Torrevieja, espejo de la crisis
El frenazo en el sector de la construcci¨®n dispara el paro y decenas de inmobiliarias y comercios bajan la persiana
"Estamos comiendo de las rentas de atr¨¢s, lo hemos construido todo y ya est¨¢ todo hecho", admiten resignados los alba?iles Jos¨¦ Luis, de 43 a?os, y Secundino, de 42, mientras hacen cola durante horas en la oficina del servicio valenciano de empleo (Servef) de Torrevieja. Como ellos, otras 5.000 personas engrosan las listas del desempleo en esta localidad tur¨ªstica con una gran dependencia de la construcci¨®n. Las inmobiliarias no venden nada desde enero, los promotores responsabilizan a los bancos por su rigidez a la hora de dar pr¨¦stamos y los comercios locales est¨¢n asfixiados por los elevados alquileres, la reducci¨®n de las ventas (entre un 10% y 15%) y la presi¨®n de las grandes superficies. Decenas de locales vac¨ªos
El sindicato CC OO calcula que la tasa de paro ronda entre el 14% y el 19% El reguero de personas buscando empleo en la oficina es constante
con letreros de se vende o alquila confirman la dimensi¨®n de la crisis del ladrillo que acaba de empezar.
Cada ma?ana, decenas de personas acuden a buscar trabajo. Algunos aguardan desde las cuatro de la madrugada para poder coger turno. Jos¨¦ Luis y Secundino son manchegos, pero para "cambiar de aires" hace siete a?os se fueron a Pamplona, y ese mismo verano fueron de vacaciones a Torrevieja. "Aqu¨ª hab¨ªa mucho trabajo, por eso nos quedamos", recuerdan. Durante seis a?os no pararon de construir, formaron su propia cuadrilla, llegaron a tener m¨¢s de 40 personas a su cargo, pero ahora llevan dos meses en el paro. Su caso no es aislado. Junto a ellos, Francisco Acosta, ecuatoriano de 32 a?os, lleva desde las seis y media de la ma?ana esperando su turno para renovar la cartilla del desempleo. Durante seis a?os ha estado trabajando de pintor en la comarca de la Vega Baja, pero hace un mes y medio se qued¨® en la calle. "Ahora se acaba una obra y como no hay m¨¢s, todos al paro", resume.
El desempleo no atiende a razones ni de edad, ni de nacionalidad. Asiero Fern¨¢ndez, de 18 a?os, es jardinero y lleva tres meses buscando trabajo. Fair Iunis, de 23 a?os, repart¨ªa en una furgoneta material el¨¦ctrico para obras; antes fue carpintero y soldador. "?ramos dos repartidores, pero como no hay trabajo se han quedado con uno y yo, que fui el ¨²ltimo en llegar, estoy en la calle", admite este joven, que medita muy seriamente irse a trabajar "de lo que sea" al extranjero, quiz¨¢ al Reino Unido.
Luis Mario Baute, ecuatoriano de 37 a?os, lleva nueve a?os cotizando a la Seguridad Social. Jam¨¢s le falt¨® el trabajo; su especialidad, hierros y ferrallas. "Adem¨¢s, tengo carn¨¦ de gr¨²a de torre", explica orgulloso. Pero ¨¦l, al igual que sus 35 compa?eros de obra, se qued¨® sin trabajo el mes pasado. Este ambiente se vive en las puertas del Serfev de Torrevieja.En la Agencia de Desarrollo Local de Torrevieja, un reguero de desempleados, principalmente inmigrantes, acude a diario en busca de una nueva oportunidad. Mois¨¦s Fern¨¢ndez, de 22 a?os, es uno de ellos. Tiene dos ni?os peque?os, de uno y dos a?os, trabaj¨® seis meses para la empresa Necso, encargada del servicio de limpieza municipal de la localidad, y ahora lleva un a?o buscando un empleo para poder pagar la hipoteca de 700 euros al mes. "Encontrar un trabajo aqu¨ª es como si te toca la loter¨ªa, sobrevivo porque mi madre me ayuda", confiesa desesperado.
La crisis del ladrillo se palpa en la calle. El boom de la construcci¨®n pas¨®. Torrevieja por primera vez rebasa los 5.000 desempleados, seg¨²n los datos del Servef del ¨²ltimo mes de marzo. En el a?o 2005 solo hab¨ªa 1.700 parados, en 2006 se alcanzaron los 3.598, y el a?o pasado se lleg¨® hasta los 4.454. El sector de la construcci¨®n, con 1.164 demandantes de empleo, y el de servicios, con 3.266, aglutinan la mayor parte de desempleados en Torrevieja. No existen estad¨ªsticas recientes sobre qu¨¦ porcentaje representa este n¨²mero de desempleados en relaci¨®n con la poblaci¨®n activa total. Sin embargo, datos referentes al a?o 2003 sobre los trabajadores dados de alta laboral en Torrevieja indican que alcanzaban los 17.086 (de los que 4.039 eran aut¨®nomos). El sindicato CC OO calcula que la tasa de paro ronda entre el 14% y 19%. El Ayuntamiento evita dar cifras y opta por recordar que el municipio ronda los 95.000 ciudadanos censados, de los que un 53% son extranjeros, entre ellos muchos pensionistas y jubilados. Para el Gobierno municipal del Partido Popular, el n¨²mero de parados "aumenta como en toda la comarca por la crisis de la construcci¨®n".
