Los obispos desempolvan la batalla del aborto

El debate sobre el aborto ha revivido con virulencia en Espa?a el ¨²ltimo mes despu¨¦s de que una investigaci¨®n judicial llevara a prisi¨®n a varios profesionales de cl¨ªnicas que practican la interrupci¨®n del embarazo en Catalu?a, pero sobre todo, de la batalla de los obispos y sectores de la derecha contra el Gobierno. En un acto multitudinario convocado el 30 de diciembre por los obispos en defensa de la "familia", casi 200.000 personas corearon consignas contra aborto, divorcio expr¨¦s o matrimonio homosexual como parte de una pol¨ªtica peligrosa que hace tambalear, en palabras del cardenal Garc¨ªa Gasco, la propia democracia.

Rajoy: "No tengo pensado hacer cambios en el divorcio y el aborto"

En el programa electoral del PSOE figuraba la ley de plazos

Pero ?qui¨¦nes son los obispos para hablar de democracia y dar lecciones, en nombre de una instituci¨®n que no permite la igualdad de g¨¦neros ni otros valores b¨¢sicos de la misma? El Gobierno reaccion¨® duramente contra la Iglesia y la acus¨® de participar en un acto de campa?a, en connivencia con el PP, a s¨®lo dos meses de las elecciones.

Algunos miembros del PP participaron en la exhibici¨®n de fuerza de la Iglesia, y fuentes defensoras del derecho al aborto consideran a la derecha como instigadora de las investigaciones que se est¨¢n llevando a cabo en Madrid y en Barcelona. Pero la realidad es que el PP, en plena contradicci¨®n con lo que defiende la Iglesia, se ha negado a hacer suyos esos postulados y, p¨²blicamente, trata de pasar lo m¨¢s desapercibido posible.

El mi¨¦rcoles, el presidente del PP, Mariano Rajoy, se declar¨® contrario a cualquier cambio: "No tengo pensado hacer cambios importantes en la Ley del Divorcio y tampoco en la Ley del Aborto", asegur¨®. "Lo que tiene que hacer el Gobierno es garantizar que se cumpla la ley, porque tengo la sensaci¨®n de que no se cumple".

La vulnerabilidad de las mujeres que han llevado a cabo abortos en las cl¨ªnicas investigadas, sin embargo, ha llevado a la izquierda a recuperar un debate que parec¨ªa superado en Espa?a. Y dentro del PSOE, las cr¨ªticas tambi¨¦n han arreciado.

El partido hab¨ªa incluido una propuesta para ampliar la ley del aborto en el programa de 2004. Una asignatura pendiente desde 1985 y que permitir¨ªa reconocer el derecho a la mujer a abortar los tres primeros meses sin tener que suscribirse a los tres supuestos recogidos en la ley: el da?o f¨ªsico o ps¨ªquico para la madre, malformaciones del feto o violaci¨®n. Si eso se hubiera producido, si se hubiera aprobado la llamada ley de plazos, nadie podr¨ªa poner en cuesti¨®n la justificaci¨®n de los abortos realizados.

Tras las detenciones en Barcelona, la mayor¨ªa de los miembros de la Comisi¨®n Ejecutiva Federal del PSOE vivi¨® un espejismo porque crey¨® entender de su secretario general, Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero, que podr¨ªa producirse una revisi¨®n de la ley del aborto para ampliarlo. No fue as¨ª y Zapatero, tras las interpretaciones dadas de sus palabras, zanj¨® el asunto para dejar las cosas como est¨¢n.

Durante la ejecutiva, varios ponentes opinaron ante Zapatero que hab¨ªa llegado el momento de revisar una ley que tras muchos a?os de aplicaci¨®n se demostraba que ten¨ªa lagunas e imperfecciones. El debate lo abri¨® la secretaria de Igualdad, Maribel Monta?o, y le siguieron Pedro Zerolo, Diego L¨®pez Garrido, ?lvaro Cuesta, Elena Valenciano, Carmen Hermos¨ªn, y Leire Paj¨ªn, entre otras.

El debate tuvo dos vertientes. Por un lado, la necesidad de defender el derecho al aborto frente a cierto "arrugamiento" ante la ofensiva de los sectores que, con la Iglesia a la cabeza, est¨¢n en contra del mismo. En efecto, el PSOE guardaba silencio. Despu¨¦s, todos se enteraron que con la actual legislaci¨®n se puede abortar sin l¨ªmite temporal si las mujeres se acogen al supuesto de da?o para la salud ps¨ªquica. Seg¨²n los asistentes a esa reuni¨®n de la ejecutiva federal, Zapatero se?al¨® que las reflexiones tendr¨ªan "reflejo" en el programa electoral. La mayor¨ªa quiso ver en esas palabras un cambio en la actual legislaci¨®n. No ser¨¢ as¨ª. Aunque todav¨ªa no se ha hecho la redacci¨®n de esa materia todo apunta a que s¨®lo figurar¨¢ una llamada a la "reflexi¨®n" sobre qu¨¦ aspectos podr¨ªan cambiar para mejorar, pero sin compromiso alguno.

Parec¨ªa superado pero, 22 a?os despu¨¦s, el aborto vuelve al debate, y las mujeres tienen miedo.