La construcci¨®n perder¨¢ m¨¢s de 20.000 empleos este a?o

El par¨®n de la construcci¨®n, del que los propios agentes del sector hablaban hasta no hace mucho con la boca peque?a, tendr¨¢ su repercusi¨®n en el mercado laboral. Las principales patronales del sector, la C¨¢mara de Contratistas de Obras de Catalu?a (CCOC) y la Asociaci¨®n de Promotores de Barcelona-APCE, vaticinan que 2008 se cerrar¨¢ con alrededor de 20.000 puestos de trabajo menos, en el mejor de los escenarios. El sector cuenta con 282.000 afiliados a la Seguridad Social y 440.000 personas declaran estar trabajando, seg¨²n la Encuesta de Poblaci¨®n Activa (EPA).

El presidente de la APCE en Barcelona, Enric Reyna, ha sido el primero en admitir las consecuencias de un baj¨®n "no controlado" de la edificaci¨®n residencial. "Si volvi¨¦ramos a los niveles de 2003, si pas¨¢ramos de 127.000 viviendas a 88.000, unas 40.000 menos, perder¨ªamos 22.000 puestos de trabajo", ha advertido.

"Los datos de enero y febrero ser¨¢n determinantes para ver la magnitud de la recesi¨®n"

Las previsiones del presidente de la CCOC, Rafael Romero, van en la misma l¨ªnea: "El a?o 2008 se podr¨ªa saldar con alrededor de 250.000 trabajadores, unos 30.000 menos que ahora. Pero eso ser¨¢ en el peor de los casos, si la obra civil, la rehabilitaci¨®n y la edificaci¨®n no residencial

[oficinas, naves, etc¨¦tera] no tiran. Creo que la cifra rondar¨¢ los 265.000, se destruir¨¢n unos 15.000 puestos de trabajo".

Pero Romero se refiere al tema con cautela. Para poder llevar a cabo una aproximaci¨®n del empleo que se perder¨¢, se necesita -sostiene- la variaci¨®n del n¨²mero de viviendas en construcci¨®n, no la disminuci¨®n del n¨²mero de viviendas. Y por ahora no hay ning¨²n organismo oficial competente que informe de las viviendas en construcci¨®n. "Lo contrario son estimaciones fr¨ªvolas y poco fiables".

En cualquier caso, el presidente de la CCOC tiene claro que no se cumple la relaci¨®n, que muchos defienden -como el propio director de la Oficina Econ¨®mica del Gobierno, David Taguas, seg¨²n la cual por cada vivienda que deje de construirse se pierden dos puestos de trabajo.

Si la teor¨ªa se cumple, este a?o deber¨ªan destruirse 90.000 puestos de trabajo en Catalu?a, puesto que el n¨²mero de visados -que anticipa la construcci¨®n de viviendas a un a?o- ha bajado el 37% en 2007, es decir, 46.000 unidades, seg¨²n el Colegio de Arquitectos de Catalu?a, que vis¨® 79.655 viviendas, frente a las 126.326 del ejercicio precedente.

De enero a octubre, explica Romero, se iniciaron en Catalu?a 78.583 viviendas, 35.000 menos que las 113.657 iniciadas en el mismo periodo del ejercicio anterior, "y no hay 70.000 parados m¨¢s", aunque s¨ª reconoce que la relaci¨®n causa-efecto no es inmediata, sino que sus efectos se notan al cabo de unos seis meses.

Los parados han sido 4.700 en todo 2007, seg¨²n los datos de paro registrados, lo que representa el 20% m¨¢s que un a?o antes y deja el n¨²mero de parados en 28.620 personas. El dato preocupa, y mucho, a los sindicatos. Germ¨¢n Gonz¨¢lez, dirigente de la federaci¨®n de la construcci¨®n de Comisiones Obreras en Catalu?a, no duda que "hay una recesi¨®n en el empleo por el par¨®n de la vivienda, que ir¨¢ a m¨¢s este a?o".

Gonz¨¢lez y Reyna conf¨ªan en que "la mayor actividad" de la obra p¨²blica compensar¨¢ el par¨®n de la edificaci¨®n residencial. De lo contrario, la destrucci¨®n de empleo ser¨¢ mayor. No en vano las viviendas de nueva construcci¨®n representan el 3% del sector. Los edificios no residenciales, el 20%; la rehabilitaci¨®n y el mantenimiento de edificios, el 24%, y la obra civil, el 21%.

Por ese motivo, Rafael Romero exige a la Administraci¨®n medidas m¨¢s favorables a la rehabilitaci¨®n: menos impuestos y menos restricciones.

Con todo, que en la construcci¨®n se destruyan, en el mejor de los casos, alrededor de 20.000 puestos de trabajo, no implica necesariamente 20.000 parados m¨¢s. El secretario de la construcci¨®n de la UGT en Catalu?a, Narciso Riera, recuerda el "enorme trasvase" de mano de obra de otros sectores al del ladrillo. "Durante los ¨²ltimos cinco a?os, la construcci¨®n ha absorbido todo el excedente de mano de obra procedentes de otras actividades, necesitamos que se vuelva a la normalidad. Los datos de paro de enero y febrero ser¨¢n determinantes para ver la magnitud de la recesi¨®n".