"El autor utiliza la animaci¨®n para librarse de sus propios fantasmas"

Vivir de la animaci¨®n experimental resulta muy dif¨ªcil, m¨¢s bien imposible. As¨ª que Isabel Herguera (San Sebasti¨¢n, 1961) reparte su tiempo entre la realizaci¨®n de sus propios cortometrajes, la direcci¨®n de la Muestra de Cine de Animaci¨®n de Catalu?a Animac y los talleres que imparte. "Tienes que estar siempre haciendo acrobacias entre el tiempo que necesitas para hacer la animaci¨®n, que es much¨ªsimo, y el que precisas para ganarte las lentejas", subraya. Esta semana ha presentado en el centro donostiarra de arte y cultura contempor¨¢nea Arteleku una selecci¨®n de los trabajos proyectados en la muestra de Lleida.

Pregunta. Est¨¢ trabajando en un nuevo cortometraje. ?Sobre qu¨¦ trata? ?Tiene ya t¨ªtulo?

"En Euskadi nos hemos nutrido de Sistiaga o Ruiz Balerdi"

"En general, se nos dan muchas posibilidades para producir"

Respuesta. Todav¨ªa no tengo un t¨ªtulo. Gira en torno a una mujer que va a visitar a un amigo que se encuentra en un sanatorio mental. Descriptivamente es eso, pero despu¨¦s ya veremos que sale... Espero terminarlo este a?o.

P. El pa¨ªs invitado este a?o en Animac ha sido Jap¨®n, una referencia en la animaci¨®n comercial e independiente. ?Se puede hablar tambi¨¦n de una animaci¨®n experimental europea?

R. S¨ª, y los japoneses te lo hacen notar cuando vienen. Definen una animaci¨®n, una forma de contar, si no europea, s¨ª occidental.

P. ?Qu¨¦ diferencia hay entre la forma de contar occidental y la oriental?

R. En Oriente, y en concreto en la animaci¨®n japonesa, la interpretaci¨®n est¨¢ basada m¨¢s en sensaciones que en la l¨®gica o en una narrativa lineal. En Occidente, a pesar de que hay mucha experimentaci¨®n, tendemos a utilizar una forma m¨¢s ortodoxa de introducci¨®n, nudo y desenlace, m¨¢s o menos.

P. A¨²n as¨ª, la animaci¨®n independiente est¨¢ en general muy ligada a las emociones.

R. S¨ª. Por la estructura de producci¨®n que tiene est¨¢ directamente ligada al autor. No hay nada entre el autor y el papel. Est¨¢ totalmente ligada a la intimidad del creador. Por tanto, el autor la utiliza para librarse de sus propios fantasmas, en muchos casos siguiendo m¨¢s o menos un gui¨®n y en otros, qu¨¦ s¨¦ yo, una estructura musical. Pero siempre a partir de ese filtro de su mundo interior, que a veces es legible y otras no.

P. ?Qu¨¦ lugar ocupa Espa?a en la animaci¨®n experimental en Occidente?

R. Creo que no se puede hablar de una forma de hacer com¨²n, sino que existen individualidades. En Valencia, por ejemplo, hay una escuela muy desarrollada de plastilina debido a que Paco Llorens comenz¨® hace 20 a?os y ha sido un referente. Aqu¨ª, en Euskadi, consciente o inconscientemente, nos hemos nutrido de artistas que experimentaron en el cine en los a?os setenta, como [Jos¨¦ Antonio] Sistiaga y [Rafael] Ruiz Balerdi.

P. ?Las ayudas p¨²blicas resultan suficientes?

R. En el Pa¨ªs Vasco, y en Espa?a en general, se nos dan muchas posibilidades para producir. No nos subvencionan al cien por cien, pero podemos hacer cosas. Tenemos que tener un trabajo, pero, al menos, el coste de la producci¨®n est¨¢ cubierto. Las instituciones se medio portan.