Al Museo Whitney le llueven millones
El dinero no lo es todo. Pero para las instituciones culturales estadounidenses, sin dinero privado no se sobrevive. De ah¨ª que la noticia de que el magnate de la cosm¨¦tica Leonard A. Lauder, hijo de Est¨¦e Lauder, haya decidido donarle al Museo Whitney de Nueva York 83 millones de euros ha sido recibida con un aplauso generalizado. Es la mayor cantidad jam¨¢s recibida por el Whitney y una de las mayores obtenidas por un museo estadounidense.
Eso s¨ª, nada es gratis. Lauder exige a cambio que el Whitney no abandone el edificio en la Avenida Madison. La construcci¨®n, ideada por el arquitecto Marcel Brauer, es una joya de la arquitectura modernista que Lauder aspira a preservar. "Como muchos amantes de la arquitectura, creo que el edificio y el Whitney son un todo", declar¨® en un comunicado.
La fortuna del inventor del llamado ¨ªndice del pintalabios, que dice que en tiempos de crisis las mujeres se arreglan m¨¢s, asciende a 2.000 millones de euros, seg¨²n la revista Forbes.
El peque?o museo neoyorquino trata de emular a la Neue Gallery de Viena, un espacio nacido en plena d¨¦cada de los veinte donde se mostr¨® el arte austriaco y alem¨¢n m¨¢s innovador de aquella ¨¦poca. Sus fondos provienen de la colecci¨®n personal de Lauder.
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