?Infeliz en su trabajo? Pi¨¦nselo otra vez
La mayor¨ªa de los empleados se declara insatisfecho con su trabajo, pero buena parte del bienestar laboral depende de su propia actitud
M¨¢s all¨¢ de las diferencias superficiales, los seres humanos comparten un rasgo m¨¢s profundo en com¨²n: el anhelo de evitar el sufrimiento y experimentar la felicidad. Sin embargo, debido a la vor¨¢gine del sistema de mercado actual y a las exigencias laborales por parte de las organizaciones -que en una gran mayor¨ªa de los casos apenas tienen en cuenta el bienestar f¨ªsico y mental de sus empleados-, se ha convertido en una conquista dif¨ªcil de lograr.
Entre los datos m¨¢s alarmantes destaca el sondeo realizado sobre 10.500 profesionales a finales de 2007 por la firma de b¨²squeda de empleo Monster.es, que aseguraba que m¨¢s de 8 de cada 10 profesionales (unos 15 millones de espa?oles) se siente insatisfecho en su trabajo. Y lo cierto es que al brillar por su ausencia, la felicidad empieza a ser una palabra "maltratada" por la sociedad, pues "suele confundirse con emociones como el placer y la satisfacci¨®n de conseguir aquello que deseamos", afirma Juan Salvador Verges, autor de La felicidad de Alicia (Planeta Empresa), que lleva a?os investigando sobre el tema.
Una de las grandes falacias es que la felicidad depende de algo externo
"Es necesario conocernos para saber c¨®mo nos esclaviza la mente"
Sin energ¨ªa y salud f¨ªsica es mucho m¨¢s dif¨ªcil poder cambiar de actitud
Pero alcanzar este tipo de triunfos externos "no implica sentirse verdaderamente feliz por dentro", es decir, "experimentar un duradero equilibrio interno", a?ade Verges. En su opini¨®n, "para no ser confundidos por el continuo bombardeo de mensajes publicitarios sobre lo que tenemos que ser, hacer y poseer para sentirnos felices, hemos de guiarnos por lo que experimentamos en nuestro interior, que debe ser nuestra primera y ¨²ltima referencia". Y a?ade: "S¨®lo as¨ª es posible conocer y comprender la verdad que nos libera del sufrimiento y que nos lleva a disfrutar de una vida personal y profesional consciente, equilibrada, creativa y llena de sentido".
M¨¢s que nada porque "una de las grandes falacias de nuestro tiempo, que forma parte de nuestra compleja programaci¨®n mental, es que nuestra felicidad depende de algo externo", apunta la coach Maite Bar¨®n, directora de Building Visionary Organisations. "Pero esta mentira nos lleva a caer en el olvido de nosotros mismos, dedic¨¢ndonos excesivamente a lo externo y apeg¨¢ndonos a personas, cosas y profesiones que creemos que van a generarnos dicho estado interno", a?ade Bar¨®n, experta en Programaci¨®n Neuroling¨¹¨ªstica (PNL), con clientes como Reuters, BT, Carat, Warner Bross y L'Oreal.
Y dado que "son muy pocas las veces en que la realidad se adapta a nuestras necesidades y expectativas ego¨ªstas y egoc¨¦ntricas, viviendo de esta manera somos c¨®mplices del malestar que nos crea la frustraci¨®n y la resignaci¨®n de no conseguir lo que esper¨¢bamos", expone Bar¨®n. Pero lo cierto es que la felicidad no tiene ninguna causa externa. "M¨¢s bien es una consecuencia de querer mirar nuestro mundo interno y estar dispuesto a trabajar con lo que va saliendo", a?ade.
Se trata de "nuestra verdadera naturaleza, cuyo contacto recuperamos cuando eliminamos todas las obstrucciones de nuestra mente, como el deseo, el odio, la ira, la ansiedad, la soberbia, la vanidad, el rencor, el estr¨¦s, la envidia, la preocupaci¨®n, el apego, la avaricia, el resentimiento, la culpa, la tristeza, la expectativa, el enfado y el miedo". Seg¨²n Bar¨®n, "solemos desarrollar estas percepciones mentales cuando nos orientamos obsesivamente a una meta o cuando no sabemos lidiar con inteligencia emocional nuestras relaciones personales en la oficina".
Aunque "no es un trabajo f¨¢cil mantenerse ajeno a algunas de estas adicciones mentales, s¨ª hay que tener en cuenta que contaminan nuestra manera de pensar y, en consecuencia, de sentir, lo que en ¨²ltima instancia genera lo que experimentamos en nuestro interior".
