Los menores se enganchan a la cirug¨ªa est¨¦tica
Unas 400.000 personas se operan cada a?o en Espa?a. El 10% son menores. Unos tienen una verdadera patolog¨ªa, otros lo hacen por capricho
La cirug¨ªa est¨¦tica gana terreno en Espa?a. Tambi¨¦n entre los menores de edad. Cada vez m¨¢s acuden a las consultas m¨¦dicas con intenci¨®n de operarse. Los expertos alertan del auge de estas intervenciones entre los adolescentes. A esas edades pueden provocar problemas en su desarrollo. Sin embargo, no hay una regulaci¨®n legal que impida practicarlas. La idea de la joven que acude al cirujano porque le han regalado una intervenci¨®n para hacerse alg¨²n retoque no es una entelequia. Para frenar la normalizaci¨®n de esta cirug¨ªa entre los menores, comunidades como Andaluc¨ªa les obligar¨¢n a someterse a un examen psicol¨®gico previo. Entre los m¨¦dicos hay discrepancias sobre la edad en la que debe hacerse este tipo de intervenciones.
Andaluc¨ªa estudiar¨¢ la madurez de los j¨®venes antes de la operaci¨®n
No hay una edad m¨ªnima para intervenir a un paciente
"No se debe operar el cuerpo cuando est¨¢ en desarrollo", dice un m¨¦dico
La cirug¨ªa est¨¢ para resolver problemas, no por moda, se?ala un especialista
Algunos m¨¦dicos piden que se regule la publicidad de estas intervenciones
Cada a?o, unas 400.000 personas se operan de cirug¨ªa est¨¦tica en Espa?a. Se ignora cu¨¢ntas de ellas no han cumplido a¨²n los 18 a?os. No hay datos por edades. Sin embargo, se estima que alrededor de un 10% de los pacientes que solicitan una intervenci¨®n de este tipo son menores de edad, seg¨²n la Sociedad Espa?ola de Medicina Est¨¦tica (SEME). Algunos llegan a pasar por el quir¨®fano. Otros no. Muchos tienen una verdadera patolog¨ªa que solucionar, el resto s¨®lo una falsa percepci¨®n de s¨ª mismos o un ideal de belleza extremo.
La imagen de la joven que acude a la consulta con la foto de su ¨ªdolo para operarse y tener unos labios, nariz o barbilla -o incluso las tres cosas- iguales que los de su admirada actriz, modelo o cantante no es una fantas¨ªa. "Puede parecer una an¨¦cdota, pero las j¨®venes que llegan con fotograf¨ªas de famosos para explicar que quieren unos labios como los de la actriz Angelina Jolie son frecuentes", explica Pilar Rodrigo, presidenta de la SEME.
Pero ni relleno de labios, ni liposucciones, ni aumentos de pecho. La cirug¨ªa est¨¦tica en edades tempranas no es aconsejable. S¨®lo debe hacerse en "contadas ocasiones", seg¨²n los expertos. Operaciones de orejas (otoplastias) o intervenciones de reducci¨®n de mamas en caso de malformaci¨®n u otras patolog¨ªas similares son algunas de esas excepciones. Otro tipo de cirug¨ªa puede provocar alteraciones en el desarrollo del paciente o llegar a resultar in¨²til con el paso del tiempo y el cambio en el cuerpo del menor.
Pero, ?qu¨¦ ocurre cuando un ni?o o un adolescente desea operarse? Los menores de edad necesitan el consentimiento de sus padres para pasar por el quir¨®fano, seg¨²n la Ley de Autonom¨ªa del Paciente. Sin embargo, a partir de los 16 a?os podr¨ªan someterse a una operaci¨®n si se considera que tienen suficiente madurez. Los padres podr¨¢n ser informados y su opini¨®n tenida en cuenta si la intervenci¨®n implica "grave riesgo" para su salud.
Adem¨¢s, no existe ninguna normativa que impida a un m¨¦dico realizar una operaci¨®n de cirug¨ªa est¨¦tica a una persona menor de edad. Sin embargo, muchos cirujanos aseguran que nunca lo har¨ªan. "No se debe operar un cuerpo cuando el paciente a¨²n est¨¢ en periodo de crecimiento y desarrollo", explica Antonio Porcuna, presidente de la Sociedad Espa?ola de Cirug¨ªa Pl¨¢stica Reparadora y Est¨¦tica (SECPRE).
Porcuna asegura que los miembros de la sociedad que preside no operan a menores de edad, pero reconoce que existen centros donde s¨ª se hace. El ejemplo est¨¢ aqu¨ª: "?Desde qu¨¦ edad puede realizarse una liposucci¨®n? Desde los 14 a?os, aunque esta edad tan temprana es infrecuente", asegura una web de un cirujano pl¨¢stico.
