Las diez caras de la electr¨®nica

Bajo en ristre y encorv¨¢ndose sobre la mesa de mezclas, el irland¨¦s Barry Lynn, alias Boxcutter, da la imagen de un dj at¨ªpico. Su sonido es abrasivo y amenazador, en la l¨ªnea de su compatriota Aphex Twin (el geniecillo del videoclip Windowlicker), aunque no tan inclasificable. Boxcutter firma un dub con distorsiones jungle. Que al principio puede sonar hostil, pero al final acaba siendo incluso bailable, a juzgar por el centenar largo de asistentes a su sesi¨®n de ayer en La Casa Encendida.

"En artistas como ¨¦ste se inspiran luego los dj's m¨¢s comerciales", se?alaba Hugo Garc¨ªa, de 34 a?os, y empleado en el sector de las finanzas. Acababa de asistir a la actuaci¨®n de Maja Ratjke, una int¨¦rprete noruega que combina la mesa de mezclas con campanillas y un telemin, y que suena como si Sigur R¨®s se hubiesen quedado atrapados en la pel¨ªcula Ringu.

"Ufff", suelta Carlos L¨®pez, de 25 a?os y ayudante de realizaci¨®n de televis¨®n, cuando se le pide que defina el estilo de la artista a la que acaba de ver. "Digamos que lo que hace son improvisaciones electroac¨²sticas", a?ade.

Maja Ratjke y Boxcutter abrieron ayer el VI Festival Primavera Electr¨®nica. La cita re¨²ne durante el fin de semana a una decena de m¨²sicos procedentes de Europa y Estados Unidos que traen la vanguardia en la creaci¨®n electr¨®nica.

Es el caso del suizo Kalabrese, ense?a del deephouse, la pareja circunstancial Burnt Friedmann y Jaki Liebezeit, veterano bater¨ªa y colaborador de Brian Eno y Depeche Mode, o el d¨²o dubstep de The Bug (Kevin Martin) y la MC jamaicana Warrior Queen.

Tambi¨¦n hay lugar para el techno y el house estadounidense de Echospace (Rod Modell y Steve Hitchell), as¨ª como el hip-hop de Jneiro Jrel y sus Shape of Broad Minds. Un elenco de m¨²sicos electr¨®nicos que van por libre.

Maja Ratjke fue ayer el primer ejemplo de ello. Bas¨¢ndose en su propia voz, encadenaba las reverberaciones electr¨®nicas con el repiqueteo de unas campanillas. La mezcla sonaba a poltergeist arty.

"Usa instrumentos como una caja de m¨²sica china y le a?ade el sonido electr¨®nico. Est¨¢ bien porque es algo completamente diferente", apuntaba Rebeca Augusto, de 29 a?os y periodista musical. "Esto no tiene nada que ver con el resto de artistas del festival", a?ad¨ªa L¨®pez.

Luego fue el turno de Boxcutter y, sobre todo, de Jackson Fourgeaud y su Computer Band. Y la cosa ya son¨® m¨¢s a fiesta techno de toda la vida. Como el que cultivan sus compatriotas y colegas Justice. Los asistentes, la mayor¨ªa en torno a los 30 a?os y muchos de est¨¦tica arty, cabeceaban al ritmo, ahora s¨ª, de una electr¨®nica indomable. El fin de semana empezaba bien.