As¨ª, para salirse del c¨ªrculo vicioso de la insatisfacci¨®n, "lo principal es conocernos para comprender de qu¨¦ manera podemos liberarnos de la esclavitud de la mente". S¨®lo as¨ª "llegaremos a ser due?os de su funcionamiento". En eso consiste "vivir conscientemente", concluye Bar¨®n.
Este malvivir encuentra su causa en "el condicionamiento sociocultural inculcado durante la infancia, a partir del que hemos desarrollado una serie de falsas creencias que suelen gobernar inconscientemente nuestra vida, como que los factores externos son los que originan nuestro estado interno", sostiene Gonzalo Mart¨ªnez de Miguel, director del Instituto de Formaci¨®n Avanzada (INFOVA), especializado en desarrollo directivo. "Y dado el panorama laboral, lo normal es que la gente viva el trabajo como una esclavitud, creyendo que es la causante de su sufrimiento".
Sin embargo, "la experiencia de los profesionales, lo que sienten en su interior, no depende de lo que les pasa, sino de la interpretaci¨®n y la actitud que toman frente a sus circunstancias", asegura. A su vez, "estas interpretaciones est¨¢n sujetas al sistema de creencias de cada uno", a?ade. De ah¨ª que "en vez de vivir como v¨ªctimas, culpando a los dem¨¢s, a la empresa o al sistema de su malestar, es necesario que cada profesional se responsabilice de su estado interno", dice Mart¨ªnez de Miguel.
M¨¢s que nada porque "ya que no podemos transformar la realidad externa -pues ¨¦sta tiene su propio ritmo de cambio y evoluci¨®n-, debemos centrar nuestro esfuerzo en cambiar lo que s¨ª depende de nosotros: nuestra manera de vivir las cosas que nos van pasando", concluye el director de INFOVA, que cuenta con clientes como Deustche Bank, Alcampo y Vodafone. Eso s¨ª, para lograr este equilibrio interno no basta con saber c¨®mo afrontar las adversidades del d¨ªa a d¨ªa laboral. "Para poner en pr¨¢ctica un nuevo cambio de actitud, mucho m¨¢s proactivo y constructivo, es necesario gozar de la energ¨ªa suficiente para vivir m¨¢s conscientemente, creando espacio entre lo que nos pasa y nuestra consiguiente reacci¨®n", se?ala el coach Juan Carlos Cubeiro, socio director de la consultora Eurotalent, que imparte cursos de autoconocimiento.
As¨ª, "es b¨¢sico cuidar la alimentaci¨®n, beber mucha agua, respirar profundamente m¨¢s a menudo, dormir ocho horas, practicar ejercicio con regularidad, trabajar el pensamiento positivo y buscar momentos de silencio para no hacer nada, simplemente relajarse", a?ade. Gracias al excedente de energ¨ªa que genera llevar un estilo de vida equilibrado y saludable, "es mucho m¨¢s f¨¢cil dejar de reaccionar impulsiva y negativamente, aprendiendo a aceptar todo aquello que no depende de nosotros, preservando as¨ª nuestra paz interior".
Con el paso del tiempo "y al ir entrenando conscientemente", llega un momento en que "la realidad externa ya no suele hacer que nos provoquemos malestar con tanta frecuencia y regularidad, lo que nos permite recuperar la serenidad perdida", afirma Cubeiro. Y concluye: "Como todo en la vida, es una cuesti¨®n de voluntad y aprendizaje". -
Cambio de paradigma
"Para dejar de ser una v¨ªctima de la realidad externa, que escapa a nuestro control, hemos de ser due?os de nuestra realidad interna, es decir, de nuestra mente y nuestros pensamientos", afirma Gonzalo Mart¨ªnez de Miguel, director del INFOVA.Y para lograrlo, "es necesario que nos comprometamos con nuestro autoconocimiento y desarrollo personal, de manera que podamos experimentar un cambio de paradigma en la manera de vernos a nosotros mismos y, en consecuencia, a la realidad de la que todos formamos parte". No en vano, "no vemos el mundo como es, sino como somos nosotros".As¨ª, a la hora de tomar decisiones, "en vez de que prevalezcan las cuestiones externas -como el dinero, la imagen, el estatus o la calidad y cantidad de nuestras posesiones-, si realmente queremos ser felices, debemos priorizar nuestro bienestar interno". Y concluye: "Hemos de ser conscientes en todo momento de c¨®mo nos sentimos y cu¨¢les son las causas y los efectos de lo que decimos, pensamos y hacemos, tanto sobre nosotros mismos como sobre los dem¨¢s". -
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.