Sarkozy hunde a la derecha
La impopularidad del presidente franc¨¦s pasa factura a la UMP en las municipales - Los socialistas ganan Toulouse y Estrasburgo y los conservadores mantienen Marsella
La izquierda francesa sali¨® ayer ampliamente vencedora de la segunda vuelta de las elecciones municipales francesas. La impopularidad del presidente Nicolas Sarkozy contribuy¨® a esta revancha. El Partido Socialista (PS) recuper¨® 30 de las 40 ciudades de m¨¢s de 30.000 habitantes que perdi¨® en 2001, entre las que figuran Toulouse y Estrasburgo, pero no consigui¨® hacerse con el premio gordo: Marsella. Por muy poco, el gran puerto mediterr¨¢neo seguir¨¢ en poder del actual alcalde conservador Jean-Claude Gaudin. A¨²n m¨¢s ajustada ha sido la derrota del l¨ªder centrista Fran?ois Bayrou, que perdi¨® en Pau frente a la candidata socialista Martine Ligni¨¨res-Cassou por menos de 200 votos.
El centrista Bayrou pierde en Pau por 200 votos frente a la candidata socialista
En el c¨®mputo global, el PS y sus aliados obtendr¨ªan un 49,5% de los votos frente a 47,5% para la derecha, seg¨²n la encuesta de CSA. M¨¢s revelador es el resultado de las elecciones cantonales, en las que el PS obtendr¨ªa un 51% frente al 44% de la Uni¨®n por un Movimiento Popular (UMP). A diferencia de las municipales, donde prima la personalidad del alcalde o el cabeza de lista, en las cantonales se impone la pertenencia partidista, lo que da un retrato m¨¢s preciso de la tendencia general.
La abstenci¨®n, que se situ¨® en torno al 35%, fue uno de los elementos m¨¢s determinantes de la jornada y el argumento que anoche repet¨ªan los pol¨ªticos de la derecha gubernamental para quitarle hierro a la victoria de la izquierda.
Lyon ya estaba en el zurr¨®n de la izquierda desde la primera vuelta, como Burdeos en el de la derecha. Pero ayer Toulouse, Estrasburgo, Caen, P¨¦rigueux, Reims, Amiens, Metz, Saint-Etienne y Angers cayeron por amplia diferencia en manos socialistas. Martine Aubry se mantuvo en Lille con un triunfo holgado. Y como se esperaba, Bertrand Delano? conserv¨® Par¨ªs con un resultado espectacular, 57,7% de los votos, aunque no consigui¨® desplazar a la derecha del distrito V, donde el ex alcalde Jean Tiberi resisti¨® por los pelos, ni del VII, que se qued¨® en manos de la ministra de Justicia, Rachida Dati.
Entre los damnificados, adem¨¢s de Bayrou, se encuentra el ministro de Educaci¨®n Xavier Darcos, cuyo nombre sonaba incluso como futuro primer ministro, pero perdi¨® la alcald¨ªa de P¨¦rigueux. Tambi¨¦n cay¨® su predecesor en este ministerio, Gilles de Robien, en Amiens. En la localidad alsaciana de Mulhouse, el alcalde Jean Marie Bockel, uno de los socialistas que acept¨® entrar en el Gobierno conservador pese al negativo efecto Sarkozy, se perfilaba como ganador por un margen muy escaso.
Desde las filas gubernamentales, la consigna entre quienes anoche se paseaban por la ronda de las televisiones era minimizar el impacto pol¨ªtico de estos comicios y hacer hincapi¨¦ en la escasa participaci¨®n. El primer ministro Fran?ois Fillon matizaba: "En 2001 ganamos muchas ciudades, hoy la izquierda ha restablecido parcialmente la situaci¨®n, pero no hay que sacar conclusiones nacionales de este escrutinio; la escasa participaci¨®n no permite extrapolar", dijo. S¨¦gol¨¨ne Royal fue la primera en pronunciarse desde las filas socialistas y reivindicar "el triunfo de la izquierda". Insisti¨® en que se trata de "un voto de sanci¨®n" a un Gobierno "estropeado", incapaz de asegurar el nivel de vida de los franceses. "Tenemos que transformar este voto de sanci¨®n en voto de futuro, y acabar con el desorden de la gesti¨®n del Gobierno".
Fran?ois Hollande, el aut¨¦ntico vencedor de estas elecciones en su condici¨®n de primer secretario del PS, arremeti¨® contra la pol¨ªtica gubernamental y se?al¨® que con su voto los franceses han mandado un mensaje al Gobierno. "El presidente asegur¨® que escuchar¨ªa el mensaje. Tiene que corregir la pol¨ªtica que ha hecho, empezando por no haber sabido aumentar el poder adquisitivo de los franceses", dijo.
Bayrou, que hab¨ªa conseguido protagonizar esta segunda vuelta pactando a derecha e izquierda con los votos del MoDem, se apresur¨® a justificar su derrota acusando al tercer candidato, Yves Urieta, el ex socialista que se presentaba en las filas gubernamentales, de haber falseado los comicios con su presencia en la segunda vuelta. "Habr¨¢ otros combates, habr¨¢ otras batallas y habr¨¢ otras victorias", dijo a sus seguidores.
Al margen de su propia derrota, la estrategia del l¨ªder centrista Bayrou ha tenido un cierto ¨¦xito. Con una presencia en las grandes ciudades de entre el 6% y el 7% en la primera vuelta, gracias a los pactos, ha conseguido disponer de una base de cargos electos con los que construir las bases para que el MoDem sea un partido real.
La importante abstenci¨®n, que probablemente afect¨® m¨¢s a los candidatos de la UMP que a los de la izquierda, muestra, por un lado, el cansancio de los franceses tras un a?o 2006 intenso en el que la participaci¨®n en las presidenciales y legislativas roz¨® un r¨¦cord hist¨®rico de m¨¢s del 85%. Muestra tambi¨¦n que tan s¨®lo una parte del voto popular que se llev¨® Sarkozy el a?o pasado ha vuelto a la izquierda. El resto ha optado por quedarse en casa para sancionar al presidente sin beneficiar a la izquierda.
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