La "esperanza decepcionada"

Hace dos meses, Josep Benet escribi¨® como colof¨®n al pr¨®logo de sus memorias, que esta semana se ponen a la venta, una pesimista visi¨®n del momento hist¨®rico que vive Catalu?a y las perspectivas que, a su juicio, se le abren. Dice as¨ª:

"Termino la redacci¨®n de este pr¨®logo cuando estoy a punto de cumplir 88 a?os. De ¨¦stos, unos 40, pr¨¢cticamente la mitad, he tenido que vivirlos bajo reg¨ªmenes espa?oles que han perseguido la identidad nacional de mi patria, con el prop¨®sito de convertirla en una regi¨®n subordinada a la nacionalidad mayoritaria en el Estado espa?ol, que tiene la capital en Madrid. Una cuarentena de a?os en los que he debido dedicar esfuerzos y sacrificios para gozar de lo m¨¢s elemental -lengua propia e identidad nacional propia- que los otros pueblos tienen sin que nadie se lo discuta. Al desaparecer el franquismo, con la transici¨®n a la democracia, pareci¨® que la situaci¨®n cambiar¨ªa y que ser¨ªa posible que las diferentes naciones que componen el Estado espa?ol viviesen pac¨ªficamente, respet¨¢ndose sus identidades y hablas. Han transcurrido treinta a?os, y esta esperanza est¨¢ siendo decepcionada. Vuelven los ataques brutales contra Catalu?a, su identidad nacional, su idioma y su econom¨ªa. Vuelve a sembrarse el odio contra Catalu?a. En muchos momentos me parece leer y o¨ªr textos anticatalanes de ayer, de los tiempos de Franco y de m¨¢s atr¨¢s. No nos enga?emos, la ofensiva actual tiene un objetivo claro: aprovechar la globalizaci¨®n para aniquilar la naci¨®n catalana en un plazo relativamente breve. advertir del peligro de muerte que asedia a la naci¨®n catalana".