegura Gonz¨¢lez. "Las autoras de estas p¨¢ginas suelen ser ni?as muy manipuladoras que captan la atenci¨®n de otras. No s¨®lo de las que ya tienen estos trastornos. Tambi¨¦n de otras que se ven arrastradas por la enfermedad. All¨ª intercambian consejos, las m¨¢s experimentadas aleccionan a las que empiezan", explica la psic¨®loga Covadonga Batres. En muchas de ellas aparece la que llaman "la pir¨¢mide de Ana", una variante de la pir¨¢mide alimenticia en la que, en el primer escal¨®n est¨¢ el agua y en el ¨²ltimo, alimentos poco cal¨®ricos como la lechuga. Lo que da una idea de la alimentaci¨®n diaria recomendada de las usuarias de este tipo de p¨¢ginas.

La Brigada de Delitos Telem¨¢ticos de la Guardia Civil ha creado un grupo especial que, a partir de enero se dedicar¨¢ a trabajar controlando contenidos nocivos para los menores. P¨¢ginas como las proana y prom¨ªa que, a pesar de no ser ilegales, pueden influir de manera negativa en el desarrollo del ni?o. "Webs de autolesiones, otras en las que aparecen im¨¢genes de mutilaciones, linchamientos, autopsias, p¨¢ginas de incitaci¨®n al suicidio. Todo est¨¢ en Internet", dice Enrique Rodr¨ªguez, inspector jefe de la Brigada. "La visi¨®n de estas p¨¢ginas puede llegar a ser incluso m¨¢s perjudicial que la pornograf¨ªa", asegura Guillermo C¨¢novas. Su asociaci¨®n recibe diariamente denuncias de padres, profesores e incluso j¨®venes que alertan de la existencia de estas web.

El mayor peligro al que se enfrentan los ni?os y adolescentes en Internet es, para Rodr¨ªguez, que lleva a?os trabajando en el mundo de las nuevas tecnolog¨ªas, los desconocidos que les piden sus datos. El 30% de los menores que habitualmente usa Internet ha dado ya su tel¨¦fono a un desconocido alguna vez, seg¨²n la encuesta de Prot¨¦geles a 4.000 menores. El 16% de los encuestados asegura que ha dado tambi¨¦n su direcci¨®n y lo que es m¨¢s grave el, 14,5% de los menores que participaron en la encuesta han concertado una cita con alg¨²n desconocido a trav¨¦s de la Red. "Los ni?os dan sus datos a alguien que muchas veces dice ser otro ni?o pero que, en realidad es un adulto que oculta su identidad", explica Rodr¨ªguez, que asegura que han recibido denuncias de padres que han sabido que sus hijos han concertado una cita a ciegas con alguno de estos supuestos ni?os y se encontraron una "desagradable sorpresa".

Para tratar de evitar situaciones como ¨¦sa, la Agencia Espa?ola de Protecci¨®n de Datos y la Comisi¨®n de Libertades e Inform¨¢tica firmaron ayer un acuerdo para impulsar la educaci¨®n y la concienciaci¨®n entre menores y adolescentes sobre el valor de sus datos personales. Estas dos instituciones comenzar¨¢n el a?o que viene una campa?a de divulgaci¨®n de los peligros que conlleva revelar los datos a desconocidos por Internet o por el m¨®vil, y sensibilizar a los j¨®venes del valor de esa informaci¨®n.

El caso de personas que se hacen pasar por otras para conseguir algo de los menores no es infrecuente. Muchas veces es la esencia del grooming, el acoso sexual a menores en la Red. As¨ª, muchos adultos consiguen im¨¢genes pornogr¨¢ficas de ni?os y adolescentes con las que luego les chantajean para seguirles teniendo bajo su influencia. "El 40% de los menores usuarios habituales de la Red se ha encontrado en alguna ocasi¨®n acosado", asegura C¨¢novas.

