Corbacho endurece el discurso del Gobierno en inmigraci¨®n

El nuevo ministro de Trabajo e Inmigraci¨®n, Celestino Corbacho, tiene fama de hablar claro. Y ayer hizo honor a su reputaci¨®n. "En este pa¨ªs, todos los inmigrantes que sean necesarios, pero todos con contrato de trabajo", advirti¨® ya 24 horas antes de tomar posesi¨®n del cargo. "El fen¨®meno de la inmigraci¨®n no puede funcionar nunca con la norma del ¨²ltimo que se empadrone", a?adi¨®.

"Si el empleo se quiebra, se debe facilitar el retorno de los extranjeros"

En contra de las apariencias, las declaraciones de Corbacho no implican, de momento, un cambio en la pol¨ªtica desarrollada por el Ejecutivo durante la pasada legislatura. Pero s¨ª suponen un giro de ciento ochenta grados respecto al discurso de su antecesor, Jes¨²s Caldera, quien sol¨ªa incidir en el aspecto solidario de las decisiones del Gabinete sobre los extranjeros.

Un ejemplo. El nuevo ministro declar¨® a la Cadena SER: "Si el tema del empleo se quiebra, se debe facilitar que el [inmigrante] que quiera retornar a su pa¨ªs pueda hacerlo". Caldera nunca lo dijo, pero lo cierto es que la Administraci¨®n viene financiando desde hace m¨¢s de cuatro a?os el retorno voluntario de los extranjeros que han fracasado en su aventura.

Otro ejemplo. "Si antes hab¨ªa 10 personas con derecho a una beca de comedor y ahora son 20, no podemos llevar la pol¨ªtica de d¨¢rsela a los ¨²ltimos 10 que han llegado", dice Corbacho. S¨®lo el a?o pasado el Gobierno entreg¨® a las comunidades aut¨®nomas y ayuntamientos 309,8 millones de euros para financiar la integraci¨®n de extranjeros.

Ser¨ªa l¨®gico pensar que la impetuosa entrada en materia del nuevo ministro puede haber molestado a los miembros m¨¢s antiguos del Gobierno, que se habr¨ªan sentido cuestionados. Sucede al contrario: todos los consultados opinan que el endurecimiento del discurso sobre inmigraci¨®n permitir¨¢ al Gabinete deshacerse de la acusaci¨®n de conceder "papeles para todos", con la que les ha machacado el PP durante la ¨²ltima legislatura.

?sta es la impresi¨®n de un alto cargo de la etapa anterior: "Es posible hacer la misma pol¨ªtica con un discurso distinto. No hay m¨¢s que recordar la etapa de Mariano Rajoy al frente del Ministerio del Interior: mientras las fronteras eran un coladero, ¨¦l se llenaba la boca con dur¨ªsimos discursos contra la inmigraci¨®n irregular". Otro alto cargo conviene: "El discurso del nuevo ministro es m¨¢s c¨®modo para nosotros. Nos permitir¨¢ seguir trabajando sin necesidad de estar permanentemente a la defensiva frente al PP". Incluso el presidente del Gobierno, Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero, ha comentado con entusiasmo las primeras declaraciones de Corbacho.

El nuevo ministro toma posesi¨®n en una coyuntura econ¨®mica completamente distinta de la que disfrut¨® su antecesor. Ahora, el sector de la construcci¨®n expulsa trabajadores inmigrantes al mismo ritmo que los engull¨® durante los ¨²ltimos cuatro a?os. El 40% de las personas que se apuntaron en las listas del paro en 2007 eran extranjeras. Y la mayor¨ªa proced¨ªan de la construcci¨®n.

Celestino Corbacho parece consciente de la coyuntura. Ya se ha puesto en contacto con los l¨ªderes de los sindicatos y de la patronal. El ministro desea reunirse con ellos esta misma semana para "intentar buscar puntos de acuerdo" ante la nueva situaci¨®n. "Ante situaciones dif¨ªciles, debemos marcar objetivos claros", les ha dicho.