"La excesiva ocupaci¨®n de territorio toca a su fin"
El a?o pasado no fue todo lo bueno que se esperaba para el turismo espa?ol. Los visitantes extranjeros, seg¨²n datos provisionales, casi sumaron 60 millones, un 1,7% m¨¢s que en el a?o anterior, pero la tasa de crecimiento (2,5%) ha sido inferior a la del PIB (3,8%). A?o tras a?o, el turismo toca cifras r¨¦cord, aunque su progresi¨®n sea cada vez m¨¢s reducida, lo que no preocupa demasiado a Sebasti¨¢n Escarr¨¦, vicepresidente y consejero delegado de Sol Meli¨¢. Escarr¨¦ acaba de ser nombrado presidente de Exceltur, una asociaci¨®n integrada por los 24 grupos empresariales tur¨ªsticos m¨¢s importantes del pa¨ªs.
Pregunta. Desde su atalaya, ?c¨®mo valora las tendencias tur¨ªsticas y su impacto en el sector?
"Abrir los comercios de los centros urbanos en festivos no es suficiente. La oferta tiene que adaptarse a los turistas. Ya no vale el 'souvenir' tradicional"
Respuesta. Todos los indicadores mostraban s¨ªntomas de desaceleraci¨®n en 2007. Cay¨® la llegada de extranjeros y las pernoctaciones en toda la oferta de alojamientos, sobre todo los apartamentos tur¨ªsticos reglados. Esta desaceleraci¨®n continuar¨¢ en 2008.
P. ?Qui¨¦nes han sido los m¨¢s perjudicados?
R. Las encuestas nos dicen que las ventas han crecido de forma moderada. Pero es cierto que los beneficios no han venido por las ventas sino por una mejora de la competitividad, porque tuvimos que hacer frente al incremento de costes. Durante d¨¦cadas hemos querido batir r¨¦cords de visitantes, y al final vemos que los beneficios no proceden del volumen sino de unas ventas m¨¢s sostenibles.
P. ?Los m¨¢s beneficiados han sido los hoteles caros?
R. S¨ª, porque son los que han ampliado la oferta de calidad. Espa?a tiene la mejor hoteler¨ªa urbana de toda Europa en dise?o, y de todo el Mediterr¨¢neo, en la parte vacacional de 4 y 5 estrellas. Hay productos de 2 y 3 estrellas que necesitan rehabilitarse y mejorar. Pero hablamos de mejor¨ªas tambi¨¦n en su entorno, en los comercios tur¨ªsticos.
P. ?Le parece apropiada la apertura de los comercios del centro hist¨®rico en d¨ªas festivos como hace Madrid?
R. Como iniciativa me parece positiva, siempre y cuando cuente con el consenso de los comerciantes. Lo peor que le puede pasar a un turista al entrar a un establecimiento es que el dependiente no sea hospitalario y se muestre enfadado porque no le satisface trabajar ese d¨ªa. Como medida puede ayudar a contribuir a dinamizar zonas tur¨ªsticas, pero no es suficiente.
P. ?Por qu¨¦ es insuficiente?
R. Hace falta que el conjunto de la oferta comercial del centro se adapte a los turistas. No vale con el souvenir tradicional, la espadita. Hay que adecuarlos a las necesidades del siglo XXI, como ha hecho Nueva York, que es el para¨ªso del comercio. Una de sus primeras iniciativas fue abrir los domingos y festivos. Han regenerado el barrio chino, los mercados de carne, las galer¨ªas de arte, muebles, material electr¨®nico. Necesitamos que el comercio independiente se adapte.
P. ?A qu¨¦ atribuye la ca¨ªda en las pernoctaciones en hoteles baratos?
R. Se ha dicho que lo que se ahorran los turistas en los vuelos de bajo coste lo gastar¨ªan en mejores estancias y consumiendo m¨¢s, pero no es as¨ª. En el caso de Espa?a las pernoctaciones esenciales han sido las que m¨¢s han crecido. Las otras est¨¢n polarizadas en Canarias, donde existen zonas de grandes apartamentos tur¨ªsticos que tienen que adecuarse.
P. ?En qu¨¦ medida ha influido la desaceleraci¨®n en el ¨²ltimo semestre de 2007?
R. El menor crecimiento de la construcci¨®n ha supuesto una buena noticia. Al sector del alojamiento nos ha pillado con los balances bastante saneados. Muy pocas compa?¨ªas hab¨ªan crecido en exceso y la demanda ha sido fuerte para poder absorber a muchos constructores metidos a hoteleros. El crecimiento desmesurado de ocupaci¨®n del territorio toca a su fin.
P. Egipto y Turqu¨ªa han crecido m¨¢s. ?Hasta qu¨¦ punto son competitivos con Espa?a?
R. Entre los dos suman 32 millones de turistas, la mitad que Espa?a. Crecieron cada uno de ellos un 18%. No podemos competir en precio ni con el d¨®lar. S¨®lo podremos hacerlo con un mejor servicio y calidad. El sol y la playa seguir¨¢n teniendo gran ¨¦xito, pero Espa?a tiene otras muchas cosas m¨¢s que ofrecer.
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