Las vi?etas de las islas

"En esta isla he encontrado una camarader¨ªa envidiable. Camino de los 46, las barreras generacionales son m¨¢s laxas, y a todos nos une m¨¢s esta patolog¨ªa de amor por los tebeos que los pocos a?os que nos separan", escribe Tomeu Segu¨ª en uno de los cap¨ªtulos de Cada dibujante es una isla, c¨®mic que recoge trabajos autobiogr¨¢ficos de varios dibujantes de Baleares, la comunidad aut¨®noma invitada este a?o al Sal¨®n del C¨®mic. Sus palabras describen a la perfecci¨®n el ambiente de una escena comiquera que tiene a Mallorca como epicentro y que se ha reunido alrededor de cuatro autores forjados durante los ochenta en la industria barcelonesa de la historieta: Max, Pere Joan, Rafel Vaquer y el mismo Segu¨ª.

La diversidad de estilos y g¨¦neros marca la escena 'comiquera' isle?a

Paco Roca gana el galard¨®n a la mejor obra espa?ola por 'Arrugas'

"No se puede hablar de escuela mallorquina porque no hay unos rasgos estil¨ªsticos comunes, pero s¨ª de una escena de autores conocidos y noveles en la que es muy frecuente la colaboraci¨®n entre unos y otros", explica Max, otro autor que participa en el libro, publicado al alim¨®n por la editorial Inrev¨¦s y el Instituto de Estudios Bale¨¢ricos, en el que tambi¨¦n se recogen historias del mencionado Pere Joan, ?lex Fito, Canizales, Guillem March y Gabi Beltr¨¢n.

"No hay ninguna tendencia que destaque. El c¨®mic que se produce en Baleares es de una gran diversidad", se?ala Pere Joan. El ¨¢lbum colectivo no es el ¨²nico fruto de la presencia de las islas en el sal¨®n, que se clausura ma?ana. En el pabell¨®n de Baleares se puede visitar una exposici¨®n, titulada Historietas, para conocer lo mejor de esta movida comiquera, en la que se dan la mano los sellos Dolmen y RCK Editorial y la revista Esquitx, dirigida a un p¨²blico juvenil.

La exposici¨®n es un complemento necesario a las p¨¢ginas del libro, porque abraza obras de autores tan destacados como Linhart o Pau, entre otros, que han contribuido con fuerza a la eclosi¨®n isle?a. En cualquier caso, el relevo generacional est¨¢ asegurado. Fito, por ejemplo, se enganch¨® a las historietas leyendo El V¨ªbora, publicaci¨®n en la que colabor¨® en su ¨²ltima etapa, y otras cabeceras alternativas ochenteras, pero con el tiempo ha encontrado su propia voz y hasta Peter Bagge (Odio) lo menciona como uno de sus autores favoritos. "En mi estilo hay muchas influencias, pero las m¨¢s importantes son las obras de Max, Chris Ware y todo lo relacionado con el dise?o y el mu?equismo", apunta Fito, que recibi¨® el premio al mejor autor revelaci¨®n del sal¨®n en 2000, el mismo galard¨®n que este a?o ha reca¨ªdo en Carlos Areces, de la factor¨ªa friki de La Hora Chanante.

El palmar¨¦s se completa con los galardones concedidos a Pasqual Ferry, por toda su trayectoria, y a los ¨¢lbumes Arrugas, de Paco Roca (mejor obra espa?ola); S, de Gipi (mejor trabajo extranjero), y Jazz Maynard I: Home Sweet Home, de Roger Ib¨¢?ez, en la categor¨ªa de mejor dibujo de autor espa?ol. Si algo ha quedado claro en este sal¨®n, y en realidad ocurre as¨ª desde hace a?os, es que la escena comiquera espa?ola no tiene nada que envidiar en calidad a la de sus competidores internacionales.