Esta chica me suena

Este domingo se celebra la gala de los Goya, una ceremonia que siempre ha tenido la pol¨¦mica como archivo adjunto. Otros a?os fue por el sistema de votaci¨®n, por motivos pol¨ªticos, por la ausencia de directores como Almod¨®var o por su excesiva duraci¨®n y gracia. Este a?o lo ha sido, antes incluso de su entrega, por la exclusi¨®n de los cortometrajes en la gala oficial. El error ha sido subsanado ante la protesta general, pero la Academia ya ha tenido su peque?o jaleo este a?o. Como siempre.

No creo que los miembros de la direcci¨®n de la Academia se levanten por la ma?ana y se pregunten: "A ver qu¨¦ movida nos inventamos para este a?o...", por lo que entiendo que estos problemas no vienen dados por la mala fe sino por las dificultades de organizaci¨®n y, sobre todo, de contentar a todo el mundo.

Pero el a?o pasado se produjo una pol¨¦mica quiz¨¢s de menor calado y que ahora veremos si se repite. Estoy hablando del momento alfombra verde (para diferenciarse del rojo de los Oscar). Y me refiero en concreto a la l¨®gica idea de los responsables del programa Espa?a directo de enviar a dos reporteros para cubrir la llegada de los invitados a la Gala. Menos l¨®gico era que ninguno de los portadores de micr¨®fono se supieran los nombres de los actores a los que entrevistaban, con lo que la conexi¨®n estuvo plagada de confusiones u omisiones ("Aqu¨ª llegan... esto... llegan... mmm... nuestros actores"). Tampoco les culpo.

Creo que la situaci¨®n es muy representativa de la relaci¨®n entre el cine espa?ol y su p¨²blico (m¨¢s p¨²blico potencial que otra cosa). Es como si los espa?oles dijeran a sus cineastas: "s¨¦ que exist¨ªs pero no he visto vuestras pel¨ªculas y no s¨¦ qui¨¦nes sois".

En Espa?a no tenemos precisamente un star system lleno de nombres conocid¨ªsimos para todo el mundo. Nos movemos m¨¢s en los t¨¦rminos "esta chica me suena" o "¨¦ste sale en la tele". Hay pocos actores y actrices de relumbr¨®n, de esos que arrastran a las masas a la taquilla. Ni Bardem asegura ¨¦xito, ni Pen¨¦lope Cruz, as¨ª que imag¨ªnense aquellos de los que apenas recordamos el nombre. Afortunadamente, eso tiene poco que ver con la calidad de sus interpretaciones, ya que en mi opini¨®n el nivel de los int¨¦rpretes espa?oles es buen¨ªsimo. Este a?o por lo menos en los Goya est¨¢ El orfanato y todo el mundo sabe qui¨¦n es Bel¨¦n Rueda. Con ella, los reporteros de Espa?a directo seguro que no se equivocan. O eso espero.