El problema para muchos profesionales m¨¦dicos es que la cirug¨ªa y otros tratamientos de est¨¦tica que no precisan quir¨®fano se han banalizado. "Hay mucha publicidad, cheques regalo, promociones y descuentos que han convertido estas intervenciones en algo m¨¢s o menos com¨²n", sostiene V¨ªctor Garc¨ªa Gim¨¦nez, presidente de la Sociedad Espa?ola de Medicina y Cirug¨ªa Cosm¨¦tica (SEMCC).
Tanto que, seg¨²n Garc¨ªa Gim¨¦nez, muchos padres ceden a la presi¨®n de sus hijos y les regalan por su aniversario un tratamiento de mesoterapia para diluir la celulitis, por ejemplo. Algo que ya se ve¨ªa en lugares como Estados Unidos o algunos pa¨ªses de Latinoam¨¦rica est¨¢ empezando a ocurrir tambi¨¦n en Espa?a. "Mucha gente ha cambiado el regalo tradicional por una intervenci¨®n de est¨¦tica", asegura. Pilar Rodrigo coincide con Garc¨ªa Gim¨¦nez. "Generalmente son los j¨®venes los que solicitan el tratamiento. Son ellos los que arrastran a sus padres, si es que ya no vienen solos", dice.
Aparte del consentimiento paterno, los adolescentes suelen necesitar su apoyo econ¨®mico. "Me he encontrado casos en la consulta en los que el chico o la chica ha convencido a los padres para operarse y que, en cuanto el joven ha salido de la sala un momento con la enfermera, me han pedido que les convenza de que no se haga nada o de que espere un tiempo", cuenta Garc¨ªa Gim¨¦nez.
Pero los menores ven cada vez m¨¢s normal la cirug¨ªa est¨¦tica. No es tan raro. Las operaciones han aumentado un 20% desde 1990, seg¨²n las cifras de las sociedades m¨¦dicas, y Espa?a se ha convertido en el pa¨ªs europeo que m¨¢s intervenciones de este tipo registra. Es adem¨¢s el tercero del mundo por detr¨¢s de Estados Unidos y Brasil. "La demanda de cirug¨ªa est¨¦tica ha crecido en toda la poblaci¨®n. Y esto, proporcionalmente, incluye a los j¨®venes", dice Antonio Porcuna.
Pero en ese crecimiento de las operaciones de est¨¦tica, ?qu¨¦ es lo m¨¢s demandado? Las implantaciones de pr¨®tesis mamarias se llevan la palma. Por esta intervenci¨®n pasan alrededor de 25.000 mujeres al a?o. Tambi¨¦n las liposucciones. Entre los hombres, en los que ha aumentado la demanda de este tipo de cirug¨ªa, lo m¨¢s solicitado son las blefaroplastias (operaci¨®n para corregir las ojeras y las bolsas de los ojos) y la liposucci¨®n de abdomen.
Como ocurre con los adultos, el aumento de pecho, la liposucci¨®n y, a veces, el relleno de labios son las intervenciones m¨¢s demandadas entre las adolescentes, seg¨²n Pilar Rodrigo. Porque son mayoritariamente chicas las que acuden a las consultas con intenci¨®n de operarse. Operaciones que, a juicio de los profesionales, hay que alejar tajantemente de otras que pueden llegar a ser verdaderas necesidades. "La cirug¨ªa est¨¦tica no est¨¢ para adaptarse a la moda, sino para solucionar problemas", explica ?ngel Mart¨ªn, director m¨¦dico del Centro Cl¨ªnico Menorca, que sostiene que hay ciertas cosas que nunca se deber¨ªan hacer hasta que la persona sea mayor y complete su desarrollo. Las rinoplastias (operaciones de nariz), por ejemplo, no se pueden hacer hasta que termina de crecer el hueso de la nariz. Tampoco las liposucciones o el aumento de pecho. Hay que esperar hasta los 18 o 19 a?os, seg¨²n Mart¨ªn, hasta que se haya completado el desarrollo hormonal de la paciente.
Paloma esper¨®. Hace un par de meses que, nada m¨¢s cumplir la mayor¨ªa de edad, entr¨® en el quir¨®fano para hacerse un aumento de pecho. Lo llevaba deseando desde los 13 a?os. "Ten¨ªa much¨ªsimo complejo. No me gustaba mi imagen, no estaba contenta y decid¨ª operarme", cuenta. Hoy est¨¢ encantada con su reci¨¦n estrenada talla 90. "Me puse un tama?o normal. Tampoco hay que exagerar...", bromea. "Ahora uso sujetador porque lo necesito, antes lo llevaba por ponerme algo", confiesa. Tras la operaci¨®n, que a¨²n est¨¢ pagando -"ped¨ª un plan de financiaci¨®n... ?si no, no hubiera podido!"-, se plante¨® hacerse alguna cosa m¨¢s. "Pero no creo que lo haga, ya ser¨ªa abusar", r¨ªe.
