La fraternal hija y el filial hermano

La hija es tambi¨¦n mi hermana exactamente,

Al igual que el hermano es tambi¨¦n mi hijo,

Y as¨ª tanto Mariella como Alfonso,

Que aquella es mi hija y aquel es mi hermano,

Ambos sobrepasando sin demora

Lo dispuesto por el destino ayer,

Que cambiaron los dos

Y por entero cada cual fue m¨¢s,

Tal como nunca ocurre en este mundo,

Superando los l¨ªmites

Previstos antes de venir aqu¨ª,

Que atr¨¢s quedaron por su voluntad,

E hija y hermano as¨ª centuplicados.

Y hoy que al m¨¢s all¨¢ se me fueron raudos,

Tal hecho c¨®mo lo sopeso a fondo:

He aqu¨ª pues un may¨²sculo vac¨ªo,

Lo cual ni pizca alguna sospech¨¦,

Ya que por duplicado, ?santos cielos!,

Resultan estos lazos familiares;

Y cuando ellos no est¨¢n

Sobre el suelo perc¨¢tome reci¨¦n

De la magnitud de las dos ausencias,

Pues uno y otro son

Como el agua que de la sed se aparta,

O el pan del hambre por igual ahora,

(Que yo sed y hambre, y ellos agua y pan).

Mi hija, mi hija adorada, ?d¨®nde est¨¢s?,

?Por qu¨¦ as¨ª de repente te me has ido,

Dej¨¢ndonos en tu terrena patria

Cu¨¢n sim¨¦tricamente en realidad,

D¨ªa a d¨ªa entre el alba y el ocaso,

Pero de llanto en llanto al infinito?

Tras tu partida entonces

Concluyo que el dolor ac¨¢ en la tierra

No deforme mas armoniosa cosa

Puede ser sorprendi¨¦ndonos,

Y todo as¨ª resulta porque te hallas

En tu "Casa m¨¢s Lejos" hoy en d¨ªa,

(Que cuando ni?a hablabas de tal modo).

No eres pez, no eres ave, no eres gamo,

Pero s¨ª inm¨®vil ¨¢rbol desde siempre,

Que semejante fuiste, hermano m¨ªo,

Sin nadar, sin volar, sin andar nunca,

Y en cambio pie y pie de tu cuerpo all¨ª

Por entre el humus del esquivo suelo,

Fijamente en tal punto

Hasta las cejas toda tu existencia,

Y a pesar de la uni¨®n tan entra?able

Del mundo fuiste ajeno,

Y m¨¢s all¨¢ de all¨ª ni una pulgada

Avanzaste en pos de tu sino humano,

Que por inm¨®vil no lo coronaste.

Por la magnitud del amor de ustedes,

Inesperadamente c¨®mo crecen

La escasa grey y el alma de uno ¨¢vida,

Mi fraterna hija, mi filial hermano,

Aunque no est¨¦n ahora ac¨¢ en la tierra,

H¨¢llome desde luego enriquecido

Con el recuerdo grande

De cada cual que adentro me lo llevo,

Hasta tener la idea como nunca

De hallarme juntamente

All¨¢, all¨¢, como ayer ac¨¢ felices

Todos nosotros entre cielo y suelo

Con ¨¢rbol, con cuadr¨²pedo, con piedra.

Carlos Germ¨¢n Belli (Lima, 1927) es autor de libros como El alternado paso de los hados (Pre-Textos) y Sextinas, villanela y baladas (Visor).