Cerca de los cincuenta y a¨²n sinti¨¦ndose virgen
Madonna estrena su disco en privado en Nueva York
Poco importa que Madonna apenas tenga voz y que musicalmente dependa de una cuidad¨ªsima producci¨®n o de tener colaboradores con talento como Justin Timberlake o KanYe West. La reina de la m¨²sica disco-comercial sigue sacando ¨¢lbumes y coloc¨¢ndolos en el n¨²mero uno de las listas de ventas, como ha ocurrido con su ¨²ltimo single, Four minutes (interpretado a dos voces con Timberlake), y como previsiblemente ocurrir¨¢ con su nuevo ¨¢lbum, Hard Candy, que sali¨® a la venta esta semana en todo el mundo.
Para celebrarlo la cantante, que cuida su musculatura tanto como su vestuario, ofreci¨® el mi¨¦rcoles un breve concierto en el Roseland Ballroom de Nueva York al que asistieron unos 2.000 invitados seleccionados en su mayor¨ªa a trav¨¦s de concursos organizados por radios de todo el mundo. En realidad s¨®lo interpret¨® seis canciones. Pero para los asistentes fue m¨¢s que suficiente, sobre todo para poder decir "yo estuve all¨ª".
La artista hizo su histri¨®nica aparici¨®n sobre el escenario, sentada en un trono y con un cetro en la mano, un regimiento de brazos armados con c¨¢maras y tel¨¦fonos m¨®viles se alz¨® sobre las cabezas de los asistentes y fue literalmente imposible ver nada de su primer tema, Candy shop, excepto a trav¨¦s de las minipantallas ajenas. Y all¨ª estaba ella, divina en su ajustad¨ªsimo conjunto negro, exudando sexualidad como s¨®lo Madonna parece saber hacer, y eso a sus 49 a?os. Sin duda lo suyo es el directo, no porque su voz sea buena, sino porque ella es lo que en EE UU se define como una aut¨¦ntica entertainer.
Entre el primer y el segundo tema Madonna le dio un trago en plan macarra a una botella de champ¨¢n y se coloc¨® una guitarra ac¨²stica en el regazo. No se trataba de tocarla, ya que apenas lo hizo: se trataba de parecer m¨¢s rockera. Y funcion¨®, en cuanto abord¨® Miles Away, otro tema de su nuevo ¨¢lbum, el p¨²blico se derriti¨®.
El punto ¨¢lgido en el concierto lo puso Justin Timberlake, que acudi¨® al encuentro de su colaboradora para cantar y bailar juntos -en ocasiones muy juntos- el single estrella del nuevo disco, Four minutes. No faltaron su anterior superhit, Hung up y otro cl¨¢sico, Music.
Hace 25 a?os Madonna le contaba al mundo que se sent¨ªa Like a virgin, el tema que la hizo definitivamente c¨¦lebre. Y a pesar del tiempo, seg¨²n dijo durante el concierto, se sigue sintiendo as¨ª: "Cada vez que saco un disco me siento como la primera vez". Hard Candy ser¨¢ el ¨²ltimo que editar¨¢ con Warner Music antes de entregarse de lleno a un contrato multimillonario de 10 a?os con la empresa de conciertos Live Nation.
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