Balanzas fiscales, ?para qu¨¦?

Media Catalu?a, por no decir toda, tiene interiorizada la idea de que la comunidad aut¨®noma est¨¢ mal financiada porque tiene un d¨¦ficit fiscal excesivo. Es decir, que los catalanes aportan m¨¢s al Estado, en forma de impuestos, de lo que reciben de ¨¦ste a trav¨¦s de los servicios p¨²blicos. El clamor es un¨¢nime: ?que se publiquen las balanzas fiscales!, ?que se haga p¨²blico cu¨¢nto aportan los catalanes al conjunto de Espa?a y cu¨¢nto invierte el Gobierno en la comunidad!

CiU y ERC ya han advertido en esta campa?a de que sin la publicaci¨®n de las balanzas no apoyar¨¢n la investidura del pr¨®ximo presidente del Gobierno, y exigen que el nuevo modelo de financiaci¨®n se negocie a partir de las balanzas fiscales. Tal reivindicaci¨®n no es casual: el Gobierno que salga de las urnas el 9-M tendr¨¢ cinco meses justos para pactar el nuevo sistema, seg¨²n marca el Estatuto, y consideran que la mejor forma de demostrar que Catalu?a necesita m¨¢s dinero es conociendo su saldo fiscal, cuyo d¨¦ficit es de entre el 7% y el 9% del PIB catal¨¢n. CiU quiere que se reduzca 2,5 puntos y ERC que sea del 4%.

El d¨¦ficit fiscal baja si el Gobierno invierte m¨¢s, pero eso no da m¨¢s dinero

El ministro de Econom¨ªa, Pedro Solbes, lo rechaza. "Una cosa es la financiaci¨®n y otra las balanzas fiscales, no hay una relaci¨®n causa-efecto, aunque son, ciertamente, un instrumento ¨²til", sostiene.

El PSC est¨¢ de acuerdo en que se publiquen las balanzas, aunque m¨¢s por una cuesti¨®n de "transparencia" que para convertirlas en el elemento central de la negociaci¨®n.

Balanzas fiscales, ?para qu¨¦? ?Tienen que ver con la financiaci¨®n auton¨®mica? La mayor¨ªa de los expertos consultados creen que no. En primer lugar, aclaran que es "l¨®gico" que las autonom¨ªas m¨¢s ricas tengan d¨¦ficit fiscal y que las pobres tengan super¨¢vit. Con la excepci¨®n del Pa¨ªs Vasco y Navarra, que recaudan todos los impuestos y luego negocian lo que dan al Gobierno por los servicios que les presta (Defensa, Exteriores): el cupo.

En segundo lugar, explican que la balanza fiscal es un elemento m¨¢s de los flujos econ¨®micos entre territorios, pero no el ¨²nico. El saldo fiscal es "un elemento m¨¢s del debate, que se podr¨ªa reducir con una mayor inversi¨®n del Gobierno en la comunidad", coinciden los catedr¨¢ticos Guillem L¨®pez (Pompeu Fabra) y N¨²ria Bosch (UB).

Un ejemplo sirve para ver que no existe una conexi¨®n directa entre saldo fiscal y financiaci¨®n: si el Gobierno aumenta su inversi¨®n en Catalu?a, el d¨¦ficit fiscal disminuye, pero el sistema de financiaci¨®n sigue siendo el mismo; esto es, no puede dar respuesta a las mayores necesidades de gasto fruto del aumento de la poblaci¨®n. Es decir, la construcci¨®n de la T-Sur a cargo del Gobierno seguro que contribuye a reducir el d¨¦ficit fiscal de Catalu?a, pero no por ello la Generalitat tiene m¨¢s dinero para hospitales y escuelas o para subir las pensiones no contributivas.

"La fijaci¨®n de los recursos que necesitan las comunidades para ejercer sus competencias no es algo que tenga conexi¨®n evidente con la intensidad de los desequilibrios fiscales. Una cosa es cu¨¢nto pagan los ciudadanos de un territorio y qu¨¦ gasto hace el Gobierno central en ese territorio, que es lo que mide una balanza fiscal, y otra la financiaci¨®n de los servicios de titularidad auton¨®mica", aclara el catedr¨¢tico de Hacienda P¨²blica de la Universidad de Oviedo, Carlos Monasterio.

Ramon Tremosa, profesor de Teor¨ªa Econ¨®mica de la UB, es el ¨²nico que defiende la existencia de una relaci¨®n directa entre las balanzas fiscales y la financiaci¨®n. "Partiendo de que el objetivo es reducir la aportaci¨®n neta de Catalu?a al Estado, ?de qu¨¦ sirve un modelo de financiaci¨®n si no reduce el d¨¦ficit fiscal?", se pregunta. "Es como querer operar una rodilla y renunciar a la radiograf¨ªa". En opini¨®n de la mayor¨ªa de los expertos, sin embargo, el objetivo final debe ser conseguir un buen sistema de financiaci¨®n, no reducir el saldo fiscal. Una cosa lleva a la otra.

La distribuci¨®n personal de la renta es la que determina el resultado de las balanzas, puesto que son los ciudadanos los que trabajan y obtienen renta, pagan impuestos y utilizan los servicios p¨²blicos. "Los territorios no intervienen, no pagan", coinciden Monasterio y ?ngel de la Fuente, investigador del Instituto de An¨¢lisis Econ¨®mico del CSIC. Este economista ahonda en que la financiaci¨®n es un componente m¨¢s de la balanza fiscal, pero el grueso del saldo se debe a una redistribuci¨®n entre personas, no entre territorios. L¨®pez discrepa. "Estamos en un Estado auton¨®mico. Los ciudadanos son quienes pagan impuestos, pero en sistemas federales lo hacen en dos jurisdicciones".