Juan Carlos Carmona, responsable de la Agencia de Desarrollo Local, dependiente del Ayuntamiento de Torrevieja, admite que el incremento del paro en la localidad "es un dato objetivo", pero detecta "un trasvase" de demanda de empleo de la construcci¨®n a los servicios. El reguero de personas buscando empleo en esta oficina es constante. All¨ª ofrecen informaci¨®n, cursos en la escuela taller o ayudas (salario joven). "Todas las posibilidades para encontrar un empleo las hemos demandado y puesto en marcha", asegura el responsable de esta oficina municipal de Torrevieja, quien enmarca esta situaci¨®n en un contexto de crisis general.
"El que tiene dinero espera a que bajen los precios"
No ha sido un par¨®n, ni un descenso. El frenazo del sector del ladrillo ha sido en seco y de golpe. Pero la crisis no afecta s¨®lo a las constructoras. Arquitectos, suministradores y agentes de la propiedad inmobiliaria tambi¨¦n se ven afectados. Un arquitecto t¨¦cnico, que prefiere mantenerse en el anonimato, lleva ocho a?os trabajando con otro socio en un despacho en el que redactaban unos 20 proyectos para levantar m¨¢s de 100 viviendas. "Llevamos dos meses sin nada, detectamos el a?o pasado una desaceleraci¨®n, pero de golpe no llega ni un proyecto", asegura este especialista, para quien el principal problema es la financiaci¨®n. "Los bancos daban cr¨¦ditos con mucha alegr¨ªa, y ahora no es que falten clientes, es que no pueden comprar porque [los bancos] no se f¨ªan", a?ade.
Los vendedores tambi¨¦n comparten esta impresi¨®n. Ascensi¨®n Aznar, agente de la propiedad inmobiliaria, lleva desde diciembre sin vender nada en su oficina. "El que tiene dinero para invertir, espera, porque se dice que los precios bajar¨¢n, y al que no tiene, los bancos han cerrado el grifo y no le dan pr¨¦stamos", resume muy gr¨¢ficamente esta profesional que lleva desde 1989 vendiendo casas en Torrevieja, una ciudad que ha llegado a concentrar m¨¢s de 600 oficinas inmobiliarias, muchas de las cuales han echado el cierre en los ¨²ltimos meses.
La noruega Mona Nielsen es gestora inmobiliaria. Ella es algo m¨¢s optimista. "M¨¢s que recesi¨®n, creo que ha cambiado el mercado y la gente busca chollos, ahora los clientes compran para alquilar y no para vender como antes", explica Nielsen, cuyos principales clientes son residentes n¨®rdicos que por la subida de los tipos de inter¨¦s en Espa?a ahora traen la financiaci¨®n bancaria cerrada en sus pa¨ªses de origen. El promotor Francisco Culia?ez, con diez obras en marcha, admite que la situaci¨®n es "tensa": descienden las ventas, hay mucha oferta y no apoyan al constructor. "Hay una crisis de p¨¢nico, nadie se atreve a dar un paso", admite este promotor, que se muestra muy duro con las entidades bancarias que han endurecido las condiciones para los pr¨¦stamos inmobiliarios, y para las propias empresas. "Adem¨¢s, en Torrevieja el problema es que hay mucha casa vac¨ªa y el mercado est¨¢ saturado", resume. Todos los profesionales del sector consultados estiman que esta crisis es peor que la de los a?os noventa: "No vemos el final, ni la soluci¨®n".
El comercio cierra asfixiado por los alquileres
El paisaje urbano de Torrevieja tiene un denominador com¨²n: "Se vende, se alquila o traspasa local muy econ¨®mico". Las fachadas de los edificios del centro est¨¢n repletas de locales comerciales cerrados. No hay alegr¨ªa en el gasto y la crisis afecta, seg¨²n algunas estimaciones, a las ventas en los comercios, que han disminuido entre un 10% y un 15%. El comerciante tiene que hacer frente a unos elevados alquileres. Por un local de tan solo 40 metros cuadrados, en la calle de Ram¨®n Gallud, pagan 3.000 euros al mes y por uno de 300 metros, donde quer¨ªa instalarse Zara, piden 40.000 euros mensuales. Estos alquileres asfixian a cualquiera. Por si faltaba algo, la proliferaci¨®n de centros comerciales en la periferia, su apertura durante todos los festivos y los problemas para poder aparcar el coche en el centro tambi¨¦n han ido mermando a la clientela.
Jos¨¦ Riera, presidente de la Asociaci¨®n de Comerciantes de Torrevieja que aglutina a 365 empresas, plantea la "rehabilitaci¨®n" del centro hist¨®rico con el fomento de la instalaci¨®n de cadenas locomotoras, y otras medidas como la peatonalizaci¨®n de calles, aparcamientos gratuitos, descuentos para los miembros de asociaciones de residentes extranjeros o el fomento del ocio en el centro. "No tenemos cines o sitios de pinchos o tapeo", se lamenta este comerciante, que tiene varias perfumer¨ªas y lencer¨ªas en el centro. La asociaci¨®n pretende que Torrevieja se convierta en un "gran centro de compras". Para lograrlo han creado una cartera de locales comerciales disponibles para que se abran nuevas tiendas. "Con las grandes superficies no podemos competir en horarios, pero debemos buscar una estrategia conjunta", considera Riera.
La crisis se palpa en la calle. Los taxistas calculan que sus servicios han descendido entre un 60% y un 70%, en las peluquer¨ªas no se habla de otra cosa y en los bares se detecta menos alegr¨ªa en el consumo. Y otro dato, en las calles se ve cada d¨ªa a m¨¢s personas husmeando por los contenedores de basura para llevarse algo a la boca: a ellos la crisis econ¨®mica les lleg¨® hace mucho m¨¢s tiempo.
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