Un cura en el comit¨¦ de ¨¦tica
Pol¨¦mica por la presencia de sacerdotes en ¨®rganos consultivos de los hospitales
La presencia de sacerdotes cat¨®licos en los comit¨¦s de ¨¦tica asistencial de los hospitales p¨²blicos, que asesoran sobre cualquier actuaci¨®n que pueda suponer un conflicto moral o ¨¦tico, ha levantado una gran pol¨¦mica por el convenio que el Gobierno de la Comunidad de Madrid firm¨® el 2 de enero con el Arzobispado de la regi¨®n, que as¨ª lo contempla.
Estos organismos proponen protocolos en casos de abortos o cuidados paliativos
El PSOE ha puesto su servicio jur¨ªdico a disposici¨®n de enfermos y m¨¦dicos
Este hecho ha levantado una gran polvareda y ha llevado incluso al PSOE a pedir "la inmediata retirada" del convenio, y a poner sus servicios jur¨ªdicos a disposici¨®n de m¨¦dicos, familiares y enfermos que puedan sentirse afectados o, directamente, "perseguidos" por esta medida, seg¨²n el responsable de Libertades y Justicia de este partido, ?lvaro Cuesta.
Sin embargo, se trata de una posibilidad que ya establec¨ªa la Comunidad de Madrid en el anterior convenio, de 1997, sobre la asistencia religiosa cat¨®lica en los hospitales. Y a¨²n antes, en 1995 (con el PSOE en el Gobierno), el antiguo Insalud recomendaba que entre los m¨¦dicos, enfermeros, juristas y expertos en ¨¦tica que formasen los "multidisciplinares" comit¨¦s, hubiera "profesionales no sanitarios de la Instituci¨®n que, con preferencia, desarrollen su actividad en los servicios de Trabajo Social, de Atenci¨®n al Paciente/Usuario y de Asistencia Religiosa". Es decir, que se incluyera a unos sacerdotes que ya trabajaban para los hospitales (546 en toda Espa?a) y cuyos sueldos suponen s¨®lo a las arcas de la Comunidad de Madrid 766.000 euros en 2008.
La tarea de los comit¨¦s de ¨¦tica suele ser la de proponer protocolos de actuaci¨®n en casos que puedan plantear cualquier tipo de conflicto ¨¦tico (abortos en avanzado estado de gestaci¨®n, cuidados paliativos, etc¨¦tera) y, en el caso de que alg¨²n profesional lo pida, valorar situaciones concretas en informes no vinculantes. A pesar de que existe la posibilidad de incluir a los sacerdotes, lo cierto es que no suelen estar a no ser que sean expertos por su labor m¨¦dica o su experiencia en filosof¨ªa o bio¨¦ticas.
De hecho, "en no m¨¢s de dos o tres hay un religioso entre sus miembros" en la Comunidad de Madrid, que cuenta con un comit¨¦ en la mitad de sus 32 hospitales, seg¨²n una portavoz de la Consejer¨ªa de Sanidad. Entre ellos, el Hospital de La Paz y el Gregorio Mara?¨®n.
En la regulaci¨®n de la mayor¨ªa de las comunidades no existe referencia expresa a que haya un representante religioso en los comit¨¦s, salvo en la Comunidad Valenciana. Lo mismo que dice la regulaci¨®n madrile?a, aunque en el convenio firmado con la Iglesia cat¨®lica se dice expresamente que el capell¨¢n "formar¨¢ parte del comit¨¦ de ¨¦tica".
Algo con lo que no est¨¢n de acuerdo, por ejemplo, en Andaluc¨ªa. "La Administraci¨®n p¨²blica no es confesional y los hospitales participan de ella", indica el secretario general de Calidad y Modernizaci¨®n de la Consejer¨ªa de Salud, Jos¨¦ Luis Rocha. Tanto las autoridades gallegas como las de Castilla y Le¨®n insisten en que no existe en sus autonom¨ªas acuerdos con los obispos y en Catalu?a recuerdan que los profesionales sanitarios y sus familias siempre tienen la ¨²ltima palabra.