Pero no se puede demonizar a Internet. A pesar de los riesgos, la Red se ha revelado como un excelente sistema de comunicaci¨®n. Y cada vez m¨¢s menores la utilizan. "Internet no es ni bueno ni malo, es una herramienta. Depende del uso que hagamos de ¨¦l. Hay muchos casos en que es bueno. Hay ni?os que tienen problemas para relacionarse y se sirven de la Red para tomar contacto con otros ni?os y mostrarse como realmente son", asegura C¨¢novas. "Los sistemas de comunicaci¨®n como el messenger o el chat, si se utilizan bien pueden ser positivos. Sin embargo, llevado al exceso y sin ning¨²n control genera situaciones que pueden desembocar incluso en una adicci¨®n a Internet", sostiene Covadonga Batres.

En la asociaci¨®n Proyecto Hombre han tratado en los ¨²ltimos cuatro a?os a diez personas que sufr¨ªan alg¨²n tipo de adicci¨®n a Internet. Entre ellos varios menores. "Son personas que tienen una actitud compulsiva respecto a Internet. Se conectan varias veces al d¨ªa y si no pueden hacerlo les aparece una especie de s¨ªndrome de abstinencia y se pueden mostrar irascibles", explica Luis Bononato, director de Proyecto Hombre Jerez, una de las sedes que m¨¢s enfermos de este tipo ha tratado. Bononato asegura que cada vez m¨¢s ni?os y j¨®venes sufren de este problema pero que sus padres no lo identifican. "Muchos adem¨¢s se despreocupan de los contenidos que sus hijos visitan en Internet y del tiempo que est¨¢n conectados", dice.

Los padres, a veces ajenos a lo que sus hijos hacen en Internet, pueden controlar el uso que ¨¦stos hacen de la Red. Existen mecanismos como instalar el ordenador en las zonas comunes de la casa, o estar presente cuando los ni?os navegan por Internet. En el 83% de los hogares en los que alguno de los ni?os (de 10 a 15 a?os) se conecta a Internet sus padres controlan su acceso a determinados sitios o contenidos, seg¨²n una encuesta del INE. Esta encuesta revela que el 86,3% de los hogares utiliza como principal medio de control el acompa?ar al menor mientras accede a la Red. S¨®lo el 44% de los hogares tiene instalado alg¨²n sistema de filtrado espec¨ªfico que restringe por s¨ª mismo el acceso a ciertos contenidos, programados por el adulto, y que permite configurar ciertos horarios para la navegaci¨®n.

Sin embargo, desde Prot¨¦geles se alerta de que no todos los filtros son efectivos. Es m¨¢s, seg¨²n esta asociaci¨®n, la mayor¨ªa de los que se ofrecen gratis no lo son. "Los filtros gratuitos s¨®lo tienen una efectividad del 40%. Qu¨¦ sucede con el 60% restante. Los buenos filtros cuestan entre 30 y 50 euros al a?o", asegura el presidente de Prot¨¦geles. Esta asociaci¨®n reclama que el Gobierno financie estos programas para promover que cada vez m¨¢s padres los instalen.

Filtros com el de McAfee Privacy Service, NetNanny, Norton Internet Security, Optenet PCFilter, Panda Platinum, o Trend Micro, recomendados por Prot¨¦geles y la asociaci¨®n francesa Action Inocence, que han hecho un estudio sobre los mejores filtros del mercado. Tambi¨¦n muchos proveedores de Internet han creado su propio sistema de filtrado.

Jos¨¦ Luis tiene cuatro hijos. Hace un a?o, cuando su hija mayor cumpli¨® 11 y comenz¨® a utilizar Internet, decidi¨® instalar en su ordenador Canguro Net, el filtro que Telef¨®nica ofrece como un extra para sus clientes. "Se puede configurar como se quiera. Yo lo tengo bastante limitado porque mis hijos son muy peque?os. As¨ª me quedo mucho m¨¢s tranquilo si mi hija est¨¢ sola navegando", explica. As¨ª, la ni?a no puede entrar en las p¨¢ginas que su padre ha restringido: p¨¢ginas de violencia, sexo, anorexia, drogas... "A¨²n as¨ª me intereso sobre las p¨¢ginas en las que entra", dice, "es bueno preguntarles por ello igual que se les pregunta a los ni?os por otro tipo de actividades de ocio".