Una jornada de 20 horas

Miles de despertadores suenan sobre las siete de la ma?ana. El de Samuel no. Es uno de los 1,7 millones de j¨®venes que pueden votar en unas generales por primera vez. Tiene intenci¨®n de hacerlo a mediod¨ªa. Pero para que ¨¦l y los 35 millones de espa?oles convocados a las urnas ejerzan su derecho hay muchos madrugones. Conserjes, polic¨ªas, funcionarios de correos, miembros de mesa, interventores, apoderados preparan la jornada desde temprano. Son las siete. A dos horas para abrir los colegios, la jornada electoral ya ha empezado para la mayor¨ªa de ellos.

Los bedeles de los 23.106 colegios electorales tienen que abrir las puertas m¨¢s o menos al mismo tiempo que llegan al menos dos polic¨ªas por cada centro. Poco despu¨¦s, a las 8.00, presidentes y vocales de mesa deber¨¢n comenzar los pre¨¢mbulos para abrirlas a los ciudadanos. Durante una hora comprobar¨¢n las urnas, las papeletas, los censos, los documentos que manejar¨¢n durante el d¨ªa y esperar¨¢n a que un cartero les entregue los votos por correo. 8.200 repartir¨¢n a primera hora los 700.000 que tienen en custodia. Todo este proceso y los del resto del d¨ªa estar¨¢n supervisados por los interventores de los partidos pol¨ªticos; hasta dos por candidatura y mesa.

Por primera vez se podr¨¢ recibir el resultado en el tel¨¦fono m¨®vil

"Comienza la votaci¨®n". Son las palabras que tiene que pronunciar el presidente de la mesa a las 9.00. Lo sabe gracias a un manual que reciben todos los que han sido seleccionados para las mesas tras un sorteo. Ah¨ª est¨¢ recogido lo que deben hacer paso a paso, explicado con total exhaustividad. Y ante la duda, llamada a la Junta Electoral de zona. Hay 303 en toda Espa?a, que llevan semanas controlando el proceso, analizando las quejas, reclamaciones de censos, peticiones de m¨ªtines. Hoy estar¨¢n tambi¨¦n al pie del ca?¨®n.

Samuel todav¨ªa no se habr¨¢ despertado cuando toda la maquinaria est¨¦ en marcha. Un anuncio del PSOE muestra a una joven que, como ¨¦l, vota por primera vez. Est¨¢ "nerviosa e impaciente". Samuel no dice tanto. Pero s¨ª que asegura tener ganas de votar.

Cuando llegue al colegio, encontrar¨¢ a dos polic¨ªas en la puerta. Llevar¨¢n all¨ª desde temprano y, si todo sale bien, sin mucho m¨¢s trabajo que el de una vigilancia tranquila. Una agente que ha participado en varios procesos electorales explica que suelen ser d¨ªas "apacibles pero muy importantes". "Cuando hay alg¨²n incidente te reclaman e intervienes, pero no es lo normal", cuenta. M¨¢s de 87.000 agentes de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado vigilar¨¢n las votaciones junto a 2.500 militares que participan desde el lunes en un plan de protecci¨®n antiterrorista.

Seguramente, al mediod¨ªa Samuel ya habr¨¢ votado. Habr¨¢ finalizado lo que considera su "deber". Pero los de los madrugones siguen trabajando. Ana Garc¨ªa, que fue presidenta de mesa en las ¨²ltimas generales, explica que es "muy pesado". "Yo tuve suerte porque hab¨ªa buen rollo con los compa?eros y cada uno fuimos a casa una hora y media para comer tranquilamente". El resto del d¨ªa es mon¨®tono: mostrar documentaci¨®n, se?alar que tal persona ha votado en el censo electoral, decir el nombre de esa persona en voz alta y acompa?arlo de la muletilla "vot¨®".

Eso es as¨ª hasta las 20.00. A esa hora, el presidente, guiado una vez m¨¢s por el manual, debe decir: "Concluye la votaci¨®n". Comienza el recuento. "La parte m¨¢s engorrosa", seg¨²n opinan varios interventores y miembros de mesa consultados. El n¨²mero de votos en las urnas debe ser igual al de gente que ha votado. Parece obvio, pero no siempre sucede y hay que hacer sucesivos recuentos, "incluso alguna trampa", confiesan estas fuentes.

Primero, las del Congreso, despu¨¦s las del Senado y por ¨²ltimo las de las auton¨®micas (s¨®lo en Andaluc¨ªa, donde hay 6,2 millones de electores). El Gobierno anunci¨® ayer que los resultados se conocer¨¢n poco despu¨¦s del cierre de los colegios. Por primera vez se podr¨¢n recibir en el tel¨¦fono m¨®vil. Hay que mandar al n¨²mero 7743 el mensaje ELEC CON (para solicitar datos del Congreso) o ELEC SEN (los del Senado). Tambi¨¦n se podr¨¢n consultar en la p¨¢gina web del Ministerio del Interior (www.mir.es).

Los miembros de las mesas deben firmar las actas, llevar una copia a los juzgados de primera instancia y dar otra a uno de los 12.000 carteros que acudir¨¢n por la noche a los colegios y que la llevar¨¢n al d¨ªa siguiente a las juntas electorales. Lo normal es terminar a medianoche, pero si el d¨ªa se ha complicado, los miembros de la mesa llegan a finalizar m¨¢s all¨¢ de las dos de la madrugada, 20 horas despu¨¦s de que sonasen los despertadores.