Sin embargo, en el Pa¨ªs Vasco s¨ª hay alg¨²n sacerdote en el comit¨¦ del Hospital de Basurto, en Bilbao: "Se le acept¨® como persona, no por su condici¨®n de religioso. Adem¨¢s tiene una formaci¨®n en Filosof¨ªa", asegura Elena Guti¨¦rrez, la presidenta del comit¨¦. El presidente del comit¨¦ de ¨¦tica del Hospital de Txagorritxu, en Vitoria, Sebasti¨¢n Iribarren, resalta que la presencia en el comit¨¦ es voluntaria y que, de entrada, no dir¨ªa que no a la presencia de un sacerdote en el mismo. "Se estudia su perfil. Lo que se trata es de evitar a los dogm¨¢ticos, sean religiosos o no".
Con informaci¨®n de Walter Oppenheimer (Londres), Octavi Mart¨ª (Par¨ªs), Miguel Mora (Roma) e Isabel Ferrer (La Haya).Con informaci¨®n de O. G¨¹ell, A. D¨ªez, E. G. Sevillano y R. Carranco (Madrid), T. Constella (Sevilla), S. Rodr¨ªguez (Santiago de Compostela), F. Ballsells (Barcelona), E. Azumendi (Bilbao) y F. Sim¨®n (Valencia).
Religiosos que asisten a los enfermos pero sin opinar
- Reino Unido. En el Reino Unido no hay ninguna normativa que permita expresamente la participaci¨®n de sacerdotes en el asesoramiento a los m¨¦dicos sobre el tratamiento a dar a un paciente, seg¨²n portavoces de la Iglesia de Inglaterra y de la Asociaci¨®n M¨¦dica Brit¨¢nica (BMA en sus siglas en ingl¨¦s). Tanto la Iglesia como la organizaci¨®n m¨¦dica suelen participar en las consultas que abre el Gobierno antes de legislar sobre temas m¨¦dicos o sociales, pero los sacerdotes no opinan directamente sobre qu¨¦ tratamiento es el m¨¢s adecuado en casos concretos.
- Francia. La separaci¨®n radical entre las Iglesias (en plural) y el Estado es una de las caracter¨ªsticas de la Rep¨²blica francesa. Las cuestiones que pueden presentar problemas ¨¦ticos, como las relativas a los casos de eutanasia pasiva, son responsabilidad ¨²nica de las familias de los enfermos y de los m¨¦dicos.
- Holanda. Este pa¨ªs fue pionero en aceptar la eutanasia (la ley en vigor desde 2002 goza de una aceptaci¨®n social cercana al 90% de la poblaci¨®n) y en los ¨²ltimos a?os ha desarrollado unidades de cuidados paliativos en todos los hospitales, una red nacional de residencias y un servicio de cuidados a domicilio. En cualquier caso, cada una de las cinco comisiones regionales facultadas por el Gobierno para revisar los expedientes de eutanasia cuenta con un jurista, un m¨¦dico y un experto en ¨¦tica, todos aconfesionales.
- Italia. Los curas son una presencia constante en los hospitales italianos. Tienen incluso libre acceso para asistir a los enfermos terminales (Lazio y Toscana lo han santificado por ley), pero no participan en las decisiones m¨¦dicas. Cada hospital y cada zona sanitaria local (ASL) tiene un comit¨¦ ¨¦tico, formados por un m¨¦dico legal, un anestesista y un pat¨®logo, que ejecutan, cuando se produce la muerte cerebral, la decisi¨®n del paciente sobre la donaci¨®n de ¨®rganos; si el fallecido no la hubiera tomado antes, se consulta a la familia. "La ley obliga a los m¨¦dicos a curar hasta que no haya posibilidad de vida, pero tambi¨¦n a administrar cuidados paliativos a los pacientes terminales que sufren", se?ala Aldebrando Bossi, dirigente m¨¦dico de la ASL.
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