Un congreso que amenaza con un cierre en falso

Hay una frase que Mariano Rajoy siempre repite cuando est¨¢ tranquilo, lejos de los focos, y le preguntan sobre el ¨²ltimo sobresalto interno. Con un puro entre los dedos, y ese tono de eterna calma, sentencia: "Yo conozco bien este partido, y al final nunca pasa nada". Y tiene raz¨®n, si ese "pasa" implica dimisiones, destituciones, revueltas internas o candidaturas alternativas. La monta?a de la crisis del PP, de nuevo, pari¨® un rat¨®n, y todo parece indicar que al final s¨®lo ¨¦l se presentar¨¢ al congreso de junio, que se convertir¨¢ as¨ª en un c¨®nclave de aclamaci¨®n. Pero mientras ¨¦l dice que "no pasa nada", seg¨²n coinciden la mayor¨ªa de los dirigentes consultados, su liderazgo se deteriora. El PP no s¨®lo ha perdido dos elecciones generales bajo su mandato, tambi¨¦n tiene cada vez menos poder -desplazado de Galicia y Baleares, se hunde en Catalu?a y el Pa¨ªs Vasco y no logra impedir la mayor¨ªa absoluta del PSOE en Andaluc¨ªa- y en el ambiente interno se vive tensi¨®n.

"Camps quiere heredar, que Rajoy le d¨¦ paso en 2009 o mejor en 2011"

Entre los dirigentes se extiende la idea de que este congreso se cerrar¨¢ en falso. Porque muy pocos, s¨®lo los m¨¢s fieles, se imaginan a Rajoy como candidato en 2012. El congreso ser¨¢ as¨ª, coinciden diputados y dirigentes regionales, un previo de la verdadera batalla, la de 2009. Rajoy disfrutar¨¢ de una especie de libertad condicional hasta las elecciones gallegas, europeas, vascas y tal vez catalanas, que est¨¢n previstas de aqu¨ª al verano de 2009.

En el entorno de Rajoy se aferran a la crisis econ¨®mica que ven inminente para desmentir esta tesis. "S¨®lo hay que lograr que el partido est¨¦ unido. La crisis deteriorar¨¢ a Zapatero, y con una oposici¨®n constructiva, de alternativas, que es la que vamos a hacer, podemos estar en condiciones de ganar en poco tiempo. Hace falta paciencia y trabajo", alega un dirigente marianista.

Sin embargo, incluso los m¨¢s fieles est¨¢n preocupados por la imagen del l¨ªder. "Su batalla con Esperanza Aguirre, en la que ella le ha provocado mucho con esa insinuaci¨®n de que Rajoy es socialdem¨®crata, le ha llevado a cometer excesos como el de Elche. La militancia est¨¢ alejada de estos choques personalistas, que no tienen ideolog¨ªa detr¨¢s, que no apasionan a nadie m¨¢s que a ellos", sentencia una persona pr¨®xima al l¨ªder. En su entorno se se?ala ahora que "se le calent¨® la boca", que no estaba escrito y que deb¨ªa haber dicho en vez de "el que quiera que se vaya", "el que quiera que lo diga" o algo as¨ª.

Pese al ataque (Rajoy llam¨® el lunes a la presidenta para asegurarle que no se refer¨ªa a ella), los aguirristas parecen haber dado un paso atr¨¢s, aunque est¨¢n satisfechos porque creen que han logrado que se les vea como alternativa. "Yo quiero ver dentro de un a?o, cuando las cosas vayan mal, a Paco Camps, que en el comit¨¦ ejecutivo en el que Rajoy cont¨® que se quedaba, habl¨® para decir: 'Presidente, con esta decisi¨®n ya hemos ganado las elecciones de 2012", sentencia uno. Los aguirristas creen que quienes han apoyado al l¨ªder, especialmente el valenciano Camps, el andaluz Javier Arenas y el gallego Alberto N¨²?ez Feij¨®o, quedar¨¢n tocados si cae. Aguirre tambi¨¦n apoyo a Rajoy en ese comit¨¦ ejecutivo, pero habl¨® casi forzada, y ha quedado clara su distancia con el l¨ªder.

"Camps quiere heredar, que Rajoy le d¨¦ paso en 2009 o mejor, en 2011, para no tener que estar tres a?os de l¨ªder de la oposici¨®n sin estar en el Congreso", sentencia un bar¨®n. Un ex ministro se indigna ante una idea que le parece ingenua: "El que crea que Mariano no va a luchar para ser el candidato en 2012, es que no le conoce. ?l no se queda para dar paso a otro. Es un corcho, un superviviente, y si ha tomado la decisi¨®n de seguir, es hasta el final".

El PP es en estos d¨ªas un hervidero de rumores, tesis y contratesis. Hay nombres que est¨¢n en boca de todos. A Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, por ejemplo, se le atribuye la decisi¨®n de alejarse de la batalla de sus herederos. Sin embargo, en el Congreso todos mencionan a su yerno, Alejandro Agag, como instigador de un grupo de cuadros que en alg¨²n momento se han planteado la posibilidad de dar el salto para intentar tomar el poder en una revuelta de capitanes.

Podr¨ªa ser la tercera v¨ªa de la que muchos hablan pero que cada d¨ªa es m¨¢s improbable. Lo que s¨ª parece cada d¨ªa m¨¢s claro es que esa tercera v¨ªa no llegar¨¢ de la mano de Rodrigo Rato, deseado por muchos, quien no ha dado ni un solo s¨ªntoma de querer volver. Nadie se atreve a hacer previsiones a largo plazo, y ya casi todo el partido est¨¢ pensando en 2009. 2008 parece ya escrito.