Las mujeres que abortaron con Mor¨ªn dicen que nadie las examin¨®

Primero ante la Guardia Civil y despu¨¦s en el Juzgado de Instrucci¨®n. Un n¨²mero indeterminado de mujeres que abortaron el a?o pasado en el grupo de cl¨ªnicas Ginemedex-TCB de Barcelona han declarado a la juez que investiga el caso que no fueron visitadas por ning¨²n psiquiatra antes de que les practicaran la interrupci¨®n del embarazo. Es m¨¢s, coinciden en que ni siquiera se les inform¨® de la necesidad de someterse a ning¨²n examen ps¨ªquico. Por eso mismo pensaron que estaban actuando de manera legal en una cl¨ªnica reconocida oficialmente.

Un juzgado de Barcelona tiene 11 imputadas por diversos delitos

La ofensiva judicial contra los centros ha derivado en su cierre definitivo

La juez de Barcelona que instruye el caso de las cl¨ªnicas abortivas confirma estos y otros datos -por ejemplo que la Guardia Civil requis¨® la totalidad de las 2.780 historias de las mujeres que abortaron el a?o pasado- en el auto por el que ayer levant¨® el secreto de sumario decretado el pasado 25 de octubre. "Las primeras mujeres" que declararon ante la Guardia Civil como imputadas, para salvaguardar sus derechos, corroboraron que "el aborto les era practicado sin m¨¢s requisito que su mera solicitud, sin que siquiera fueran sometidas al m¨¢s somero examen por parte de ninguno de los dos psiquiatras", explica.

Se trata de Francisco Javier C. V. y Pascual Javier R. M, ambos imputados en el Juzgado de Instrucci¨®n n¨²mero 33 de Barcelona junto a 11 personas m¨¢s por los presuntos delitos de aborto ilegal, asociaci¨®n il¨ªcita, falsedad documental e intrusismo. Entre ellos, el propietario de las cl¨ªnicas, Carlos Mor¨ªn, su esposa, Mar¨ªa Luisa Dur¨¢n, y Virtudes S. V., ambas enfermeras. Todos est¨¢n en libertad con cargos, excepto Pascual Javier R. M., que ten¨ªa pendiente de cumplimiento una sentencia firme por violencia dom¨¦stica.

Mor¨ªn, seg¨²n el relato de la juez, contrat¨® a los dos psiquiatras para que realizaran los informes para "dar cobertura y apariencia de legalidad a su actividad abortiva". De esta manera, prosigue, se estaba aparentando que los abortos de esas mujeres se encontraban en uno de los tres supuestos de despenalizaci¨®n que prev¨¦ la ley: el de grave peligro para la vida o la salud f¨ªsica o ps¨ªquica de la madre. Sin embargo, las mujeres que abortaron no se encontraban en ninguno de los supuestos legales, concluye la juez. Su identidad sigue estando bajo secreto. La magistrada Elisabet Castell¨® ha decidido preservar el anonimato al amparo de la Ley General de Sanidad y de la Ley de Protecci¨®n de Datos.

La causa judicial contra las cl¨ªnicas Ginemedex-TCB se inici¨® en 2006 y estuvo deambulando por varios juzgados. Hubo archivos, reaperturas... Hasta que finalmente fue a parar al Juzgado de Instrucci¨®n n¨²mero 33. La Fiscal¨ªa de Catalu?a, dirigida por Teresa Compte, de talante progresista, ha mostrado un gran rigor en la tramitaci¨®n de toda esta causa, hasta el punto de reclamar que todos los detenidos fuesen a prisi¨®n, aunque la juez s¨®lo lo acord¨® finalmente para cinco de ellos. Al final, la Audiencia de Barcelona orden¨® la excarcelaci¨®n de Carlos Mor¨ªn y las dos enfermeras por creerla desproporcionada y la propia juez ya dej¨® en libertad a los dos psiquiatras que hab¨ªa encarcelado.

Ahora la magistrada asegura que levanta el secreto tras "la toma de declaraci¨®n gradual" de las mujeres que ya interrog¨® la Guardia Civil, porque "todas ellas" coincidieron en declarar que no fueron visitadas por los psiquiatras. Advierte de que todav¨ªa queda una "ingente cantidad de historias pendientes de examinar" de ese total de 2.780 expedientes que se requisaron, aunque precisa que ya no tiene sentido mantener el secreto de sumario, a la vista, adem¨¢s, de un nuevo informe emitido por la Guardia Civil el pasado 25 de febrero.

Cuando los investigadores registraron las cl¨ªnicas encontraron una m¨¢quina trituradora a la que supuestamente hab¨ªan ido a parar fetos en muy avanzado estado de desarrollo, seg¨²n explicaron. Pero se ignora si ¨¦ste y otros detalles constan en alg¨²n informe policial, porque hasta la fecha exist¨ªa el secreto de sumario. A partir del pr¨®ximo lunes, cuando los abogados querellantes y de las defensas tengan la copia de las investigaciones, se podr¨¢n esclarecer algunas cuestiones del caso.

Lo que resulta indiscutible es que las cl¨ªnicas abortistas del doctor Mor¨ªn en Barcelona han acabado cerrando y que sus 20 trabajadores han solicitado expediente de regulaci¨®n de empleo para rescindir sus contratos y ser indemnizados. Eso est¨¢ provocando una verdadera espantada en las mujeres que desean abortar, que ahora han de plantearse acudir de nuevo a Par¨ªs, ante la imposibilidad de que la Seguridad Social las atienda y a la vista de la ofensiva de algunos sectores integristas y del benepl¨¢cito de determinadas actuaciones judiciales.