Kar¨ªmov repite como presidente uzbeko con el 88% de los votos
Islam Kar¨ªmov ha sido reelegido presidente de Uzbekist¨¢n por otros siete a?os con un escrutinio digno de la Uni¨®n Sovi¨¦tica: 88,1% de los votantes respald¨® su candidatura en las elecciones presidenciales celebradas el domingo, que la Organizaci¨®n para la Seguridad y la Cooperaci¨®n en Europa (OSCE) ha calificado de no democr¨¢ticas.
Los otros tres candidatos, personajes sin envergadura vinculados al r¨¦gimen, obtuvieron cada uno alrededor del 3%. La abstenci¨®n apenas lleg¨® al 10%. "La elevada participaci¨®n del electorado demuestra un mayor compromiso pol¨ªtico por parte de los ciudadanos", dijo el lunes el presidente de la comisi¨®n electoral, Mirzo-Ulugbek Abdusalmov.
Una interpretaci¨®n muy distinta ofrec¨ªa la OSCE. "Los votantes han sido privados de una verdadera elecci¨®n", indic¨® el comunicado de la misi¨®n de observaci¨®n, que adem¨¢s de la absoluta falta de pluralidad, constat¨® "irregularidades" en el proceso de votaci¨®n. La OSCE nunca ha reconocido como homologable una elecci¨®n en Uzbekist¨¢n, y este caso no fue la excepci¨®n: "Estos comicios no han cumplido con los requisitos de la OSCE" para ser considerados como democr¨¢ticos. Por el contrario, los observadores de la pos sovi¨¦tica Comunidad de Estados Independientes (CEI) describieron las elecciones uzbekas como "libres, abiertas y transparentes".
Kar¨ªmov, economista de 70 a?os, dirige con mano de hierro desde hace 18 a?os esta ex rep¨²blica sovi¨¦tica de Asia Central, donde los partidos pol¨ªticos y los medios independientes est¨¢n prohibidos, y los opositores se hallan en la c¨¢rcel o en el exilio. El mandatario uzbeko, abanderado en la lucha contra los integristas isl¨¢micos, estuvo en el foco de la cr¨ªtica mundial a ra¨ªz de la represi¨®n de un levantamiento en mayo de 2005, que dej¨® centenares de muertos.
Uzbekist¨¢n, de 27 millones de habitantes, es la rep¨²blica m¨¢s poblada de la regi¨®n. A pesar de las vastas reservas de hidrocarburos, la econom¨ªa del pa¨ªs, en buena medida bajo control estatal, no logra despegar, y una tercera parte de la poblaci¨®n vive en la pobreza.
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