Nueva York: el azul es el nuevo negro

Los desfiles de mi¨¦rcoles y jueves en Nueva York dejaron un rastro azul. Y en una ciudad que ama el negro, ¨¦sa es toda una noticia. Francisco Costa se sumergi¨® en las profundidades del rico marino en una severa colecci¨®n, un aplicado estudio de geometr¨ªa y arquitectura, que celebraba sus cinco a?os al frente de Calvin Klein y el 40 aniversario de la marca. Horas despu¨¦s, Tommy Hilfiger tambi¨¦n confi¨® en el intenso azul para abrir su desfile en el Avery Fisher Hall del Lincoln Center. La en¨¦sima revisi¨®n de la elegancia de los setenta, inspirada por la naturalidad de las fotograf¨ªas de la ¨¦poca de Sam Haskins.

Y los colores, como las formas, hablan. Seg¨²n el Pantone Colour Institute, el azul iris es el color m¨¢s elegido por los dise?adores de Nueva York para el pr¨®ximo oto?o. Casi un 14% de ellos lo han usado. "?Cu¨¢l es el mensaje? Que la gente est¨¢ buscando calma en un a?o vol¨¢til", declaraba Leatrice Eiseman, directora de esa peculiar instituci¨®n.

Los ecos de Klimt resonaron en Custo, ¨²nica marca espa?ola que desfila

"El azul, combinado con negro, me parece de pronto lo m¨¢s elegante", explicaba Francisco Costa antes de un desfile radical, moderno y preciso que aparc¨® cualquier artificio (no hubo bolsos, ni maquillaje, ni peinados) y se concentr¨® en la ropa de d¨ªa. "No se trata de hacer trajes, sino de ir m¨¢s all¨¢", apuntaba el creador de origen brasile?o.

Se impone dejarse de veleidades teatrales. Incluso Vera Wang, b¨¢sicamente conocida por sus trajes de noche y de novia, contuvo su romanticismo y ofreci¨® una colecci¨®n pragm¨¢tica, donde los colores, de nuevo, contaban su historia. Wang tom¨® prestada la paleta del pintor holand¨¦s Kees van Dongen y, con ello, se sum¨® a la curiosa corriente de homenaje al arte europeo.

La obra de Gustav Klimt ha estado expuesta todo el invierno en la Neue Gallery neoyorquina y se dir¨ªa que Anna Sui la ha visitado varias veces. Aunque la exc¨¦ntrica dise?adora ha pasado la referencia por el filtro de sus obsesiones recurrentes y el resultado, divertido, se convierte en un homenaje a la psicodelia. Los ecos de Klimt, no s¨®lo de sus pinturas sino tambi¨¦n de las t¨²nicas que vest¨ªa (siempre azules, por cierto), tambi¨¦n resonaron en el largu¨ªsimo desfile del jueves de Custo Barcelona. La ¨²nica marca espa?ola que participa en esta cita aprovech¨® el escaparate para mostrar su primera colecci¨®n de gafas. Un lanzamiento que, unido al de una l¨ªnea de relojes y a un perfume, supone un salto estrat¨¦gico para una compa?¨ªa que factura 73 millones de euros al a?o.