Detenciones masivas en el T¨ªbet
Los disidentes denuncian que los militares buscan a los manifestantes casa por casa
El Gobierno tibetano en el exilio asegur¨® ayer que las autoridades chinas han lanzado una campa?a de detenciones masivas en Lhasa para localizar a los sospechosos de haber participado en las violentas protestas que tuvieron lugar el viernes pasado en la capital tibetana, y que dejaron m¨¢s de 80 muertos, seg¨²n los seguidores del Dalai Lama, l¨ªder espiritual de los tibetanos, y 16, seg¨²n Pek¨ªn. Los disidentes afirman que las fuerzas armadas han ido casa por casa en su busca, y han arrestado tambi¨¦n a todos los "antiguos prisioneros pol¨ªticos".
Qiangba Puncog, gobernador de la regi¨®n aut¨®noma china, esgrimi¨® la habitual estrategia china del palo y la zanahoria. Prometi¨® clemencia para quienes se entreguen a la polic¨ªa, mano dura para quienes no lo hagan y recompensas para los delatores. "Si estas personas se entregan por voluntad propia, ser¨¢n tratadas con indulgencia en el marco de la ley. Y si proporcionan informaci¨®n adicional sobre otros participantes en estos cr¨ªmenes, recibir¨¢n a¨²n m¨¢s clemencia", afirm¨® en Pek¨ªn. De lo contrario, "ser¨¢n tratados con extrema dureza".
El gobernador del T¨ªbet asegur¨® que los manifestantes actuaron de forma "brutal". Dijo que rociaron con gasolina a una persona y la quemaron viva, y que a un polic¨ªa "le cortaron con un cuchillo un trozo de carne del gl¨²teo del tama?o de un pu?o".
El centro de Lhasa segu¨ªa ayer sellado, y tanquetas y cientos de soldados patrullaban la ciudad, que, sin embargo, comenzaba a retomar la actividad. Algunos comercios volvieron a abrir las puertas y la gente a ir al trabajo, seg¨²n relataron algunos residentes. Sin embargo, los turistas extranjeros segu¨ªan dejando el T¨ªbet, donde los principales monasterios de la capital contin¨²an cerrados y han sido suspendidos los recorridos de monta?a. Quienes no se han ido permanecen recluidos en los hoteles por orden de la polic¨ªa. Las autoridades han cancelado la concesi¨®n de visados para visitar el territorio del Himalaya.
Cientos de tibetanos fueron arrestados durante el fin de semana, especialmente hombres j¨®venes, seg¨²n la organizaci¨®n no gubernamental Tibetan Centre for Human Rights and Democracy, con sede en Dharamsala, hogar del Dalai Lama y sede del Gobierno tibetano en el exilio. Muchos de ellos fueron golpeados cuando eran detenidos, seg¨²n la ONG.
"La polic¨ªa debe de tener im¨¢genes grabadas de mucha gente que particip¨® en la revuelta, y est¨¢ efectuando registros y detenciones", cuenta por tel¨¦fono un residente extranjero, que conoce bien la ciudad y solicita el anonimato. "Y continuar¨¢ en la misma t¨®nica seguramente los pr¨®ximos d¨ªas", a?ade. Ayer a medianoche expir¨® el ultim¨¢tum dado por las autoridades para que se entregasen quienes participaron en los disturbios.
Puncog, que elev¨® de 10 a 16 la cifra oficial de fallecidos dada el d¨ªa anterior, insisti¨® en que las fuerzas armadas que reprimieron la revuelta "no llevaban ni utilizaron armas letales". "Puedo asegurar que no se emplearon armas de fuego", dijo. Su afirmaci¨®n contradice las declaraciones de testigos chinos y occidentales, que aseguran que vieron y oyeron disparos el viernes y el fin de semana.
Pek¨ªn est¨¢ seriamente preocupado por las consecuencias que la crisis pueda tener sobre los Juegos Ol¨ªmpicos, el pr¨®ximo agosto. Algunos deportistas han comenzado a plantearse la posibilidad de un boicoteo, seg¨²n ha reconocido Thomas Bach, vicepresidente del Comit¨¦ Ol¨ªmpico Internacional.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.