El t¨ªtulo escondido

Reflexi¨®n inicial, entre lo mercantil y lo art¨ªstico: la presente pel¨ªcula es una adaptaci¨®n de la novela de Unai Elorriaga Un tranv¨ªa en SP, pol¨¦mico Premio Nacional de Narrativa 2002 y lo suficientemente vendida como para poder utilizar su tir¨®n comercial, sobre todo cuando estamos ante una producci¨®n modesta, dirigida por un realizador primerizo y de dudoso futuro en la taquilla espa?ola. Sin embargo, se ha optado por cambiar el t¨ªtulo y acoger la frase final del libro: Un poco de chocolate. ?Era Un tranv¨ªa en SP un t¨ªtulo poco comercial? Quiz¨¢, pero al menos posee un bagaje literario. Un poco de chocolate no tiene ni bagaje ni capacidad de arrastre.

M¨¢s all¨¢ del asunto del enunciado, la novela de Elorriaga estaba basada en la fragmentaci¨®n y la digresi¨®n, como reflejo de la mente del protagonista, enfermo de alzh¨¦imer. El novel Aitzol Aramaio y el experimentado Michel Gaztambide (La caja 507, La vida mancha), director y coguionista de Un poco de chocolate, no han sabido (o quiz¨¢s querido) reflejar en lenguaje cinematogr¨¢fico la citada metodolog¨ªa, y han optado por un relato en clave naturalista a la que se a?aden impostaciones on¨ªricas que s¨®lo funcionan en contad¨ªsimas ocasiones, caso de la escena del baile entre los vivos y los muertos.

Mientras, la capacidad visual demostrada por Aramaio en su premiado corto Terminal (2002) apenas se confirma. Si all¨ª, en una historia sin di¨¢logos, consegu¨ªa retratar la desesperaci¨®n y el desasosiego a bordo de un autob¨²s, aqu¨ª sus recursos visuales (como la nieve cayendo sobre el enfermo) resultan m¨¢s bien toscos y acaban ablandando demasiado una historia que quiz¨¢ debiera poseer un reverso tenebroso, por lo que en diversas secuencias el sentimentalismo y la melifluidad se acaban imponiendo a lo verdaderamente tierno.

Tr¨¢iler de 'Un poco de chocolate'