Rajoy cree que su rival va de farol

Uno de los grandes protagonistas de la jugada de Aguirre, seg¨²n la versi¨®n m¨¢s extendida en las primeras horas, no estaba all¨ª cuando ella lanz¨® su ¨®rdago. Es Alberto Ruiz-Gallard¨®n, el alcalde de Madrid, su gran rival. A esa misma hora, mientras Rajoy s¨ª suspendi¨® su agenda para estar all¨ª, el alcalde com¨ªa con el director de El Mundo, seg¨²n se encargaron de difundir r¨¢pidamente sus enemigos. Tambi¨¦n Manuel Pizarro o Eduardo Zaplana estaban entre las ausencias.

La figura de Gallard¨®n es clave para entender la decisi¨®n de Aguirre de amagar con presentarse y dejar claro que existe esa posibilidad. Tanto en el entorno de la presidenta como en el de Rajoy coinciden en interpretar lo de ayer tambi¨¦n como un aviso, por si acaso el l¨ªder est¨¢ plante¨¢ndose en serio la posibilidad de nombrar a Gallard¨®n secretario general o alguna manera auparle como posible sucesor si dentro de un a?o las cosas no van bien.

Aguirre no descarta en absoluto la posibilidad de que Mariano Rajoy suba a los altares a Gallard¨®n. Todas las alarmas del cuartel general de los aguirristas sonaron cuando el director de La Raz¨®n, Francisco Marhuenda, que fue jefe de gabinete de Rajoy durante seis a?os y es un hombre de su confianza, lanz¨® esta especulaci¨®n.

Una de las interpretaciones compartidas ayer por varios dirigentes era ¨¦sa: Aguirre est¨¢ lanzando un aviso: si Gallard¨®n est¨¢ en el equipo del triunfo de Rajoy, la guerra es segura.

El entorno de Rajoy est¨¢ absolutamente convencido de que la sangre no llegar¨¢ al r¨ªo, porque Aguirre sabe que no cuenta con apoyos suficientes para luchar contra el aparato del partido. Esto es, que va de farol. "Yo creo que al final s¨®lo habr¨¢ una candidatura. Lo que pasa es que hay mucha gente a la que le gusta enredar, y con esto ella ha logrado estar en todas las portadas hasta el congreso. Pero luego no pasar¨¢ nada", sentencia una persona de la absoluta confianza del l¨ªder.

El entorno de Rajoy se empe?aba ayer en recordar que, en realidad, Aguirre se ha quedado en el mismo sitio que en la comida en el lujoso Zalacain, el pasado mi¨¦rcoles: amagar y no dar. Otros muchos dirigentes consultados creen que est¨¢ "marcando territorio para negociar con Rajoy con sus poderes encima de la mesa, sabiendo que est¨¢ dispuesta a llegar muy lejos".

Pr¨¢cticamente nadie cre¨ªa que ella est¨¦ realmente pensando, al menos en este momento, en dar el salto. Pero s¨ª podr¨ªa cambiar de opini¨®n, se?alan algunos veteranos, si despu¨¦s de este arriesgado movimiento comienza a recibir llamadas de algunos barones que hasta ahora no se atrev¨ªan y a los que ayer, de alguna manera, ella estaba animando.

Aguirre necesita 600 compromisarios para presentar su candidatura y m¨¢s de 1.500 para ganar. Directamente cuenta s¨®lo con 208, los que corresponden a Madrid, aunque podr¨ªa agrupar a todos los enfadados con Rajoy. "Ahora no le dan los n¨²meros y no quiere ser la que rompa la unidad. Pero si Rajoy no presenta pronto su proyecto ella ser¨¢ su peor pesadilla", resume un miembro de la direcci¨®n.