Emilio Carballido, dramaturgo mexicano
Su obra incluye cuentos, novelas, teatro y guiones de cine
Con la muerte de Emilio Carballido (22 de mayo de 1925, C¨®rdoba, M¨¦xico) el teatro moderno mexicano perdi¨® a una de sus figuras emblem¨¢ticas, un dramaturgo que form¨® parte de la generaci¨®n de los cincuenta, al lado de otros grandes poetas como Jaime Sabines y Rosario Castellanos. Su estreno se dio en el Palacio de las Bellas Artes, precisamente en la mitad del siglo pasado, con la obra Rosalba y los llaveros bajo la direcci¨®n de Salvador Novo.
En una entrevista con el periodista Miguel ?ngel Quemain, el creador se defini¨® as¨ª: "Yo formo parte de una generaci¨®n de escritores. De Rosario Castellanos hablan siempre como poeta pero realmente las obras que le dieron un peso y una difusi¨®n universal fueron las novelas... La verdad es que fue un poeta extraordinario. Otro gran poeta de esa generaci¨®n es Bonifaz Nu?o, que despunt¨® con su propia voz mucho m¨¢s tarde. Pero somos una generaci¨®n de escritores, lo que pasa es que yo fui el dramaturgo pionero y el que empujaba a los dem¨¢s al drama. A empujones me llevaba yo a los narradores hacia el drama".
Sobre la forma en que lleg¨® a la dramaturgia, dec¨ªa que tuvo que ver y no el azar, pues hab¨ªa estudiado leyes, carrera en la que "la pas¨¦ muy mal", pero ya "hab¨ªa escrito una pieza teatral en vez de repasar mis lecciones de legislaci¨®n. Lleg¨® la ¨¦poca de ex¨¢menes y mejor me dediqu¨¦ a escribir mi segunda obra. No me quise seguir enga?ando y me fui a Filosof¨ªa y Letras".
Las generaciones que le han seguido por los escenarios y los escritos tambi¨¦n valoran a Carballido como un creador de dramaturgos y directores de teatro, pero sobre todo de amantes de las artes. Fue maestro de muchas cosas relacionadas con la creaci¨®n teatral, pero no dejaba pasar oportunidad para dejar claro que para ¨¦l "la literatura no es ense?able. Se ense?a la gram¨¢tica, el buen oficio literario. Pero el arte no se ense?a: se tiene o no se tiene. As¨ª de simple, se ense?a la artesan¨ªa literaria. Es lo ¨²nico transmisible".
Cerca de un centenar de obras de teatro que forman su legado, son muestra de su talento: Un peque?o d¨ªa de ira (1961), ?Silencio pollos pelones, ya les van a echar su ma¨ªz! (1963), Te juro, Juana, que te tengo ganas (1965), Yo tambi¨¦n hablo de la Rosa (1965), Acapulco los lunes (1969), Las cartas de Mozart (1974) y Rosa de dos aromas (1986), entre muchas. Su agenda de trabajo siempre estuvo a reventar, pero se dio tiempo para trabajar en cine, m¨¢s de medio centenar de guiones lo prueban. En 1972 recibi¨® dos premios Ariel (Oscar mexicano) por argumento y gui¨®n de El ¨¢guila descalza, de Alfonso Arau. Y conquist¨® igualmente el Ariel de Oro por su trayectoria en el s¨¦ptimo arte.
A los 82 a?os, en Xalapa, capital de su Estado natal, Veracruz, muri¨® Emilio Carballido, cuyo compromiso primordial fue con las artes, como lo prueban sus palabras: "No podemos escribir predispuestos a denunciar algo. Si somos personas comprometidas y tenemos preocupaciones ¨¦ticas, la obra va a reflejar autom¨¢ticamente lo que somos y en qui¨¦n creemos" y "no hay otra. Para cambiar las estructuras sociales es mejor un mitin que una obra de teatro".
Con su poder creativo gan¨® numerosos premios, como el Nacional de Literatura en 1996, pero uno constante es el reconocimiento de su arte en los escenarios en los cuales suben sus creaciones. En su herencia literaria quedan dos tomos de cuentos, nueve novelas, antolog¨ªas de teatro joven e infantil y Le Theatre Mexicane, unas cien obras teatrales, guiones para cine y televisi¨®n, am¨¦n de que tambi¨¦n fue director esc¨¦nico.
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