Mientras que el aumento de pecho tiene riesgos en j¨®venes que no han concluido su desarrollo, otras intervenciones no plantean problemas. "Las operaciones de orejas se pueden hacer desde los siete a?os. A veces te encuentras con verdaderas necesidades. Ni?os que llegan con un trauma porque en el colegio se est¨¢n metiendo continuamente con ellos por tener las orejas demasiado grandes o separadas. En ese caso la cirug¨ªa ayuda a terminar con ese calvario que muchos pasan", asegura el director m¨¦dico del Centro Cl¨ªnico Menorca.
Pesadillas como las que vivi¨® Ana Isabel, de 15 a?os. "Mi ni?a naci¨® con las orejas de soplillo y la gente se met¨ªa con ella. Incluso la propia familia le hac¨ªa bromas o le lanzaba indirectas", cuenta ?ngela, su madre. Ana Isabel pas¨® por el quir¨®fano hace un a?o. Desde entonces se hace mo?os y coletas casi cada d¨ªa. Antes nunca los hab¨ªa llevado. No se atrev¨ªa. No le gustaba la imagen que ve¨ªa en el espejo. "Est¨¢ encantada. Llevaba acomplejada desde los siete a?os, ha llorado mucho. Si hubiese sabido que se pod¨ªa operar antes lo habr¨ªa hecho, la he visto sufrir much¨ªsimo. Si no, yo no lo hubiera permitido. No la habr¨ªa dejado que se metiese en el quir¨®fano si no es por necesidad", explica su madre. Fue ?ngela la que acompa?¨® a Ana Isabel a la consulta del cirujano. La madre, que tambi¨¦n hab¨ªa pasado por una operaci¨®n de est¨¦tica, aconsej¨® a la hija operarse las orejas para acabar con el trauma que la acompa?aba desde peque?a. Si tuviera que volver a hacerlo repetir¨ªa. "Tengo otra hija que se est¨¢ empezando a plantear que quiere operarse el pecho. Tiene un desequilibrio muy grande de tama?o entre un pecho y otro y debe utilizar relleno en una de las copas del sujetador. En cuanto tenga dinero le pago la operaci¨®n", dice resueltamente.
Por necesidad o por capricho, casos como los de Paloma o Ana Isabel han aumentado. Ese auge de la cirug¨ªa est¨¦tica entre los adolescentes ha forzado que algunas comunidades aut¨®nomas se est¨¦n planteando regularla. Andaluc¨ªa obligar¨¢ a los menores de edad que quieran operarse a pasar antes un examen psicol¨®gico "para evaluar su grado de madurez". Ese an¨¢lisis, seg¨²n explica el decreto, "deber¨¢ descartar aquellos des¨®rdenes psicol¨®gicos y trastornos de personalidad que puedan constituir causa de contraindicaci¨®n de la cirug¨ªa est¨¦tica". El examen deber¨¢ hacerlo, adem¨¢s, un psic¨®logo ajeno al centro donde el menor va a intervenirse. Andaluc¨ªa, que cuando present¨® la medida recomend¨® a otras comunidades aplicarla, quiere tener adem¨¢s estad¨ªsticas fiables de los menores que se operan. Por eso tiene pensado crear un registro oficial de j¨®venes que se someten a intervenciones de cirug¨ªa est¨¦tica.
Para algunos m¨¦dicos, la idea andaluza no es lo ideal. "Ser¨ªa mejor que se frenase la publicidad enga?osa de estas operaciones o que se proh¨ªban los paquetes descuento", asegura V¨ªctor Garc¨ªa Gim¨¦nez, de la SEMCC. Pilar Rodrigo s¨ª est¨¢ a favor de medidas legislativas para regular las operaciones de est¨¦tica en menores, pero tambi¨¦n de una regulaci¨®n de la publicidad. "Los j¨®venes son especialmente vulnerables a las campa?as en las que imperan determinados c¨¢nones de belleza. Est¨¢n en una edad donde a¨²n tienen muchas inseguridades. Por eso han proliferado enfermedades como la anorexia y la bulimia. Los adolescentes creen que ser¨¢n m¨¢s felices o m¨¢s aceptados en un grupo si tienen unos labios m¨¢s carnosos o un pecho m¨¢s grande", asegura.
Con regulaci¨®n o sin ella, Rodrigo asegura que el auge de la cirug¨ªa est¨¦tica en menores debe frenarse. "Se puede llegar a convertir en una cadena. Una vez que consiguen cambiar algo que les disgusta ven en muchos casos que sus problemas no se solucionan y fijan su objetivo en otro defecto real o imaginario a corregir", expone. Para los expertos, la cirug¨ªa puede tener un efecto muy positivo para corregir malformaciones, cicatrices o defectos. Pero tambi¨¦n tiene sus riesgos. No s¨®lo f¨ªsicos. En la mayor¨ªa de las ocasiones no s¨®lo debe haber completado su desarrollo el cuerpo. Tambi¨¦n la personalidad. "En los j¨®venes hay muchas veces una inmadurez emocional y de personalidad que les hace tomar decisiones de las que luego pueden arrepentirse", dice Rodrigo.
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