Leones espa?oles y ovejas inglesas
"Les dije a los jugadores que me gust¨® c¨®mo jugaron".
- Fabio Capello, tras perder Inglaterra, que no tir¨® ni una vez a porter¨ªa, contra Francia.
La vida est¨¢ llena de impenetrables enigmas. ?Qu¨¦ acab¨® con los dinosaurios? ?Por qu¨¦ desapareci¨® la cultura maya? ?C¨®mo se entiende que los estadounidenses pusieran a George W. Bush en la Casa Blanca dos veces?
Pero hay un misterio m¨¢s grande todav¨ªa. ?Por qu¨¦ la selecci¨®n espa?ola de f¨²tbol siempre ha sido un desastre? Lo maravilloso es que quiz¨¢ hoy, por fin, hayamos dado con la soluci¨®n. Mientras la Liga espa?ola era fuerte, mientras se sab¨ªa que era igual de importante o m¨¢s que cualquier otra, los jugadores invert¨ªan la casi totalidad de su energ¨ªa, compromiso y hambre en sus clubes. La selecci¨®n era algo secundario, un postre que uno picaba con la barriga llena.
Al contrario que en Espa?a, la selecci¨®n de Inglaterra es mediocre y su Liga es la m¨¢s potente del mundo
Pero, de repente, la selecci¨®n espa?ola pinta muy bien. De repente, tras ganar de manera convincente a Italia, Francia, Inglaterra y Argentina en amistosos, se puede uno plantear con m¨¢s seriedad que nunca la posibilidad de que Espa?a gane la Eurocopa. Como m¨ªnimo, podemos decir que la selecci¨®n actual est¨¢ ilusionando a la afici¨®n, lo cual en Espa?a es mucho decir. Y eso se debe a que a los jugadores se les ve motivados, como si realmente desearan triunfar.
La conclusi¨®n es inevitable. La selecci¨®n juega bien, con ganas, y la afici¨®n la apoya con entusiasmo porque la Liga espa?ola actual es la peor en mucho tiempo. Ser aficionado del Madrid o del Bar?a no tiene ninguna gracia esta temporada; ser jugador, si vemos la ap¨¢tica irregularidad con la que se despliegan en el campo, parece que tampoco. Mejor ser¨ªa declarar esta Liga terminada ya, por falta de inter¨¦s, y dar a Luis Aragon¨¦s v¨ªa libre para que se dedique los pr¨®ximos dos meses a preparar la selecci¨®n.
Prueba de que la teor¨ªa es v¨¢lida -aparte del interesante hecho de que Fernando Torres y Cesc F¨¤bregas juegan apreciablemente mejor en la Premier que para la selecci¨®n- la vemos, pero a la inversa, en Inglaterra, cuya selecci¨®n es horriblemente mediocre y cuya Liga es hoy la m¨¢s potente del mundo. Si los presidentes de los clubes espa?oles no est¨¢n preocupados por la brecha que se est¨¢ abriendo entre la Premier y la Primera espa?ola, tanto en lo econ¨®mico como en la calidad del juego, es que no han entendido nada. Cuando le preguntaron al presidente John Kennedy una vez qu¨¦ era lo que le atra¨ªa de la Casa Blanca, contest¨®, "that's where the action is" ("ah¨ª es donde est¨¢ la acci¨®n"). Lo mismo podemos decir hoy de la Premier. Contrastar la salvaje desesperaci¨®n por ganar que se vio en el partido entre el Chelsea-Arsenal del fin de semana pasado con lo que se vio en el Bernab¨¦u entre el Madrid y el Valencia es comparar leones con ovejas.
Exactamente lo mismo podemos decir de la selecci¨®n espa?ola y la inglesa en los partidos que disputaron el mi¨¦rcoles contra Italia y Francia. S¨®lo que esta vez las ovejas eran los ingleses, que tuvieron enorme suerte al perder ¨²nicamente por 1-0 contra un equipo franc¨¦s netamente superior y en el que jugaban cuatro jugadores del Chelsea, dos de ellos (Anelka y Malouda) suplentes contra el Arsenal la semana pasada.
Fabio Capello, el flamante seleccionador ingl¨¦s, ya est¨¢ empezando a recibir duras cr¨ªticas. Se supon¨ªa que el italiano iba a transferir a Inglaterra la magia con la que gan¨® la Liga con el Madrid. Lo que no sab¨ªan cuando le contrataron por un sueldo de un mill¨®n de euros por partido era que no hubo mucha magia en ese Madrid ni tanto m¨¦rito en ganar una Liga venida a menos.
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